38

7.6K 1K 628
                                    

Tenía mucho calor.

Tenía calor y estaba abrazada a Fran.

No me quería separar pero de verdad me moría ahí, era muy caliente. Mi cara había estado escondida en su pecho y estaba prácticamente aprisionada contra él.

Delicadamente comencé a quitar el brazo que tenía encima de mí y aleje mis piernas de las suyas. Me di la vuelta lentamente y levantaba la sábana que nos cubría para poder salir de la cama cuando él de repente me abrazó por detrás hundiendo su cara en la curva de mi cuello; en mi cabello.

Me quedé quieta esperando a que Fran hablara pero aparentemente continuaba dormido.

-¿Fran? -lo llamé en voz baja para confirmar-. ¿Estas dormido? -no hubo respuesta de su parte así que creí que podía intentar salir de ahí otra vez.

Intenté separarme de nuevo pero sentí algo extraño.

-Deja de fingir, esa mano que tienes ahí abajo no se puso por casualidad -giré para verlo y lo encontré sonriendo inocentemente. Según él es tímido, pero nada más le digo que sí y se aloca-. Aún me estás toqueteando.

-¿Y? -preguntó y depósito un beso en mi hombro. Nos quité la sábana de encima y en ese momento la puerta de su cuarto se abrió inesperadamente. Lynn nos estaba observando detenidamente con una ceja alzada.

-Menos mal, están vestidos. -nos dijo. Después miró a Fran-. Mamá llegó, y te está buscando.

¿Su madre?

La verdad es que ella había sido un mito para mi, según sé, trabaja mucho y por eso siempre que vengo nunca está. Comenzaba a creer que ella era una invención, pero Collin me dijo que ya la había conocido.

-Perfecto, planeaba presentarle a Dawn -le sonrió a su hermana y volteó a verme-. Vas a poder pedirle mi mano en matrimonio.

-¿Qué? -pregunté aturdida, no estaba preparada para conocer a mi suegra aún y Fran no me ayudaba- ¿Que hora es?

-Es de mañana, bueno, en realidad es mediodía. No quiero saber qué hicieron toda la noche como para que se despierten a esta hora. -respondió Lynn.

-Solo dormimos. -traté de aclarar.

-Mentirosa -canturreó el rubio a mi lado- Nos divertimos mucho anoche.

Su hermana nos miró perturbada y se fue casi corriendo de la habitación.

-Debiste aclararle que por diversión te referías a jugar videojuegos hasta tarde. -dije golpeandolo levemente en el hombro.

-Pero así es más divertido -me revolvió el cabello dulcemente y luego me besó la frente-. Anda, tenemos que ir a ver a mi madre.

Ambos nos levantamos e intentamos arreglar nuestras ropas, acomodé el cabello de Fran porque si se veía despeinado sería sospechoso para su madre. Tomó mi mano y me llevó a la sala para conocerla.

Me encontré con una mujer castaña y delgada, tenía puesto un traje sastre e irradiaba autoridad. En ese momento pensé que probablemente así se vería Lynn cuando creciera, lo cual me daba un poco de miedo.

-Fran, ¿siempre te despiertas a esta hora? -le preguntó al rubio. Él se rió a mi lado y apretó más mi mano.

-No, pero ayer era una ocasión especial y no pude dormir. -soltó mi mano y pasó un brazo por mis hombros empujandome contra él-. Te presento a Dawn, aunque ya sabes quién es, hablé de ella contigo hasta que me pagaste para que me callara.

-La mejor inversión que he hecho hasta ahora -ella me miró finamente hasta ponerme nerviosa-. Hola, ¿que tal?

-Hola, es un placer. -respondí. Hubo un minuto de silencio donde la madre de Fran de me quedó mirando y nadie dijo nada.

-Muy bien, Fran, déjame a solas con ella -él se tensó a mi lado pero obedeció, se despidió de ella con un beso en la mejilla y conmigo, por estar nervioso, solo me abrazó antes de casi salir corriendo-. Ven, querida, siéntate a mi lado.

