𝟬𝟬𝟲 the war that couldn't be avoided

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    El tiempo pareció concurrir más lento mientras Abigail observaba a Peter subirse a uno de los escombros y saltar sobre Miraz, las espadas y escudos de ambos chocando mientras los narnianos soltaban gritos de apoyo.

    Peter alzó su espada, pero el escudo de Miraz la detuvo antes de golpearle con su propia defensa en el rostro a Peter. El rubio retrocedió unos pasos, pero pronto se recuperó. Los dos reyes peleaban con fiereza y rapidez, las espadas de ambos siendo detenidas antes de causar daño alguno mientras se movían alrededor del espacio, buscando el mismo objetivo.

    Un bucle sin fin parecía haber dado a luz mientras que ambos esquivaban con esfuerzo los golpes del otro y la victoria parecía que sólo sería cedida hacia la fatiga. Sin embargo, un golpe de Miraz aterrizó sobre el rostro de Peter que provocó que la máscara cayera al suelo. Abigail apretó los labios para no soltar un grito.

    A pesar que la morena había participado en varios combates de esgrima y sabía muy bien que eso no significaba ni victoria ni derrota, no podía evitar enloquecer de preocupación al ver a su amigo en el suelo de la arena.

    El rubio inspiró y expiró, dando a entender que el cansancio le estaba haciendo efecto. Logró esquivar la espada y cortó la pierna de Miraz con un rápido movimiento.

    Los dos se separaron un momento, mirándose el uno al otro antes de volver a correr. Miraz bajó su espada, intentando provocarle algún daño, pero Peter logró saltar y esquivarle con agilidad.

    Miraz se acercó a Peter, moviendo tan rápido su espada que incluso confundió un momento a Abigail. De esta forma, arrojó a Peter al suelo y pisó su escudo, provocando que su brazo se doblara y un grito escapara de sus labios.

    Abigail tembló, su mano aferrándose a la de Edmund a su lado mientras la preocupación era demasiada para ser tolerada y sólo deseaba que todo acabara bien para el chico que significaba demasiado para ella.

    Peter se las arregló para alzar su espada, provocando que Miraz retrocediera y soltara su escudo. Por lo que cuando el usurpador volvió a intentar atacarle, Peter comenzó a girar sobre el suelo hasta darse la vuelta. Entonces le propinó una patada en las piernas, provocando que Miraz cayera y obtuvo el tiempo que necesitaba para levantarse.

    Miraz se encontraba acorralado entre la espada de Peter y los escombros. Se encontraba en el suelo cuando el relincho de un cabello captó la atención de todos, señalando la llegada de Caspian y Susan.

    — ¿Necesita su alteza un respiro?—, preguntó Miraz cuando logró volver a ponerse de pie.

    — ¿Cinco minutos?—, pidió Peter.

    — ¡Tres!—, exclamó Miraz.

    Edmund y Abigail soltaron sus manos para correr hacia Peter. El azabache tomó el casco mientras Abigail se aseguraba que el rubio no se desplomara en el suelo.

    — ¿Y Lucy?—, inquirió Peter cuando Caspian y Susan se acercaron, sin rastro de la menor.

    —Logró pasar, con un poco de ayuda—, contestó Susan, mirando momentáneamente a Caspian.

    —Gracias—, asintió Peter hacia él.

    —Estabas ocupado.

    —Vayan arriba. Yo dudo que... los Telmarinos cumplan su palabra—, pidió Peter, tomando pausas repetitivas ya que le faltaba el aire.

    Susan se acercó y le dio un abrazo. El rubio soltó un gemido de dolor, pero negó cuando recibió las disculpas. Caspian miró un momento a Abigail, preguntando en silencio cómo estaba todo, pero ella se limitó a realizar una mueca y negar levemente.

¹MOONLIGHTWhere stories live. Discover now