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001 | Scott McCall

—Buenas tardes.—Dijo este, mientras que les tendía una mano a cada uno de ellos, saludándolos de una manera cortés. Ambos aceptaron su mano con un asentimiento de cabeza.—Por favor, tomen asiento.

Niklaus sonrió al haber escuchado aquello, colocando sus manos detrás de su espalda, antes de hablar.—No, así esta bien, gracias. No nos llevará mucho tiempo.

—Si tenemos suerte.—Agregó su hermano, sin apartar sus ojos del Sheriff, mientras que este asentía ligeramente.

Él hombre Stilinski dirigió sus ojos al reloj que se encontraba en su muñeca, pensando en no llegar tarde otra vez a la cena que tenía pendiente con su único hijo.—Sí, claro. Díganme en qué puedo ayudarlos.

—Estamos buscando a una persona y, claramente, sabemos que usted puede ayudarnos a llegar con él.—Respondió Elijah, mientras que él hombre frente a él dirigía sus ojos a él.—Su hijo, en realidad, es él mejor amigo de la persona a la que estamos hablando. Scott McCall, ¿Le suena?

—Llevamos bastante tiempo buscando al chico.—Mencionó él hombre de cabellos rubios, después de haber escuchado las palabras de su hermano mayor, mientras que daba un paso al frente, provocando que la atención del Sheriff se dirigiera a él.—Necesitamos a Scott, cómo puede ver, es por eso que estamos aquí. Solamente por él.

Él hombre Stilinski observó a cada uno de los desconocidos que se encontraban en su oficina por un par de segundos, antes de dirigir sus ojos a cada uno de los lados de su oficina, cómo si alguien los estuviera vigilando. El par de hermanos, después de haber notado aquello, formaron una mirada confundida al no saber qué causó aquella reacción.

—Supongo que lo saben.—Comenzó a decir él Sheriff, confundiendo aun más a los Mikaelson.—¿Son cazadores?—Cuestionó, provocando que él híbrido de la familia levantará una de sus cejas ante la mención de aquellos, estando ligeramente disgustado por aquella pregunta.—Scott es un buen chico.

Elijah sonrió ligeramente al momento en que escuchó aquellas palabras, antes de hablar.—Y es por eso que nos interesa tanto él chico McCall, es importante que hablemos con él esta noche.

Él hombre Stilinski, después de haber escuchado la respuesta de Elijah, se mantuvo en silencio por un par de segundos mientras que pensaba en lo que había dicho. Su mente divagaba en aquellas palabras: ¿Qué tal si le estaban mintiendo? ¿Qué tal si ellos querían dañar a Scott? ¿Y si ellos realmente no eran las buenas personas que aparentaban ser? Scott era un hijo para él, no soportaría que lo lastimaran.

—Sheriff Stilinski, se nos agota el tiempo.—Mencionó Niklaus, provocando que su desesperación comenzará a notarse con el tono de voz que había utilizado Si no volvían a New Orleans a tiempo, no podrían detener a Marcel. Aquello, provocó irritamiento en él híbrido. Lo había criado cómo aun hijo y, con su necedad e increíble sed de venganza, terminó amenazándolos a muerte. Amenazando a la familia original. Solo había una persona que había sido capaz de amenazarlos y poder vivir para contarlo, por supuesto, era la novia de Kol: Davina Claire. 

Aun así, tenían que matar a Marcel.

El cuerpo de este estaba muerto por un par de horas, encerrado en una casa abandonada en el pantano de New Orleans, después de que le habían cortado el cuello y pausado su muerte con algunas maldiciones de parte de Freya pero, cuándo el tiempo se les acabe, todo volvería a ser cómo aquella mañana: Rebekah volvería a estar maldita por sus instintos psicópatas, Freya moriría por la maldición de una bruja, mientras que Kol junto a Elijah morirían por la mordida de Marcel, cuyo veneno intentaban extinguir.