O9

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Ya era miércoles por la mañana y Jungkook estaba bastante preocupado por Jimin, desde ayer que lo seguía evitando, no quería comer y mucho menos tener al Alfa cerca.

—Lindo —Lo llamó. Jungkook estaba parado en el marco de la puerta, Jimin no lo dejaba entrar a la habitación, o gruñía, o casi se le terminaba lanzando encima para morderlo. —Hermoso, ¿Dime qué te pasa?

Jimin simplemente lo ignoraba, no hacía ningún movimiento

A Jungkook le importó una mierda que Jimin le gruñera e inmediatamente entró a la habitación, el Omega se levantó de su cama e intentó salir por la puerta, pero el Alfa logró ser mucho más rápido; lo tomo por la muñeca, lo intentó acercar y terminó abrazándolo por la espalda. Jimin no se movió ni un centímetro, no permitió que ambos quedaran cara a cara

—Por favor —Rogó susurrándole cerca del oído  —Dime qué te sucede... —Retiró sus brazos de la cintura y sus manos comenzaron a buscar sus caderas. Los últimos días que estuvieron juntos logró descubrir que si sus manos se paseaban lenta y suavemente por esa zona podía lograr que el Omega se relajara a tal punto de quedarse profundamente dormido

Jimin comenzó a deshacerse en los brazos del Alfa, cayó rendido ante él. Se dio por vencido y terminó por voltearse para esconder su rostro en el cuello de Jungkook. Si le relajaba que le acariciaran las caderas, le relajaba aún más el aroma que salía por los poros del Alfa.

—¿Qué te sucede, precioso? —Preguntó mientras sus manos subían delicadamente por su espalda.

Las manos de Jimin viajaron hasta el pecho de Jungkook mientras éste lo sujetaba fuertemente por la cintura.

—Voy a llamar a un curandero —Dijo —Quiero saber que mierda te está pasando — Acomodó y arropo al Omega en la cama antes de salir de la habitación

                          ×🎈×


—Bueno, ¿Y conoces el número de algún curandero bueno que pueda llamar? —El Alfa estaba en la cocina buscando con una mano algún número de un restaurante barato mientras que con la otra sostenía el teléfono en su oreja

—Ahora que lo recuerdo, ¿No vivía una anciana en tu piso que decía ser curandera? —Habló Taehyung desde la otra línea

—Oh, cierto —Era una anciana que se había topado un par de veces en recepción, por lo poco que había hablado con ella sabía que vivía en el piso de arriba. Después de almorzar subiría e intentaría hablar con ella

—¿Ya te lo follaste? —Preguntó con emoción

—¿De verdad vas a seguir insistiendo?

—Hombre, son 10,000 wons —Se quejó —10,000 wons no se ganan todos los días

—¿Por qué mejor no trabajas de prostituto?, ganarías el triple de lo que apostaste con Hoseok

—¿Perdón?, —Dijo ofendido —  habré sido Zorra pero nunca puta. Ubicate

—¿Al final no es casi lo mismo? —Sonrío divertido

—No, no lo es

—Adiós zorra —Soltó una suave risa —Dale saludos a Hoseok de mi parte

—Adiós pedazo de perra, que no me quiere ayudar monetariamente por ser unputocobardedemierdacuandosetratadeJimin —Lo último lo dijo de forma tan rápida que Jungkook apenas lo logró entender, solo no le dio mayor importancia y colgó.

                         ×🎈×


Había encontrado el número de un sitio de comida rápida, era eso o nada. Total, unos cuantos kilos más no le harían ningún daño.

¿Una semana? ➳ ; KookMin [Editando]Where stories live. Discover now