A mi antiguo cómplice

2.3K 193 28
                                    

Carta a mi amigo de infancia,
que mi corazón tiene como hermano

Tienes dones especiales que desconoces, una gracia especial que Dios ha puesto en ti con las personas, un espíritu alegre que le saca una sonrisa a todos los que están a tu lado y una familia que lo daría todo por ti.

Pero te has dejado engañar.

Por tus ojos has dejado entrar en tu vida una distracción.

Por tu carne te has dejado alejar de Dios.

Por no esperar te has desviado de los propósitos divinos.

Tú desobediencia ha hecho que se apague tu espíritu.

La ceguera ha hecho que olvides tus dones.

Y no sonríes ya.
No como antes lo hacías.

Tú sonrisa trae detrás de ella un pesar que tratas de esconder.
Pero yo lo veo.

Yo lo puedo ver.

"Como uña y dedo."
Eso éramos antes pero,
¿Qué ha pasado?

Compañero de infancia.
Mejor amigo.

Cómplice.

Ya nada queda.

Todo solo un recuerdo de lo que fue.

Y seguimos juntos, pero apartados.

No te das cuenta que ella te aleja.
No te das cuenta que ella te lleva
Lejos de nosotros,

Lejos de Dios.

Por una Dalila o una Jezabel estás perdiendo a una Rebeca o una Raquel.

No te das cuenta que ella no es lo que piensas,

pero peleas.

Peleas cuando te confrontamos,
Porque crees.

Crees en lo que te ha dicho,
Crees en lo que te muestra

Pero no ves sus colmillos.
Colmillos que trata de esconder cuando se ríe contigo

Pero yo los veo.

Yo los puedo ver.

Y oro.

Muchas veces quise usar mis propias tácticas, porque pensé que mis planes para alejarte de ella(s) eran perfectos,
Pero fallé

Una y otra vez,

Fallé.

No porque no me escuchabas cuando te hablaba, ni porque mis intenciones eran malas.

Fallé porque me olvidé de algo importante,

Lo más importante.

Dios.

Pensé que mis ideas y planes eran mejores.

Olvidé que Dios puede,
Olvidé que mi corazón, aunque buen intencionado, es engañoso.
Olvidé que Dios ya estaba trabajando, y me interpuse con mis ideas,

Y te aleje, más de mi
Menos de ella.

Pero ya no,

Satanas quiso tenerte, pero ya no.

Satanas quiso engañarme y usarme.
Pero ya no.

Ya tengo el plan perfecto,
El plan que sé que no fallará,
El plan que estoy segura te quitara la venda que tiene tus ojos cegados.
Un plan sencillo, pero efectivo.

Y si te preguntas qué plan es ese, te lo diré.

Jesus.

Mi plan, es dejar a Jesús trabajar.
Mi plan es orar hasta que me duelan las rodillas si eso significa verte sonreír otra vez,

de verdad otra vez.

Y no temo porque sé,
Que el salmo 27:13-14 que leímos ayer
Fue una respuesta.

Y espero.

Espero, como tus dones dormidos esperan,

Espero,

como un libro viejo en un estante, lleno de polvo espera a ser leído otra vez,

Espero,

espero a que despiertes otra vez...

esperamos que despiertes otra vez...

Que vivas otra vez.

"Brother let me be... the one to light the way, bring you home."

Papel y TintaOù les histoires vivent. Découvrez maintenant