Capitulo XII

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Diciembre 26, 2017.

Estoy viendo por la ventana, tengo sed y hambre, pero jamás comería lo que me habían tirado, me sentía como si fuera un animal violento que lo encadenan y le tiran los alimentos...

En momentos como estos solo me queda recordar. Solo me queda revivir aquellos momentos que me endurecieron el alma. Solo me queda volver a ver de dónde salió la fría Chesna.

Desde que tengo uso de razón mi familia ha sido un caos, con unos padres que tenía una relación disfuncional. Mi madre amaba su habitación, eso o, odiaba estar con nosotros. En cada evento no soportaba estar tanto tiempo... siempre huía. Recuerdo que cuando tenía ocho años mi padre la llevo al médico. La diagnosticaron con Trastorno depresivo Mayor. Le recetaron unos medicamentos. Una vez le pregunté a papá para qué era lo que ella tomaba, él me contestó:

― Mami necesita esos pequeños dulces que son solo para adultos, esos dulces hacen que ella se sienta feliz.

Fruncí el ceño-¿No es feliz con nosotros?

Sonrió con tristeza-A veces el ser humano necesita de incentivos para poder ver la realidad. O en este caso la felicidad.

Para ese entonces yo no entendía a lo que se refería. Ahora sí.

Ella no cambio nada. Yo escuchaba las continuas suplicas de mi padre para que se tomara los antidepresivos, ella no lo hacía, decía que la dejáramos en paz. El par de meses que si se tomó los medicamentos dio un giro. Salía de su dormitorio, se arreglaba, hacia la comida... aunque había momentos en los que se quedaba viendo a la nada por mucho tiempo. Mi padre decía que a la Bárbara que había conocido se parecía a la que estaba por recuperar. Que ella si era con la mujer que se había casado.

Pero luego todo volvió a antes. Ella en su dormitorio todo el día. Ella sin ducharse por semanas. Ella ignorando a todos. Ella haciéndose daño. Ella llorando en las noches. Ella sin comer días. Ella de nuevo.


Enero 27, 2017.

Viernes. Estoy exhausta, ha sido un largo día. Hoy no fui al bar, solo Salí de trabajo y me dirigí a casa. Una parte de mi quería estar bien para mañana, para ellos.

En la parte de enfrente de mi casa hay una oxidada camioneta, hace dos años que no había un auto aparcado allí, me estremezco con solo recordar el ultimo. Saco las llaves y abro la puerta. Paso por el pasillo, me dirijo a las escaleras...

― Buenas noches-escucho una voz masculina, me giro y lo que veo me da repugnancia.

― ¿decías algo, querido?-Bárbara sale de la cocina, al verme se queda petrificada-oh, Chesna, llegaste.

Allí esta ella. Cabello negro, ojos marrones, piel pálida, delgada. No recuerdo la última vez que la había visto, ¿hace seis meses? ¿Un año? ¿Dos?

¿Importa?

No.

― Me alegro de conocerte al fin.-habla de nuevo el hombre. Es un hombre que parece de cuarenta años, rapado, ojos grises; vacíos, piel bronceada, se ve corpulento. Y lo que me da más repugnancia es el significado de que ande con el torso desnudo.

― Chesna, él es John- dijo vacilante-un amigo.

― ¿un amigo?-dijo él, su voz me daba escalofríos.

― Espero no te importe que este aquí, querida...

― Me importa una mierda con quien te metes. Pero no en mi casa-dije, subí las escaleras.

Entre a mi habitación y cerré con un portazo. Solo quería descansar y me encuentro con eso. Quisiera que este año pase rápido y así poder irme. Me iría sin importar nada, pero no le voy a dejar la casa y el dinero que me dejo mi padre. Hasta que cumpla los 18 puedo reclamar lo que es mío. La casa es mía. La venderé antes de irme a los ángeles. Es en el último lugar en el que quiero estar.

Me recuesto en la cama. Me siento frustrada. Todo el sentimiento regresa, todos. No lograré dormir. Me levanto y salgo. Me apresuro a salir antes que alguno me diga algo. Al salir respiro hondo, esa casa es como mi muerte. Sé a dónde ir, es lo que necesito. Estar despierta, pero dormir mis sentimientos, recuerdos, rencores, dolor... Ahogarlos, igual que mi paz.



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El trastorno depresivo mayor (MDD por sus siglas en inglés) (también conocido como , depresión mayor, depresión unipolar o trastorno unipolar depresivo; o como depresión recurrente en el caso de presentarse repetidos episodios) es una que se caracteriza por un invasivo y persistente acompañado de una baja y una pérdida de interés o de placer () en actividades que normalmente se considerarían entretenidas. El término "depresión" es utilizado de muchas formas diferentes. Es comúnmente utilizado para referirse a este síndrome, pero puede referirse, tanto a otros diversos estados de ánimo o a un estado de ánimo en específico. El trastorno depresivo mayor es una condición que afecta de manera adversa a los familiares, compañeros de trabajo o de estudio, a los hábitos de sueño y alimentación y la salud en general. Las personas con depresión mayor han llegado a cometer suicidio y cerca del 60% de las personas que cometieron un suicidio, sufrían de depresión o de algún otro desorden de ánimo.​

-Viviendo en la realidad de las letras-

Encadenada Oscuridad.Where stories live. Discover now