El Instructor de Piano +18-YOONSEOK

Ultima canción // Final.

Fue fugaz el momento donde el cuerpo del pequeño castaño se deslizó sobre la lisa pintura de aquel piano de cola, se erizó por un instante al sentir el frío perforar su espalda pero las caricias de Yoongi se encargaron de disipar esa corriente; su jean voló y con ellos también despegó un gemido al sentir la mano del mayor sober su miembro que resaltaba expuesto sobre su bóxer demandando atención, sus caricias desataban una ola de calor sobre Hoseok quien no tardo en abrir sus piernas para que el cuerpo de Yoongi se ubicara en él, abrazándolo con sus piernas atrayéndolo más, queriendo generar más contacto del que había. Sus labios estaban en una intensa "O" listos para soltar cualquier clase de gemido y grito de placer que su cuerpo demandara.

La palabra deseo tomó forma cuando su bóxer fue bajando entre sus piernas y Yoongi volteó su cuerpo pegando su torso al piano que ahora se mantenía caliente. La cabeza de Hoseok estaba de costado y una mano de Yoongi sostenía su cabello con algo de violencia mientra que la otra pasaba a acariciar sus nalgas. El pelinego pegó un pequeño azote prlbando la debilidad de aquel chico que tenía reposado sobre el piano y un gemido ahogado fue la respuesta. Hoseok estaba cegado por la situación porque nunca había experimentado una escena de ese tipo pero le gustaba, la gustaba que fuera Yoongi quien lo llevera a conocer todas esas sensaciones. Yoongi notaba aquello, conocía la inexperiencia combinada con la inocencia, sumando por como su piel se tensaba y se manifestaba bajo sus toques. Masajeó con parsimonia la zona que había quedado colorada y abrió paso a que sus dedos se aventuraran entre medio de sus nalgas. Tomó con fuerza la cadera Hoseok y él entendió al instante el mensaje, poniéndose de rodillas totalmente expuesto, pero aún con su torso apoyando sobre aquella negra madre. Una nueva sensació abordó a su organismo cuando sintió su agujero siendo humedeció, el placer lo obligó a cerrar los ojos y a aplicar presión de sus dientes contra su labio, poniéndolo más rojo e inflamado de lo que ya estaba. La lengua de Yoongi se movía con una rapidez cegadora haciéndolo volar, sus movientos contorneaban la sensible piel de allí. El pelinegro revoloteaba su lengua adentrándose con fuerza en su orificio, realmrnte disfrutando de aquello. En algunas ocasiones apretaba los costados de las caderas de Hoseok, haciendo que este se empujara más contra su rostro y su lengua se empujara con más fuerza y velocidad. Dos de los dedos del mayor fueron a para a los rosados labios del menor pidiéndole que los chupara y él envolvió toda su lengua en ella, dedeando profundamente lo que se aproximaba. Sus dedos de hundieron en la profundidad del castaño haciéndolo soltar un coro de gemidos, muentras que sus dedos estaban casi blancos por la fuerza con la que se aferraba contra el borde del piano, no sabía cuanto iba a poder aguantar con los dedos de Yoongi moviéndose a una velocidad tan buena.

Los gloriosos dedos entraban y salían acompañados de la lengua que rodeaba la profundidad de sus toques, las mejillas de Hoseok y sus labios se mantenían teñidos de un color carmín furioso, estaba completamente deleitado y entregado ante las caricias que estaba recibiendo, la vergüenza y la timidez se habían disipado de su cuerpo colapsando en una maraña de gemidos incontrolables perdiéndose en el espacio. Sus ojos avellana ahora levemente dilatados por la lujuria se abrieron con rapidez al escuchar como los pantalones acompañados del bóxer de Yoongi caían sobre el suelo dejando expuesto su exuberante miembro. La mano del pelinegro se envolvió sobre su propia erección otorgándose algunas caricias auto complacientes, Hoseok soltó un gruñido quejándose al querer tocar a Yoongi, pero como respuesta obtuvo otro azote que lo hizo convertir su gruñido en un gemido.

