Skype

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Owen

Joder. Esto iba a ser duro.
Después de dos años, la peor pesadilla de Malcom, Eva y Delia, la hermana de Malcom, era quien había mandado secuestrar y golpear a Eva unos meses atrás, según las fuentes de Troy.

Tenía que decírselo a Malcom y meterle a él y a Eva en el primer avión destino al culo del mundo para mantenerles a salvo.

Y se lo dije.
Maldijo, se cabreó y luego se negó a salir corriendo.
-Delia y Eva son las primeras a las que hay que poner a salvo. No me importa nada más. Ellas son lo principal. Prometedmelo. Los dos.
Nos señaló a Garreth y a mi y no bajó la mano hasta que asentimos.
Desde ese día, Eva no iba a ninguna parte sin Garreth y sin mi. Y si no podíamos estar los dos, Malcom la rondaba como un halcón.
Pese a que lo mejor era que huyesen, debo decir que en su lugar, yo haría lo mismo.

Y Thea. Maldita sea.
La quería conmigo. En mi cama. Todas las noches.
Me acostaba leyendo sus palabras, destinadas a mi personaje.
Me despertaba reléyendolas, pero me mantuve alejado. Por su bien. Y por el mio, porque cuando todo esto terminase, algo me decía que esperar habría merecido la pena.

*****

Dos semanas desde que empecé con esta locura de intercambiar e-mails con Thea fingiendo ser alguien que no era.

Solo unos días antes habíamos acordado que podíamos tutearnos.
Al fin y al cabo, según ella, la ayudaba a conectar más con sus clientes.

Esta noche estaba preparado para ella.
Gracias a algunos de mis contactos, tenía un disfraz lo bastante creíble para poder conversar por Skype con Thea sin que ella me reconociese.
Y el momento había llegado.
Un último vistazo al espejo para comprobar que físicamente ya no era Owen sino Noe.
Sentado frente a mi ordenador inicié sesión y esperé su llamada.
Esperaba que saliese bien porque no podía fallar ahora.

Sus mensajes de estos últimos días habían sido más inexpresivos, por decirlo de algún modo y gracias a Lex y a Eva, me enteré de que Thea estaba bastante mosqueada con el tema de que todo lo llevásemos por mensaje por lo que debía arriesgarme.

Su llamada entró poco después.
Respiré hondo y acepté.
El aire escapó de mis pulmones.
No estaba preparado para esto.

Llevaba dos semanas sin verla

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Llevaba dos semanas sin verla.
La había extrañado con cada respiración que tomaba y cuando me sonrió... Bueno, sonrió a mi personaje.
-Buenas noches Noe.
-Buenas noches, Thea. ¿Como va todo?
-Ha sido un día productivo. Como ya te dije por correo, he reservado en un hotel pequeño y muy turístico en la playa. De ese modo cubrimos el tema de la celebración, el convite y los invitados pueden hospedarse en él.
-He visto las fotos que me mandaste y es realmente perfecto. Estoy seguro de que mi prometida amará el lugar.
Fue solo un segundo, pero lo vi. La sonrisa de ella desapareció en el momento en que nombré a la mujer con la que se suponía iba a casarme.

Joder. Eso tenía que significar algo e iba a aferrarme a todo lo que pudiese.

*****

Thea

Intenté estar tranquila durante todo el día.
Me mantuve ocupada con cosas relacionadas con la boda del señor Naze, Noe.
No sé porque pedirle que nos tuteáramos era tan importante para mi, pero en cuanto él aceptó fue como si pudiese respirar de nuevo.

Otra cosa era que algo no me cuadraba.
Empecé a sospechar a la semana de aceptar el encargo.
No podía entender porque todo debía manejarse por correo electrónico.
Ni siquiera había escuchado su voz.
Así que hablé con mis amigas.
Quizá ellas me harían ver que no debía ser paranoica.
Y lo hicieron.
Las magdalenas de chocolate y avellana de Eva también ayudaron.
Cada día me llegaba una caja a la oficina enviados por ella.
Era una adicta ya, pero poco importaba. Eran deliciosas.

Y lo peor de todo fue que a pesar de mis sospechas, Noe W. Naze, me gustaba.
Me gustaba su forma de expresarse.
Sus palabras, pese a ser escritas, me hacían sonreír, pero hoy, esta noche, por fin le vi, vi su rostro, su sonrisa y lo supe.
Supe que estaba enamorada de mi cliente. Un cliente que iba a casarse con otra.

Un recuerdo para ti (Serie Love 15) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora