Capítulo 29 - Introducción a la verdad

24.4K 1.9K 478
                                    

Miré por la ventana desde el asiento de copiloto, sin ver nada más que árboles y campo, en una carretera de un sólo carril mientras la oscuridad nos rodeaba por completo.

- A 200 metros gire a la derecha. - La voz de la chica del GPS resonó por todo el coche. Lo miré con disgusto mientras que Hunter seguía conduciendo, ignorándolo.

- ¿Dónde cojones quiere que gire? Estamos en medio de la nada. - Se quejó Hunter.

Llevaba diciendo que giremos a 200 metros desde que nos habíamos perdido hace 5 kilómetros.

- Le dije a papá que actualizara el maldito aparato miles de veces, os jodéis por ignorarme. - Murmuró Savannah desde la parte de atrás.

- Que simpática. - Intervino Jayce.

- Mejor borde y directa que simpática y cursi como tú. - Le contestó Savannah.

Ahí empezaban otra vez.

Pude ver por el retrovisor cómo Ryan rodaba los ojos, el cual iba en medio de los dos tortolitos.

Continuamos por el sendero, el cual se hacía cada vez mas estrecho y en peor estado.

- A 50 metros coja la rotonda, segunda salida.

Miramos todos hacia la carretera, ni rastro de rotonadas.

- Se ha equivocado de salida, dé media vuelta.

- ¿Nos está vacilando? - Preguntó Jayce riendo levemente.

- Enhorabuena, ha llegado usted a su destino. - Dijo la voz una vez más.

Levanté la mirada, seguíamos perdidos en medio de la nada.

- Sí, nos está vacilando. - Confirmé.

Noté cómo una mano surgía de la parte de atrás, cogiéndo el GPS. Cuando quise girarme sólo pude ver a Savannah tirando el aparato por la ventana.

- Y voló. - Comentó Jayce con una sonrisa.

Bufé y coloqué mi cabeza en el asiento. Estábamos jodidos.

Seguimos unos cuantos kilómetros, hasta que el camino se acabó, desembocando en un acantilado.

- Ahora sí que hemos llegado. - Bromeó Jayce.

Me bajé del coche en cuanto Hunter paró, no podía soportar tanto estrés.

- ¿Y ahora que? - Preguntó Ryan.

- No debería de estar lejos. - Murmuró Hunter. - Necesitamos un lugar alto y observar la zona.

No me lo pensé y salté a un árbol, escalándolo hacia arriba.

No iba a mentir, las vistas eran impresionantes. La luna se mezclaba a la perfección con el cielo negro, y las estrellas alumbraban la ciudad en la lejanía

Fijé mi mirada en la zona, e intenté localizar el lugar.

Todo estaba demasiado oscuro, pero mi mirada topó con una zona libre de árboles, algo parecido a un claro.

- Chicos veo algo. - Grité desde las alturas.

- ¿Y bien? - Contestó Jayce desde abajo.

- Está muy oscuro, pero parece que hay algo unos metros hacia el Oeste. - Informé.

- Baja, vamos a investigar. - Dijo Hunter.

Le hice caso y bajé lo más rápido que pude, reuniéndome con ellos justo abajo.

Avanzamos por un pequeño camino entre el frondoso bosque. El aire resonaba entre las ramas de los mismos, provocando un ruído escalofriante.

Mis ojos se iluminaron al llegar al claro.

Aleación [SANGRE & ACERO #3]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora