Papel y Tinta

Sí, vale la pena

Y me di cuenta que estaba obsesionada.

Me di cuenta que le había dado el lugar de Dios en mi corazón.

Me di cuenta que estaba tan enfocada en eso, que me había desenfocado de lo que Dios quería que hiciera.

Me di cuenta que me había hecho un ídolo cuando Dios me lo pidió y no se lo quise dar.

Me di cuenta que me había hecho un ídolo cuando Dios me pidió que sacrificará a Mi Isaac y me negué.

Me di cuenta que me había vuelto una idolatra cuando el temor a perder eso se hizo más grande que el deseo de obedecer a Dios.

Me di cuenta de que mi corazón y mi tesoro estaban en el lugar equivocado.

Y no es que era malo.
No lo es.

El problema fue que le di el lugar que le pertenece a Dios en mi corazón, y por esa razón, por amor, Dios me lo pidió.

Y sé que como a Abraham estoy siendo probada.
Y puedo sentir el dolor que sintió él.
Porque aunque no me están pidiendo un hijo,
Aunque no me volví a adorar dioses de pintura y arcilla,
En el momento en que eso de volvió más importante que pasar tiempo con Dios,
se convirtió idolatría.

Y sé que la meta de la prueba es moldearme.

Sé que la meta de la prueba es fortalecerme.

Sé que la meta de la prueba es hacerme una vasija de honor.

Sé que la meta de la prueba es acercarme a Dios.

Pero aún así duele,
Porque siento como arrancan un tesoro convertido en ídolo de mi corazón.

Pero vale la pena
Porque sé que después de esto, como Abraham, estaré más cerca de ser una verdadera amiga de Dios.

Vale la pena,
Porque como a Abraham sé que mi historia tendrá un final feliz.

Y Vale la pena porque
aunque mi historia sea diferente,
Aunque un cordero no aparezca y tenga que matar a mi Isaac, estoy tranquila
porque sé que Dios es suficiente.

Sí, Vale la pena.