I DON'T WANNA LIFE FOR EVER

Capítulo 14: MI DILEMA

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Alguna vez te has preguntado: ¿Qué pasaría si los humanos no sintiéramos nada?

Duele el pensar que todos estaríamos vacíos y ser tan monótonos como las máquinas que se dedican a realizar las funciones en las que son programadas; los sentimientos son un cúmulo de sensaciones que nos hace sentir a cada minuto y recalcarnos "ah estoy vivo, por ello, el dolor o la felicidad me embarga", pero, el tomar decisiones que influyan en muchas personas, es lo más difícil que alguien pueda hacer, y lo entendí perfectamente, al sentir la mirada fría de aquel que amo, duele tanto, sumándole que ahora estoy enlazado con mi destinado por caprichos míos en arrebatos de ira, hice lo impensable.

No me di cuenta hasta que el dolor por la cachetada que me tiró, se expandiera por toda mi mejilla, mis cabellos estaban rebeldes y esparcidos por toda mi cara. Entendí que mi egoísmo estaba dañando lo que más quería; estaba él con la única mirada que nunca desee que me dirigiera, llena de desprecio y rencor, duele... duele demasiado, mi corazón se estremece por este sentimiento de culpa, ira y sentir que me iba perdiendo, iba perdiendo a mi destinado que rechacé vilmente como la peor escoria y perdí a mi pequeño amor...un dilema surgió dentro de mí.

Podría vivir sin Yuuri... realmente podría, pero ¿qué pasa con Jean?... realmente ¿podría vivir sin ambos? ¡NO! En estos momentos siento que perderé la cabeza. El bullicio de las armas, el grito de las personas, el par de miradas que se enfocan en mí, no me dejan pensar con claridad, no es bueno para mi... este dilema que atormenta ahora a mi corazón no me dejará en paz hasta que lo tenga a él, pero... ¿a quién?

Mis ojos ya no pueden ver con claridad, las lágrimas se empeñan en salir y siento que el dolor aumenta conforme pasan los segundos, solo quería un pedacito de eso que todos llaman felicidad ¿tan difícil es poder conseguirla?

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-¡TÚ! Ya no caeré en ninguna mentira – sus ojos se inundaban de lágrimas, su pequeño corazón se estremecía por el sentimiento negativo que empezaba a recorrer su ser y el dolor aumentaba– esto es lo último que pude aguantarte, no quiero volverte a ver en mi vida...haré que nunca nos hemos conocido, fue un error el encontrarnos hace 6 años – sus hombros eran sujetados por Victor, quien en silencio le brindaba su apoyo.

-Yuuri no es bueno que estés en este tipo de ambiente, aun eres muy joven- levantó al menor y lo cobijó liberando sus feromonas para poder tranquilizarlo, le partía el corazón que su omega de apenas 12 años esté viviendo y sufriendo de esa forma. Enfocó su vista en Yuri, quien tenía la mirada perdida y de sus ojos salían lágrimas sin parar; el rubio parecía perdido en sus pensamientos y negó con la cabeza, acercándose a él lentamente.

-no des un paso más o juro que te sacaré la cabeza, maldito viejo – con una voz monótona y viendo a la nada el rubio pronunció aquellas palabras como un robot, como un ser vacío- ya perdí todo lo que me hacía sentir vivo, por ende, la de Yuuri y de Jean ya no representan algo importante- empezó a reírse dramáticamente, hasta ser una risa estruendosa, escarapelando los cuerpos de los destinados – ja! No sé cuántas veces dije que los destinados no siempre son felices- aun las lágrimas seguían saliendo sin parar y él seguía sonriendo con su vista perdida en la nada-¡NADIE ME ENTENDIÓ! ¡NADIE ME ESCUCHÓ! ¡NADIE PENSÓ EN MIS SENTIMIENTOS! Jum! ¡¿porqué tengo que pensar en los demás si nadie pensó en mí? Invaden mi casa como si fuera un corral de animales, para ser sacrificados... ajajajajaja... realmente son ridículos – su rostro fue cubierto por sus cabellos, haciendo retroceder rápidamente al albino, quien sintió que en cualquier momento Yuri podría atacar con toda su fuerza; la fuerza de un alfa.