C14 - Raven

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Ese mismo día fuimos al centro comercial. Antes de ir le pedí permiso a Kori, quien me pregunto por qué necesitábamos ir. Yo apenada respondí - Su cuarto - Ella asintió sonriendo me dijo - Pásenlo bien - mientras me retiraba escuche a Gar quejándose de que nosotros teníamos un día libre, mientras que ellos estaban entrenando.

Espere a Damian a la salida de la torre. Cuando llego le sonreí y le dije - Sin poderes ¿recuerdas? - Suspiro y fastidiado respondió - ¿Cómo podría olvidarlo? -

Al llegar al centro comercial lo primero que compro fue su nuevo guardarropa. Pude ver lo que había elegido y tente a mi suerte escogiendo algo para él. Su mirada se tornó hacia mi cuando le lleve algunas prendas y dijo - ¿Crees que van conmigo? - Yo lo mire dándole una ligera sonrisa - Pienso que te verías bien con esto. Deberías usar más verde, resalta tus ojos - Me sonroje ante lo último. Tomo la ropa y dijo - Gracias, amada - Y con eso una de las bombillas de luz del sector exploto.

Tras haber hecho el envió de su nueva computadora, closet, escritorio... y todo lo demás que destruí. Le pregunte si tenía hambre y le indique los helados. El me respondió que no quería volver a ese lugar, a lo cual yo asentí. Y que no deseaba comer azúcar, por lo cual me invito a comer a un restaurante. Uno de esos, a los que no entras por que no perteneces a la "Elite".

Sin embargo entramos. Damian hablo con el recepcionista y pidió una mesa privada para dos. Toda la gente estaba vestida con millones de dólares sobre ellos. Nosotros éramos los únicos que "opacábamos" el ambiente. Nerviosa le pregunte - Damian, no creo que deberíamos entrar aquí. Esta gente parece importante - El me miro y señalo con su dedo, una placa en la pared con la inscripción "Propiedad de industrias Wayne".

Llegamos a nuestra mesa y al poco tiempo después le pregunte a Damian donde estaban los baños. Al entrar en un cubículo escuche a un montón de chicas de mi edad, quizás menores quizás mayores, hablando de mi compañero - ¿Viste al hijo de Bruce Wayne? Es tan guapo! / Lo vi amiga. Quiero a ese chico / Vi que entro con una chica. ¿Quién crees que sea? / ¿A quién le importa? Lo que me importa es que quiero a ese sexy y rico muchacho para mí - Antes de escuchar otra palabra, hice que el espejo en el que se estaban viendo se quebrara y salieran corriendo asustadas.

Cuando regrese, Damian llamo a un mesero y pidió la carta. Yo pedí pollo con verduras y el salmón, acompañado de verduras también. Mientras esperábamos nuestra orden, el mesero volvió con una bandeja llena de flores. Damian extrañado dijo que él no había pedido esto. El mesero dijo que se lo habían enviado algunas de las mujeres en el restaurante.

Nunca en mi vida había sentido celos... y no me es agradable. Es una sensación tan volátil que use toda mi concentración para poder controlar mis poderes. El mesero se retiró dejándonos solos en un incómodo momento. Fingiendo una sonrisa le dije - No sabía que fueras tan cotizado, Damian - El me miro con una mirada, la cual solo puedo describir como apenada - Perdóname por este innecesario momento, Raven. Es uno de los estúpidos gajes de ser el hijo de mi padre - Respondió tomando la bandeja y colocándola en un lugar lejos de nuestra vista - No es tu culpa... no hay nada que perdonar - El me volvió a mirar pero esta vez de manera seria - Tú tienes afecto por mi como una mujer hacia un hombre. Deseo honrar tus sentimientos, no quiero que pienses que voy a traicionarlos por nimiedades como estas - Me quede mirándolo sonrojada por sus solemne declaración. Sonreí y toque su mejilla - A veces olvido que tu tomas todo lo que pasa en tu vida, de manera seria - El asintió.

Luego de unos minutos la comida llego y comenzamos a comer. Lo miraba mientras comía. La forma que usa el cuchillo, la forma que parte el pan, como dobla la servilleta... es, es ridículo lo estructurado que es, incluso en la mesa. Pero luego mire a las demás personas y vi que se comportaban de manera similar... y entendí que la ridícula era yo... Damian, o más bien Damian Wayne pertenece a este mundo... y quizás debería tener a una chica de este mundo...

- ¿Me podrías decir que te atormenta? - El noto mi silencio y decidí que si él no puede esconderme secretos. Yo no le escondería nada a él - ¿Recuerdas cuando me dijiste si mis sentimientos estas siendo desperdiciados? - El asintió dejando de comer para darme su total atención - Ahora yo pienso eso de tus sentimientos por mí - Su mirada permaneció impávida mientras me respondía - ¿Puedo preguntar por qué? -

Clave mi mirada en mi plato y comencé a hablar - Tu puedes tener a la mujer que quieras. No lo digo de forma complaciente. Literalmente podrías tener por un día a cada una de las chicas que te mandaron las flores... todas son hermosas, influyentes y elegante... no tienen mis defectos. Qué clase de novia no puede ser abrazada, por el temor a hacer explotar algo. Qué clase de novia... no puede besar a su pareja por el miedo a hacerle daño. Mitad demonio, mitad humano... y que además de todo es el portal al apocalipsis en este mundo... es imposible - Termine para mirarlo a su rostro. El cual permanecía igual que antes - Tienes razón... es imposible - Su respuesta me hirió por un segundo, pero el continuo hablando - Podría tener a una chica diaria por el resto de mi vida. A una... aburrida, monótona, vacía e interesada por mi nombre y mi herencia, chica cada día de mi vida... o te puedo tener a ti. Una mujer extraordinariamente singular, la cual hace que cada paso en esta relación sea un esfuerzo descomunal... por simple que sea el paso para los demás - Yo respondí - Quisiera que no tuvieras que esforzarte tanto - el coloco su mano en mi hombro - ¿Y qué gozo hay en que sea fácil, amada? Yo acepte esta relación, porque donde tu vez "defectos", yo veo singularidades que te hacen única. Eres interesante... la primera mujer que considero interesantes en mi vida. Eres un ópalo negro en un desierto de arena blanca - Y hay esta mi romántico cursi terminando sus palabras. Las cuales agradecí dándole un beso y rompiendo los platos en la cocina principal - Eres tan cursi Damian... pero no puedo evitar pensar que si seguimos juntos, habrá un día en que - Él puso su mano sobre la mía y dijo - Amada... una inseguridad a la vez - Yo sonreí y continuamos con nuestra comida.

-¿Damian?-

- ¿Si?-

- ¿Es esto una cita? - 

- No se lo que es una cita, amada -

Canciones De Aves(Damian x Raven)Where stories live. Discover now