Síndrome del Sueño: Violet I [ Serie Inocente Amor I ] [Completa]

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Adentro del lugar se sentía más acogedor que como se veía por fuera. La casa estaba pintada con tonos pasteles y era muy moderna, Dilan se encontraba sorprendido no por lo grande —ya que su casa era más o menos igual— sino por lo linda que era.

Violet, lo miro de reojo y soltó una pequeña risita.

—Vamos, toma aciento —La chica señaló el mueble de cuero negro más cercano a ellos—. Iré a buscar algo de tomar.

Violet, estaba a punto de entrar a la cocina, cuando alguien casi salta sobre ella, está callo asustada al piso y Dilan se puso a la defensiva.

—¡Violet! —grito aquel hombre en delantal de cocina. Se lanzó al piso y la abrazo con euforia—, pensé que nunca llegarias, hija.

Dilan, se quedó plasmado al escuchar la palabra hija saliendo de los labios de aquel hombre. Se imaginaba al padre de Violet como un hombre serio, de mirada asesina, bigote y con lentes; pero era todo lo contrario.

Era un hombre joven, con mirada de ser un padre muy dulce y con porte de ser alguien muy divertido y cool.

—Pa-papá, me estás axficiando, sueltame por favor —rogó la muchacha ya casi con la cara morada.

—Aw, trajiste un amigo —La soltó y fijo su atención al muchacho, estudiando sus características—. Mmmm... Cabello negro, piel blanca... ¡Ah, tu eres el chico de la cita!
Por favor, siéntate como en tu casa. Espera, enseguida traigo algo de jugo. —Corrio de vuelta a la cocina.

—Al parecer llegó temprano hoy —dijo Violet con voz adolorida por el golpe. Logro sentarse al lado de Dilan con ayuda de él.

—¡Perdón por la demoró, traje algo dulce —Dejo sobre la mesita, una bandeja con dos vasos de jugo y dos pequeños bizcochos de vainilla con fresa—. Traje tu favorito, Violet. La chica miro las pequeñas delicias encantada y ansiosas por probarlas; pero de un momento a otro se sintió muy cansada y su piel se torno pálida. —¿Te sientes bien, hija? —Inquirió su padre muy preocupado, ese tipo de escena le recordaba a alguien.

—Si, papá —Respondió con la voz asueñada—, solo me siento un poco cansada.

—Violet, ¡¿Tomaste tus medicamentos?! —Preguntó muy asustado.

—Creo... Que se me olvidó... —No dijo nada más, cayó dormida en el regazo de Dilan.

El hombre corrió hacia unas escaleras y las subió muy deprisa; dejando a Dilan más asustado de todavía. La piel de Violet, se sentía fría al tacto, está inmóvil, como si estuviera muerta o algo parecido.

El padre de la chica, volvió con una inyección y un pequeño frasco de vidrio en la mano. Introdujo la aguja y extrajo el líquido amarillo.

—Rápido, quita el cabello de su cuello —Dejo salir algo del líquido de la inyección y Dilan hizo lo que le ordenó con las manos templorosas.

;-; les advertí que se venia lo sad. Déjenme su comentario sad y su estrellita c':

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