UNO

4.2K 290 21
                                    

| Jazmine |

Al regresar de la escuela, lo primero que hago es correr al cuarto de mis padres y revisar si hay alguna respuesta bajo la tabla de siempre.

Nada...

Una vez más, como ocurre todos los días, me desilusiono y la misma pregunta vuelve a surgir en mi cabeza: ¿Por qué me ignora? ¿Por qué jamás responde a mis saludos? Yo solo quiero hablar con alguien...

Sé que está ahí. Cuando él está en la casa, me siento acompañada. No, "acompañada" se queda corto. Cuando él está aquí es cuando me siento completa.

Pero al parecer él no siente lo mismo. Lo único que pido es que me dé una señal de vida, de que nos tenemos el uno al otro. ¿Por qué es tan difícil para él aceptarlo?

| Nate |

Al volver a casa y llegar a mi habitación, la tabla vuelve a crujir en cuanto mi peso cae sobre ella. Observo el techo de madera mientras me pregunto por qué diablos jamás he tomado un martillo y arreglado el problema. La respuesta se me presenta como una burla a mi estupidez.

Porque tú quieres responder a esa nota, el problema es que eres demasiado cobarde para hacerlo.

Suspiro, es cierto. Esa voz en mi cabeza tiene razón.

Por supuesto que la tengo, ahora escribe lo que quieres decirle a esa persona.

Puede parecer que estoy loco, y tal vez lo estoy, la verdad es que no estoy seguro. Toda mi vida he escuchado la misma voz irritante como una intrusa en mis pensamientos. No logro distinguir si es femenina o masculina, es simplemente una voz.

Recuerdo que cuando era pequeño le pregunté a mi madre por qué la oía, y ella me dijo que era mi consciencia, y que ella me ayudaría a distinguir el bien del mal. Pero esta voz no ha hecho en absoluto el trabajo que mamá aseguró.

Por favor, escribe algo y déjalo bajo la tabla, no puede ser tan difícil.

Me doy por vencido y, sin dejar de sentirme como un estúpido por estar obedeciendo a una voz inexistente la orden de escribir una nota a una persona que tampoco existe, tomo un pedazo de papel y un lápiz.

«¿Quién eres?»

Doblo el papel y lo dejo cuidadosamente en el minúsculo espacio bajo la tabla.

Listo, he respondido a la nota. Ya puedo declararme mentalmente inestable.

Los Mensajes de Ninguna ParteWhere stories live. Discover now