Me acerqué e hice lo que me pidió, sonrió amablemente y por costumbre yo hice lo mismo.

-Solo te voy a hacer unas preguntas, no tengas miedo, no hago nada -hizo una pequeña pausa-. Aunque si que haré algo si le rompes el corazón a mi bebé.

Entre en pánico porque en realidad ya lo había hecho.

-Claro, pregunte. -le dije.

-¿Por qué dormiste aquí?

-Básicamente Fran y Lynn lo decidieron por mi, yo vine a declararme a su hijo y ellos ya no me dejaron ir, aunque tampoco me opuse. -contesté, no pensé que fuese buena idea culpar a sus hijos así que también decidí tomar la responsabilidad.

-¿Y puedes asegurarme que solo durmieron?

-Pues no fuimos exactamente directo a la cama y nos quedamos dormidos, pero no pasó a más.

-¿En serio? -preguntó sorprendida, asentí en respuesta-. Me sorprende viniendo de mi hijo, siempre fue muy... Amoroso.

-Me he dado cuenta. ¿Le puedo preguntar algo yo? -esta vez ella fue la que asintió-. He venido aquí seguido, ¿por qué nunca la ví?

-Trabajo casi todo el día y a veces tengo que salir de viaje. -dijo, pero eso era algo que yo ya sabía.

-¿No le preocupa dejar a sus hijos solos? -interrogué.

-No mucho, sé que son responsables. Fran ya es mayor y Lynn hace tiempo que dejó de necesitarme para muchas cosas.

-Tiene doce años.

-Creció rápido -me respondió despreocupada.

-No se ofenda, pero no creo que a ellos no les haga falta por aquí, los hijos siempre van a necesitar a sus padres aunque ellos lo nieguen.

La madre de Fran me miró con semblante serio y no me respondió por un rato, pensé que ya lo había arruinado y que mi suegra probablemente me estaría odiando en este momento.

-Casate con mi hijo -fue lo que dijo cuando finalmente habló. Ya no estaba seria e incluso parecía emocionada, pasó de parecerse a Lynn, a ser una versión femenina de Fran.

-¿Perdón? -pregunté confundida.

-Eres buena chica, me caes bien. Casate con mi hijo. -repitió. Abrí los ojos sorprendida pero no me dió tiempo de decir algo porque me di cuenta de que ella observaba algo detrás de mi.

Me di la vuleta para ver y descubrí a Fran espiandonos asomado desde las escaleras que daban hacia la sala.- ¿Mami? -dijo él como niño pequeño- ¿Dawn ya te pidió mi mano en matrimonio?

-Estoy en eso cielo, pero lo conseguiremos.

Él bajó y caminó a nosotras para al final sentarse a mi lado, como yo estaba sentada de modo que veía de frente a su mamá, le daba la espalda a Fran. Entonces me abrazó por detrás y apoyo su barbilla en mi hombro.

-¿Terminaron de hablar? -preguntó.

-Si -respondió su madre-. Ahora estaba a punto de contarle historias vergonzosas de ti, llegas justo a tiempo.

-Nunca me pierdo la oportunidad para dejarme en ridículo a mí mismo -respondió, después susurró algo en mi oído- Fui a cambiar tu título como súper mejor amiga por siempre de mi diario, ahora es súper mejor novia por siempre.

-Tal vez me consiga un diario también -respondí y ambos reímos.

-Les agradecería que no se pusieran amorosos en frente de mi -habló mi suegra-. La felicidad de las parejas me enferma.

-Dices eso porque tú no tienes una.

-Estas castigado Fran -lo regañó molesta y me reí de él-. Y tu también Dawn.

-Ay, ¿yo por qué?

-Es que nunca pude castigar a Lynn, siempre quise saber que se sentía decírselo a una mujer.

----------------------------

Por ahí otras dos personas me pidieron dedicación, no os preocupéis queridas, que no las olvido y si les va a tocar xd

Si ven errores en este capítulo me los pueden hacer saber :v porque no dormí y ya veo borroso, quién sabe en que tanto me equivoqué.

No me laves el autoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora