Jungkook hasta se arrepentía de decir aquello porque llegaba a ahogarse de cualquier manera, no soportaba la idea de que se dejara de ver con el chico más bajo y con esas lindas mejillas que siempre estaban rojas. Mordió su labio inferior con fuerza y ocultó un poco su rostro. No quería que el otro le viera sufrir tanto al saber que no se verían en el tiempo que demorara en hablarle a la mujer y contar todas las cosas. Suspiró, desordenando su cabello y frunciendo el ceño sin querer ver como Jimin le miraba con esos bonitos ojos que estaban brillosos al querer llorar. A Jimin también le dolía eso de que no se verían después de la escuela, ya que eran los momentos en donde podían estar en paz y hablar lo más fuerte que quisieran o tan solo pasear pero estando tomados de la mano. 

Algunas veces, ni siquiera necesitaban hablar para que los momentos fueran perfectos.

—Eso no es justo...—murmuró a punto de llorar el pequeño Park Jimin, no quería dejar de tener esas pequeñas citas con el muchacho que le gustaba, claro que no. Trató de hacer un pequeño berrinche pero solamente se dedicó a mirar sus dedos con mucha pena, no estaba nervioso porque debería decirle a su madre todo, porque de seguro el sentimiento de terror vendría cuando fuera la hora de abrir la boca. La verdad es que el mal sentimiento era solamente porque no deseaba dejar de verse con Jungkook. Era algo hasta doloroso para él. Así que solamente se quedo en silencio con la cabeza gacha.

—Hey, no pongas mala cara —le tomó el rostro con una delicadeza desesperante —. Eres más hermoso cuando sonríes y yo solamente deseo el verte feliz —acarició su rostro —. Así que quita ese puchero por una bella sonrisa tuya, bebé.

—¿Me dejarás de ver? —la cara le ardía. Se avergonzó de lo tonto que se podía colocar con una simple amenaza. Ambos se podrían seguir viendo en clases y horas de descanso pero no era igual —. Dijiste que no me dejarías nunca.

—Y no lo haré —apretó las mejillas del más bajo, sacándole un quejido al pobre y cerrando sus ojos en expresión de molestia ante eso —. Ow, no pongas esa cara de enfado, te ves más bonito cuando estás feliz, aunque ahora pareces un pollito.

Antes de dejarle sus pobres cachetes en paz, le dio un rápido beso en la frente. Haciendo que llegara a detener su respiración. Aunque a Jimin le gustaran esos gestos —la verdad es que los amaba —, le daba vergüenza aún tener que recibirlos. Era extraño aún que alguien te trata de una forma distinta a los demás. Había soportado mucho el ser tratado como alguien que solamente se metía con todo el mundo y era repulsivo con ello. Ciertamente si él conociera a alguien así, no diría nada ya que después de todo es su vida, con tal que no hiciera daño a nadie ni a sí mismo o misma, entonces bien. Aquello se lo inculcó su madre, y estaba feliz por esa enseñanza. Muchas veces era tratado de desinteresado pero solamente no veía necesario juzgar la vida de otros ni reclamar nada, porque tampoco los conocía como para hacer eso.

Jimin sonreía tímido. Entonces vio como el castaño caminaba un poco y le siguió un poco rápido, llegando a chocar con su espalda. Maldijo su torpeza y cuando iba a dar una explicación ante lo tonto que podía llegar a ser, se mordió la lengua, tan fuerte que incluso nuevas lágrimas amenazaron con salir a la luz, pero una mano acariciando su cabello le había comenzado a calmar, hasta sus ojos se cerraron. Que agradable era sentir el cariño de la persona que más querías. Algo que tal vez nunca podría llegar a explicar por completo, pero era feliz de esa manera. No era bueno en expresarse, antes lo fue pero ya debía olvidar un poco su personalidad que muchas veces llegaba a gritar en una simple conversación, alguien que podía sonreír tranquilamente sin tener que agachar su cabeza y ocultar esa sonrisa contra  su mano. Pero era lástima que todas esas seguridades se hayan escondido tan bien que fueron olvidadas por Jimin.

—Vamos bebé —dejando el cabello del chico, había comenzado a caminar, estando cuerdo en que el mayor le estaba siguiendo y muy seguramente viendo con esos hermosos ojos que poseía, mientras estaba sonriendo un poco y con ese tierno manto color rosa que adornaban sus mejillas.

El más pequeño en estatura estaba tal y como Jungkook se lo imaginaba. Aunque esta vez, estaba mirando la mano del chico. Sus manos picaban de solamente querer sentir aquella calidez que siempre tenía el cuerpo del castaño, haciéndolo sentir seguro y unas bonitas sensaciones en el estomago. Incluso le gustaba ver esa expresión de asombro que a veces colocaba al tomar su mano, ya que como la de Jimin usualmente estaba fría, le hacía dar un pequeño salto. Pero no le apartaba, es mas, las colocaba cerca de su boca para besar sus nudillos y tratar de abrigar un poco más las manos de Jimin, quien le miraba con un amor inigualable.

Esta vez, alcanzó la mano de Jungkook y le vio reaccionar un poco asustado, otra vez su mano estaba demasiado helada y se disculpó en un susurro. Ambos caminaron tomados de la mano y felices. Pero no siempre podrían estar de esta manera; por ello debían de atesorar cada momento que se les daba.

Demoré en actualizar porque estaba terminando el fic

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Demoré en actualizar porque estaba terminando el fic.
ฅ(•ㅅ•❀)ฅ este capítulo traía más salseo, pero Wattpad andaba en sus días cuando lo guardé y solamente me guardó la primera palabra de '¿Le dijiste a tu madre?' Que lástima.  Ah, que wena soy ahrno no, perdón los errores y muchas gracias por leer. ( T-T)尸

Pd; haRÉ UN GRUPO DE WSP ¿ALGUIEN QUIERE? QUIEN QUIERA MANDE NÚMERO :'( ahq /ignorada en el olvido.

Pd; haRÉ UN GRUPO DE WSP ¿ALGUIEN QUIERE? QUIEN QUIERA MANDE NÚMERO :'( ahq /ignorada en el olvido

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
EX'S @kookmin.fanfic.Where stories live. Discover now