Capitulo 5

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Al cortar el beso debido a la falta de oxígeno, una sonrisa ladina se formo en los labios de Reborn mientras que se aproximaba a su nuevo objetivo.

-Mmgh... Aa... - Gimio el castaño al sentir la lengua del azabache jugar con sus pezones- Reborn... Ugh..

-Sigue Dame-Tsuna - Dijo el hitman comenzando a acariciar la entrepierna ajena- Tus gemidos son como música para mis oídos.

-Ahh... Pervertido... - Conesto con dificultad, pues la exitacion que comenzaba a sentir lo nublaba por completo.

-Pero te gusta ¿No es asi? Entonces el pervertido eres tu- Hablo Reborn con voz sensual lamiendo el cuello del castaño desde el hombro hasta la barbilla.

-Aaa... Maldito.

Poco a poco las prendas que ambos integrantes de la pareja poseian fueron siendo apartadas de sus cuerpos, hasta que quedaron como Dios los trajo al mundo.

-Admitirlo daña mi orgullo, Dame-Tsuna - Dijo el mayor deslizando sus manos por todo el cuerpo ajeno - Pero me hiciste demasiada falta estos meses, tú y tu ser.

-¡Aaahhggg! - Tsuna gimio con fuerza al sentir como su miembro era masturbado por el mayor.

-Vaya, yo te recordaba un poco menos ruidoso... Tal vez debo de volver a entrenarte- Dijo el hitman aumentando la velocidad de sus movimientos a la vez que regresaba su boca a los pezones ajenos.

-Aaa, no seas... ridículo... Aaaaa... Mmh - Hablo intentando reprimir sus gemidos sin mucho éxito

Reborn sonreía gustoso al ver como el cuerpo debajo suyo se arqueaba a la vez que su mano se mojaba un poco con un líquido caliente.

Tsuna observo con la respiración entre cortada como su esencia en las manos ajenas era lamida y degustaba.

-Nada mal- Dijo el azabache después de lamer sus dedos - Pero no creas que voy a dejar que seas el único aquí que goze- Dicho esto, Reborn tomo el aun débil cuerpo del castaño y puso su cara cerca de su propio miembro - Tu también tendrás que esforzarte un poco.

El castaño no se hizo del rogar, pues tan pronto recupero la respiración empezó a lamer el sexo ajeno como si fuera una paleta de hielo en verano.

Cuando escucho que Reborn empezaba a suspirar, procedio a meter por completo el miembro en su boca.

-Ah... No lo haces mal... Dame, Tsuna.- Dijo el hitman de forma pausada mientras apreciaba el hermoso sonrojo que su ex-alumno poseía mientras cumplía con su labor de complacerlo- Mmh... Pero puedes hacerlo mejor- Dicho esto, Reborn tomo de la cabeza del castaño y empezó a moverla hacia arriba y hacia abajo para que sus movimientos fueran mas rápidos.

Al cabo de poco tiempo, Reborn se sintió cerca, pero la boca de su castañito no era precisamente el lugar en el que quería acabar, asi que freno los movimientos del ojimiel y se volvió a posicionar sobre de él.   

-Lamelos- Dijo mostrando tres dedos al menor.

Tsuna se dio cuenta fácil y rápidamente de las intenciones del azabache.

-Re-Reborn... No... Lo vas a matar- Tsuna intentaba apartar la mano del mayor torpemente.

-Te dije que seria cuidadoso ¿No? - Reborn puso una de sus manos en el vientre ajeno - No voy a hacerle daño, lo prometo.

-D-De acuerdo... Confiaré en ti.

Dicho esto, Tsuna comenzó a lamer los tres dedos de su pareja, y cuando este sintió que sus dedos ya estaban lo suficientemente humedecidos procedio a retirarlos de la boca del castaño y los dirigió al recto ajeno.

Dulce Engaño Where stories live. Discover now