4.- Despedidas

338 42 12
                                    

Poco a poco, Yuuri regresó lentamente a la realidad. Ver a Viktor avanzando al frente con la cabeza bien en alto a paso firme, pero resignado, le confirmó su gran temor.

A su alrededor, se escuchaban murmullos de desaprobación y algunos negaban con la cabeza, como siempre ocurría cuando un desafortunado joven del distrito era seleccionado, y sin embargo, logró percatarse que por todos ellos, otros tenían opiniones contrastantes.

-Si alguien puede ganar, definitivamente es Viktor.

-Espero que mate a esos estúpidos profesionales primero.

-Y quizás al fin podamos tener un vencedor.

Yuuri se giró en dirección a los comentarios, más le fue imposible determinar con exactitud quienes los pronunciaron y a cambio, siguió escuchando.

-Si se considera de manera fría, fue lo mejor. Viktor es fuerte y en el peor de los casos... no dejaría mucho atrás.

Su rostro pasó a reflejar una profunda incredulidad. ¿Implicaban que por no tener una familia que lo llorara, que resultara elegido fue lo mejor? Como si dieran a entender que su vida era menos valiosa por ello...

"Se equivocan, están Yuri y su abuelo, y muchos otros que lo aprecian y dependen de él..."

La sangre le hervía de pura rabia. Le parecía impensable que hablaran de esa manera tan cruel. Viktor no estaba solo, también tenía derecho a vivir y a ser feliz.

Casi como si una fuerza misteriosa se apoderara de él, Yuuri inhaló hondo y dio un paso al frente mientras alzaba la mano.

-¡Yo me ofrezco, quiero ser voluntario!

Bajo cualquier otra circunstancia, saberse objeto de la atención y las miradas de todos le habría incomodado de sobremanera, y sin embargo, descubrió que no le importaba. Su mente tenía una única idea fija. Aún con el corazón latiéndole con fuerza, no flaquea ni siquiera por un segundo. Era plenamente consciente de lo que estaba a punto de hacer y las implicaciones que podría conllevarle y a pesar de ello, jamás se sintió tan seguro ni con tanta confianza en toda su vida.

No fue sino hasta que se percató que Viktor lo contemplaba que el valor comenzó a abandonarlo y las piernas le pesaban, dificultándole avanzar. Su expresión era de total perplejidad, parecía como si lo cuestionara "¿por qué tú? ¿Por qué tú, si apenas te conozco?"

De pronto fue consciente que su intento por salvarlo bien podría ser considerado como un esfuerzo desesperado por llamar su atención.

"No es eso" un nudo se formó en su garganta "Te juro que no es eso, yo sólo quería..."

Un par de agentes se colocaron a cada lado y lo empujaron para obligarlo a moverse, seguramente creyendo que se había arrepentido e intentaría huir. En el escenario ocurría algo similar con Viktor, quien también se rehusó a moverse hasta que otro agente lo obligó a bajar casi a rastras.

Durante unos segundos, sus miradas se cruzaron, e incapaz de soportarlo, Yuuri agachó la cabeza.

***

Decir que la despedida de su familia fue triste, era poco.

-Oh, Yuuri...-intentó hablar Hiroko, pero los sollozos se lo impidieron y rompió a llorar, abrazándolo con fuerza.

Toshiya abrió la boca como si quisiera decir algo pero al final la cerró y se limitó a imitar a su mujer y abrazar a su hijo, las lágrimas inundando sus ojos.

Yuuri deseó explicarles que se trataba de algo que tuvo que hacer o de lo contrario nunca se lo hubiera perdonado, pedirles que lo disculparan por actuar de una forma tan egoísta y causarles tanto dolor, pero no podía pronunciar palabra. Mari tomó su rostro entre sus manos con cuidado.

What could have been and never wasWhere stories live. Discover now