El peor escondite

1.4K 59 1
                                    

Kate

En cuanto volvió mi alma a mi lo único que se me ocurrió fue correr. Si lo se, muy maduro de mi parte pero era eso o morir de un infarto ahí.

No fui a mi casa por que tal vez el este ahí, fui al cementerio, el único lugar donde jamas iría, por eso es el escondite perfecto. Trate de no adentrarme mucho ya que no quería toparme con ninguna de las tumbas que me causaban dolor, hacia mucho que no venia, ya casi no hay huecos por la cantidad de lapidas que se encuentra aquí, antes había mucho menos, hay aso verde en algunas, en otras solo esta la cruz y algunas flores, otras se encuentran muy descuidadas, mi idea de quedarme al principio del cementerio resulto imposible ya que empece a caminar mas a dentro, observando, y criticando. 

Todo iba muy bien hasta que choque con alguien.

- Fíjate- ni siquiera me tome la molestia de ver quien era, puesto que se me habían caído mis cosas.

- Kate?- su voz izo que dejara las cosas donde estaban y me incorporara para verlo.

- Marcus? Que haces aquí? - sabia muy bien que estaba aquí por mi hermana. 

Marcus era el novio de Kailín, se podría decir que por culpa de el ella se drogo y por eso murió Karen. Es una historia que no me corresponde a mi contarla, pero si me duele, hubo un tiempo que llegue a odiarlo tanto que casi me hago pasar con Kailín para matarlo yo mima, después de varias cesiones de rehabilitación entendí que nadie tenia la culpa, bueno si había una persona que no quiero nombrar, el y ella fueron mi desgracia siempre.

- Vine a ver a Kailín, vengo tres veces por semana normalmente, le cuento todo lo que hago con mi nueva novia y el como se parece a ella, o bueno al menos yo creo que se parecen, si no no hubiera aceptado andar con ella ni por que fuera la nieta del gobernador- sonrío con ganas, no se si era un chiste o era de verdad, si es así pues que afortunado es de tener grandes influencias- y tu que haces aquí? no pensé que vinieras en algún momento de tu vida al panteón.

- Sonará raro pero vine a esconderme de alguien, como tu has dicho nadie cree que yo venga aquí, y pues lo ultimo que quiero es que me encuentren.

- Pues yo acabo de llegar, no se si gustes acompañarme a la tumba de tu hermana.

- No, aquí estoy bien.

- Segura que te quieres quedar frente a esa tumba- dijo señalando la tumba que tenia enfrente, antes de que chocáramos iba a leerla pero pues el lo impidió, voltee a ver la tumba y leí el nombre....

Mis piernas temblaron, mis manos sudaban y mi corazón se aceleró, era la tumba de Michelle. 

Eramos las mejores amigas, hacíamos todo juntas, le contaba todo, ella sabia más de mi que  mi madre o mis hermanas, sabia identificarme, yo era la más ruda, la más problemática de las tres, Karen era la seria, la tímida y Kailín, bueno ella era simplemente ella, Michelle sabia cuando me preocupaba algo, me acompañaba a todos lados, las dos eramos las populares de la escuela y juntas molestábamos y humillábamos a una chica a la que odiábamos por que andaba con el guapo  del cole, Dafne. Si, eramos las amigas más unidas que existían, las borracheras eran inolvidables, hacíamos locuras, ella perdió primero la virginidad con el capitán del equipo de fútbol, Dmitri. El era un dios en la cama, según las palabras de mi amiga, lo que se de sexo ella me lo explico y en una de nuestras borracheras acabamos los tres teniendo relaciones, que paso no tengo idea, sigo siendo virgen si eso me dijo Dmitri. No la pasábamos increíble, y que paso? YO, eso paso. Ir a más de 120 km/h a las 4:00 am en una montaña, con litros de alcohol encima mas aparte un chingo de drogas y una gran distracción pues no resulto buen idea.

Marcus me regreso a la realidad parándose delante mio.

- No la había visto- le dije en un susurro.

La Historia De Una Nerd. © (En Corrección) Where stories live. Discover now