Nos sentamos en la acera y comenzamos a hablar un buen rato. Empecé a contarle como eran mis antiguos amigos, como había sido la mudanza.. hasta que note en un momento de que ya no me estaba escuchando.. comencé a hablarle de cualquier cosa..
-Y fue así como mi vaca, mi araña y yo recorrimos todo Egipto.. también encontramos a Miley Cyrus haciendo twerking con un camello..- Dije mirándola con cara de loca.
-Oh.. que interesante..- Dijo con tono de que estaba embobada. Puse mi mano en su hombro, la moví hacia un costado y le dije
-Natalia, vamos.. ya se que no me estas escuchando.. te dije que me encontré a Miley Cyrus haciendo twerking y tu “OH.. QUE INTERESANTE”..- Natalia seguía embobada y le volví a hablar..
-¡Vamos mujer! ¿¡Que miras!?- Grite y al fin me dijo algo coherente..
-Acksdmas.. lo siento.. es que, estaba mirando algo..- Dijo tomándose el hombro.
-Si, se que estabas mirando algo pero, ¿Qué estabas mirando?- Dije mirándola con cara de pícara.
-Esta bien.. estaba mirando a Norman- Señalo disimuladamente con su dedo a la casa de enfrente. Y allí estaba.. un chico de unos 14 años, cabello castaño claro con unos ojos celestes profundos..
-Uhh.. al parecer tenemos a un vecino apuesto, eh..- Dije chocando mi brazo contra el suyo.
-¡Shhh! ¡Calla! Puede escucharte..- Dijo tapándose la cara mientras yo reía..
-Esta bien.. pero algún día voy a ir a esa casa, y voy a decir que estas loca por el..- Dije largándome una carcajada..
-NO TE ATREVERÍAS. Dijo Natalia con sus ojos como platos..
-OHHH, Claro que si..- Dije ya casi parándome para ir hasta allí. Pero, el bolsillo de mi chaqueta comenzó a vibrar, metí mi mano en él y saqué mi móvil.. tenía un mensaje de mi madre diciéndome de que ya era hora de volver.. asi que me puse de pié..
-¡¿A DÓNDE VAS?!- Dijo Natalia exaltada. Largué una carcajada y le contesté..
-Debo irme.. esta ves te salvó mi madre.. pero la próxima ves..- Y no seguí la oración, ya que sabía que Natalia iba a saber como terminaría..
-Muy bien.. te cortare las cuerdas vocales ____.- Rió..- Nos vemos mañana..-
-Claro.. pasaré por aquí..- Reí, di media vuelta y comencé a caminar hacia mi hogar. Estaba llegando, y miré hacia la casa de Chandler.. no se encontraba ahí.. seguramente tubo que entrar. Abrí la puerta y allí estaba mi padre.. tratando de conectar una nueva TV.. Era mucho mejor que la de antes. Sentí un muy rico olor del otro lado de la casa.. ¡Y ALELUYA! Era mi madre con dos cajas de Pizza.. Se me hizo una sonrisa en el rostro y fui hasta donde estaba ella.
-Hola..- Dije sonriendo y con cara de ¿Puedo sacarme una porción? Estoy muerta de hambre…….
-Hola cariño.. espera que tu padre ponga la nueva TV y ya podrás “Devorar” como haces siempre..- Dijo riéndose mientras mi sonrisa se transformaba en un seño fruncido. Luego de unos minutos pudimos comer, luego llegó la hora de dormir, ¡y no teníamos nuestras camas! Si.. tuvimos que hacernos “camas” con nuestra ropa y dormir como pudiéramos.. ya que todos los muebles llegarían durante la mañana. Esa noche fue muy incomoda para todos. A la mañana.. mi madre hizo el desayuno para los tres.. luego de eso, salí hacia el patio trasero y me recosté en el césped verde con mis auriculares observando las nubes.. era algo muy lindo.. tranquila, con música, pasando el tiempo.. llegó mi padre, se recostó junto a mi, y se puso a mirar el cielo con migo..
-¿Te gusta estar aquí?- Preguntó mirando hacia el cielo.. tenía la música baja y pude escucharlo.. -La verdad, al principio no estaba muy convencida.. pero, me gusta.. es muy bonito todo aquí..- -Pues.. menos mal que estas feliz, porque eres una de las cosas más importante, ¿sabes?- Dijo dándome un beso en la frente..
-Si papá.. lo se..- Dije riendo. Luego de unos segundos de eso.. mi padre se levanto y fue a atender la puerta porque creo que habían llegado los muebles. Mi madre y mi padre estuvieron ordenándolos un buen rato. Llegó la hora de almorzar y comimos algunas hamburguesas que mi madre había comprado. La mañana se había pasado volando.. mi padre me había ayudado con mi cama y algunos de mis muebles.. hasta que tocaron la puerta. Mi madre abrió..
-¡____! Llegó Chandler..- Menos mal que mi padre estaba en patio trasero arreglando los arbustos.
-Pues, pues ya voy mamá..- Tomé mi móvil y salí corriendo de mi habitación, bajé las escaleras y ahí estaba.. El chico más perfecto que vi en toda mi vida..
-Hola ____, ¿vamos?- Dijo con esa hermosa vos que tiene y sus cachetes se tomaron un color rojizo al igual que los míos al escucharlo.
-Hola Chandler.. por supuesto..- Dije y mi madre solo nos miraba y sonreía. Salí de la casa y se cerró la puerta. Estábamos solo Chandler y yo.. no sabía de que hablar, los nervios me comían..
-Pues.. comenzaremos por aquí.. ¿te parece?- Dijo señalando con su dedo el lado donde era la casa de Natalia.. Yo solo asentí y comenzamos a movernos.
-Asi que.. ¿de donde vienes?- Dijo mirando hacia abajo..
-No soy de aquí, es decir.. soy Latinoamericana..-
-¡Que bien! Eso te hace más especial..- Dijo mientras su rostro se volvía rojizo de esas palabras.. yo lo miré y por dentro juro que moría.. DIOS, ERA MUY PERFECTO.
-Pues.. gracias.. nadie nunca me dijo que era especial..- Dije mirando hacia el piso..
-Y.. ¿tienes novio? Pregunto mientras su rostro se volvió aún más rojizo y frotaba su cuello..
