No me laves el auto

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-¿De verdad crees que esté enojado conmigo? -le pregunté por enésima vez a mi hermano- ¿Y si solo lo hizo para que al fin yo me diera cuenta de lo que siento?

Estaba en la habitación de Collin, me había pasado todo el tiempo ahí desde que Fran se molestó. Intentaba que mi hermano me dijese como arreglar mi desastre o al menos darme una pequeña pista, porque si era sincera, probablemente si yo me encargara de todo lo terminaría arruinando aun más.

-Pensé en eso pero no, hablé con Lynn y él si estaba enojado. Ella le pidió venir aquí pero se rehusó porque no quiere verte .-auch.

-Nunca lo ví así -dije, me sentía mal por ser la culpable.

-¿Pues que querías? El pobre hombre vino aquí contigo para olvidar que fue a ver a su padre y lo terminas de enterrar más profundo en la Franzone -me reprochó mi hermano. No quiero poner excusas pero pienso que todo hubiese sido diferente de no haberme hecho confundir con Sally.

-No me estás haciendo sentir mejor.

-Pues hacerte sentir mejor no es lo que quiero, necesito que te sientas tan mal al punto de que finalmente hagas algo. Quiero darme de golpes en la pared cada vez que veo lo negada que puedes ser.

-Ya entendí, Collin -murmuré ligeramente ofendida, ya había sido casi insultada y aún así no sabía cómo disculparme con Fran.

-Bueno, piensa en algo que hacer rápido porque tengo que ver a Lynn hoy, tenemos un proyecto en la escuela y hace unos días que no veo a mi novia. -el niño tomó sus cosas y se levantó de su cama.

-Claro, presumido -fui a mi cuarto por las llaves del auto, recordé que Fran siempre fue el que me llevo a su casa y que yo aún no conocía el camino correcto para llegar, pero supongo que ya sabría como.

Salimos de nuestra calle e intenté hacer memoria de a dónde debía de ir, creo que al menos era capaz de reconocer los edificios.

-Ya nos perdimos. -suspiró mi hermano desde el asiento de copiloto.

-¿Cómo lo sabes? -pregunté confundida porque según yo tomé el camino correcto.

-Desde hace media hora te la haz pasado dando vueltas y no sé que me da más miedo, tu forma de conducir o que no te hayas dado cuenta -molesta estacioné auto en algún lugar para dejar de movernos sin rumbo.

-¿Que hacemos ahora?

-Llamar al único adulto confiable que conozco. -buscó entre sus cosas hasta dar con su teléfono, lo ví teclear algo y después ponérselo en la oreja-. ¿Fran? Íbamos ya de camino, pero... Si, rescatame -mi hermano me miró de reojo mientras hablaba con el rubio-, está bien, se lo diré.

Terminó la llamada y se me quedó mirando.-Dice que pasará a buscarnos en su coche después de que le diga en un mensaje las calles en las que estamos.

-Esta bien -dije aliviada, mínimo no nos dejaría varados en éste lugar.

-Y dijo que no te mandaba saludos.

Esperamos otros treinta minutos después de que Collin mandó el mensaje cuando vimos a un auto acercarse. Se detuvo a unos buenos metros lejos de nosotros y de repente una niña rubia salió de el y se acercó corriendo. Mi hermano abrió su puerta y también salió para abrazar a su novia.

Alejé la mirada porque su felicidad me daba náuseas y tampoco quería verlos besuquearse. Fran no se bajó pero saludo a su cuñado desde lejos, cuando su mirada se cruzó con la mía me ignoró y se volteó a otro lado.

-Dice que te va a guiar -dijo Lynn desde el asiento trasero, mi hermano se sentó con ella e iban tomados de la mano.

Ví como el rubio arrancó y sin verme me hizo una seña para que lo siguiese. Momentos después llegamos a su gran mansión y los niños se bajaron del auto corriendo para entrar a la casa. Yo me quedé sin saber muy bien que hacer.

Fran se acercó y abrió mi puerta.

-Cámbiate de lugar, tendré que llevarte -fue lo único que me dijo, inmediatamente obedecí-, presta atención por donde vamos para que esto no se repita. -asentí levemente.

Pasamos todo el trayecto en silencio, era muy diferente a como cuando todo estaba bien. La indiferencia de Fran casi me quemaba.

-Oye, yo... -intenté decirle.

-Esta bien, debí captar tus indirectas. Desde un principio dejaste en claro que solo me veías como tu amigo, yo creí que tenía oportunidad pero me equivoqué -me interrumpió y lo hizo sin mirarme. Ya no supe que decir, y ambos volvimos a permanecer callados. Cuando llegamos a mi casa me bajé, él dijo que lo traería luego junto con Collin.

Lo ví desaparecer desde mi entrada, una voz detrás de mí me asustó.

-Tú novio se está llevando mi auto, espero que no lo ensucie -me di la vuelta y descubrí a mi madre con una mirada de consternación. Ella dijo su vista en mí y después lució preocupada-, ¿pasó algo?

En lugar de decir algo, solo la abracé, me di cuenta de que había pasado mucho tiempo desde la última vez que lo hice. Mi mamá ni dudó ni un segundo en devolverme el abrazo.

-¿Necesitas hablar? -me preguntó, aún no encontraba mi voz así que solo asentí-. Bueno, vamos adentro. Después de eso podemos espiar en la habitación de tu hermano porque necesito encontrar el punto débil de ese niño.

Ambas entramos a la casa y me preparé para hablar finalmente con mi madre, algo que debí de haber hecho desde hace mucho tiempo.

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Para que ya nunca digan que me tardo en actualizar xd