El pelinegro acortó la distancia que había creado por un momento entre sus cuerpo y posó su mano sobre las caderas del chico, bajó su trasero haciendo que su cuerpo volviera a quedar completamente pegando al piano. Hoseok volvió a ganarse unos cuánto azotes por parte del mayor por refregarse contra el piano buscando fricción contra su miembro.

La cabez rosada e inchada del miembro de Yoongi permanecía estacionada sobre el agujero de Hoseok amenazando con entrar y arrebatarle la virginidad. Él estaba jugando contra el expuesto trasero del castaño, simulaba que lo embestía pero su miembro nunca ingresaba, toda su longuitud acariciaba entre medio de sus nalgas y él sentía que ya no podía más, realmente era incontrolable la necesidad que sentía Yoongi de hundirse allí y el castaño estaba ahogado por la necesidad de sentirse llenado. Todas las predicines de sus deseos fueron callados cuando el miembro de Yoongi finalmente atravesó los primeros aros de su pequeño orificio, arrancándole un gemido de excitación menzclado con dolor haciendo que su espalda de encorvara.

Se tornó incontrolable que el pelinegro no soltara unos gemidos dominantes provenientes de sus labios al sentir como la piel de Hoseok se contraía sobre su miembro como abrazándolo, demostrándole que realmente quería eso. Sus paredes apretaban de una manera exquisita, podía sentir como su miembro crecía mas ahí adentro y Yoongi jamás había senrido mejor paraíso que ese al entrar y salir del cuerpo del castaño. Mientras éste mantenía sus labios abiertos gimiendo por más contacto, por mas fuerza en las embestidas y él no tenía pensado negarse a eso ya que su vaivén aumentó en respuesta a sus pedidos, enredándolos a ambos en una atmósfera donde sólo ellos dos podían entenderse e inmiscuirse porque cuando Hoseok impulsaba su cuerpo hacía atrás Yoongi entendía que debía volver a tocar aquel punto en su interior que hacía que el pequeño se desmoronara y estallara en gemidos realmente obscenos.

La espalda de Hoseok cayó sobre el piano ante el cambio de posición y gruño al sentirse vacío sin el miembro de Yoongi, quien al instante lo compensó volviendo a entrar en él y aprovecho de tenerlo de frente para tomar su miembro y masturbarlo al ritmo de las embestidas, ganándose una mirada de lujuria con algo de inocencia mezclandose en el fondo de su iris y eso era lo que mantenía loco a Yoongi, arriesgándolo todo con tal de complacerlo. Las manos de Hoseok rasguñaban su espalda cada vez que se introducía con fuerza en él, lo estaba rompiendo. A esas alturas la espalda del mayor parecía una fotografía del espacio llena de constelaciones y rastros de estrellas fugaces dejando un rastro rojizo al pasar, porque las cortas uñas del castaño se clavaban con intensidad en la piel sin miedo de herirle.

No fue muchas más embestidas, ni intercambios de gemidos, ni tampoco miradas que parecían recitar todo lo que estaban sintiendo en aquel momento de profundidad intimidad, para que el cuerpo de Hoseok se sintiera levitar en la órbita del llamado orgasmo, llevándose consigo el cuerpo desnudo de Yoongi hundiéndose mutuamente en esa ola astromántica, abrazándose mutuamente a su desnudez y a sus rastros de cardenales inconclusos.

Ambos cuerpos colapsaron golpeando el aire, dejándolos sin respiración, ambas pasiones desembocaron en un orgasmo al unísono, sus cuerpos transpirados a trasluz dejando todo rastro de sentimiento allí sobre ese piano, entre esas paredes que lo habían oído todo.

😰 Al fin. Perdón por tardar, se que no es mucho pero siempre que decía "ahora si lo hago" me daba flojera trasladarlo😂.
Buenop ¡este es el final! Yei, no hubo nada de historia, fue más tipo sólo sexo(?. Entonces queda a su imaginación que paso entre Yoongi y Hoseok despues de esa alocadera sobre el piano🌚.

Gracias por leer😳💕

Proximamente nueva fic "A short penis" esperenlo😉💕.

(Espero hayan muerto al igual que yo con el gif c:)