Capítulo 4: Harry

1.6K 174 37
                                    

Acaricio las piernas de Matt, por la parte de los muslos, aún por encima del pantalón.

Puede... Bueno, obviamente estaba deseando quitarle la ropa; y en especial esos pantalones ahora tan apretados por el bulto de su entrepierna. Pero no podía. No podíamos. Esto estaba mal, y ambos lo sabíamos.

Me fuerzo a separarme de él. De su dulce pero fuerte aroma. De su suave piel. Y de sus labios... Esos labios...

- Matthew, para.

Supo enseguida que debía hacerlo. Nunca le llamaba Matthew.

- ¿No te das cuenta? ¡Tu novia, y mi esposa están allí fuera!

- ¿En serio? ¡Fuiste tú quién quiso empezar esto! ¡Y has sido tú quién me besó primero!

- Lo sé, y no me arrepiento... -susurro- Pero tienes que entender que tenga dudas.

Los siguientes segundos transcurrieron como si de toda una vida se tratase. La mirada de incredulidad y odio de Matt hacia mí, penetrante y profunda cual ave de presa acechando su próxima víctima.

 La mirada de incredulidad y odio de Matt hacia mí, penetrante y profunda cual ave de presa acechando su próxima víctima

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

- Conque dudas, ¿eh? -se limita a decir para luego salir del baño.

Me acerco al lavabo, donde minutos antes nos estábamos besando. Me lavo la cara, y me maldigo una y otra vez por ser tan gilipollas.

- ¿Harry, estás bien? -Shelby me llama a través de la puerta.

- Ya voy, cariño -intento decir con la voz más natural que logro poner en estos momentos.

- No sabes a quién me he encontrado. ¡A Matt y a Esther! ¿No es una casualidad? He pedido que junten las mesas. Cuando salgas nos pondremos al día.

Vuelvo a maldecir por lo bajo y me seco la cara con la toalla. No tenía muy buen aspecto, pero al menos no se notaba que...

Oh no.

Mierda.

Mierda.

Mierda.

¡Mierda!

Mi cuello. ¡Joder, mi cuello! El estúpido de Matt me había hecho un chupetón.

Seguro que aposta, además...

Logro disimularlo alzando el cuello de la camisa, y salgo del baño. Ahora más cabreado que culpable.

Cuando llego a mi mesa, veo que la han juntado a la de al lado y que, en ella, están Matt y Esther; ésta última, charlando animadamente con Shelby.

- Pues sí. ¡Un desastre! Y Matt no parece entender la diferencia entre color crema y blanco roto.

- ¡No hay diferencia! -se defiende Matt.

Esther sonríe.

- Cielo, te quiero, pero sí la hay -dice para luego dejar un sutil beso en la comisura de sus labios.

Un pequeño beso, que provoca un enorme sentimiento en mí.

¿Por qué pasaba esto? ¡Si estaba enfadado!

Me siento en mi silla de nuevo, y Shelby me toma de la mano, preguntándome con la mirada si estoy bien.

Yo me limito a asentir, y a permanecer callado, moviendo la pasta con el tenedor; esperando que esta horrible noche terminara lo antes posible.

INSIDE: A Shumdario FanficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora