Capítulo 1 parte 2.

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-¡BUUUUUUUUUUUUUUUUENOS DÍAS! -Grite en su oreja.

¡Mierda!

-¡Aaah mi mejilla! -Solto tocandose la cara.

-¡Aaah mi espalda! -Chillé estirandome.

-Joder parecemos ancianos.

-¡Santo Cristo Anselmo la pensión!

-¡Dolores Dios Santo no la cobramos!

-¡Mis pastillas! -Continuamos bromeando.

Ambos reímos como idiotas, lo divertido de las mañanas, reír por cualquier cosa.

-Hey Anselmo, ¿le has dicho a los nietos que no dormiste en la casa de reposo? -Dije restregandome los ojos.

-Hmm Dolores sabes que lo olvide, les diré que las lagunas mentales volvieron. -Se refrego la mejilla en mi regaso.

-¡Ay Agustino que cosas dices!

-¡Anselmo!

Pedazo de idiota.

-¿Que hora es?

-No lo sé, ¿cerca de las once?

-Hm, ¿que desayunamos?

-Tengo una idea...

Una hora más tarde estabamos tan llenos que sentía que en cualquier momento dejaría de respirar, Ashton tuvo la gran idea de llevarme a un "Tenedor Abierto" que quedaba cerca del edificio. De hace mucho que no venía tanta comida, Jesús era el paraíso.

-¿Y que tal los desayunos Irwin?

-Tu no lo cocinaste, así que no le pongas tu nombre querido, figura como robo. -Lo apunte con el tenedor.

-Bueno ya, pero yo te traje. Fin. ¿Que te gustaría hacer? -Cambió el tema.

-¿Tu no tienes ensayos o algo así? -Cuestioné con la boca llena. Mal educada.

-¡MIERDA VERDAD! ah pero es en la tarde, todo bajo control. -Sonrío como chico de comercial de pasta de dientes.

Salimos y como no tenía nada que hacer, de nuevo. Pasamos la tarde juntos, fuimos a una tienda de peliculas, a una de música, y después pasamos por algo para el camino y lo acompañé al ensayo. Estuvo realmente genial, como soy una total descordinada con todo lo que respecta instrumentos, sólo jugue un rato con la bateria de Ash.

****

El timbre sonó.

-Toc toc. -Dije abriendo la puerta.

-¿Quien es? -Pregunto él mirandome.

-El vecino psicopata que le quedo gustando mi sala y por eso a vuelto por más de mi cómodo sillón.

-¡Te has ganado una noche de películas con un psicopata! ¡TA-DAAAAAAA! -Abrió sus brazos dandole énfasis.

Vimos una de acción, digna de su "masculinidad" según él.

-No volveré a dormir incomodamente en el sofá mientras tu estés de lo más bien aplastandome, así que, ¡el sofá es todo tuyo! -Me levanté y corrí a la habitación luego de tirarle una manta en la cabeza.

Mientras iba por el pasillo de pronto sentí que mis pies ya no tocaban el piso.

-Que mier... ¡ASHTON NO! -Demaciado tarde.

Me tenía sobre su espalda con mi cabeza dando botes en ella.

-¡Así no son las pijamadas! -Se quejó.

-¡Esto no es una pijamada! -Debatí.

-Aún es temprano, vamos, ¿dardos de pizza o nos contamos secretos oscuros con mocos y barro? -Propuso como un niño pequeño entusiasmado.

-Hm... veamos, los vecinos estan sospechando que los pedazos de pizza que amanecen misteriosamente pegados en sus ventanas son de aquí... mejor secretos oscuros, pero que sea como verdad o reto. -Decidí.

***

-¡TRAMPOSO! ¡Yo te conté lo de mi bici! -Reclamé.

-Bien, me aburrí, cuentame más de ti mejor. -Sugirio él.

-18 años en dos semanas, el color verde, las manzanas rojas y eh, chocolate creo. -Respondí algo confusa.

-Pero eso no me dice mucho, veamos algo principal... ¿Familia? -Preguntó llenandose la boca de palomitas.

-Padres casados y una hermana menor. -Respondí.

-¿Origen?

-Madre latina, padre estadounidense, vida completa en Londres.

-Interesante... ¿Por qué te mudaste aquí?

-Hm... son varias cosas en realidad, nada demasiado serio.

"Mentirosa, mentirosa vienes arrancando de Niall por cobarde."

Calla conciencia.

-Eso solo eso de ya sabes, conocer, arriesgarse y cosas adolescentes locas.

-Bien... ¿novio? -Arrastró la pregunta lentamente.

-Hace mucho que ya paso, por ahora nada de nada. -Sonreí.

-¿Te rompieron el corazón? -Pregunto añadiendo seriedad.

Puto, que mierda hace en mi casa.

-¡Claro que no! Fue cosa de niños...

****

-¡La gira a resultado una locura! sinceramente quiero hacer esto por siempre. -Dijo el rubio.

-Creí que nunca diría esto pero, amo mi trabajo. -Soltó Harry.

-Hey chicos, sadremos un rato a ver a las fans, ¿vienen? -Entro Liam emocionado a la habitación.

Salieron del edificio con las mejores sonrisas, y lo mejor era que esta vez la de Niall era real. Firmaron autografos, se tomaron fotos, conversaron con fans y recibieron regalos. Todo iba a la perfección, excepto por un detallito...

-¿Niall que paso con tu novia? ¿terminaron? -Se escucho de entre la multitud.

-¿¡NIALL ESTÁ SOLTERO!? -Otro grito.

-No voy a hablar de esto. -Le dijo a Liam, y comenzo a caminar.

-Ya es hora de entrar chicos. -Anuncio uno del staff.

Niall fue el primero en entrar, sin esperar a los chicos subio solo a la habitación y cerro con llave, quería estar solo, unicamente con su presencia en aquella habitación, quería recordar en paz, fuera masoquista o no, era parte del proceso y debía hacerlo para poder superarlo.

Tomo su mochila del piso, busco entre las cosas de su interior y encontro un papel doblado en 6 partes, volvio a leerlo, por milesima vez quizás. Volvió a llorar, pero de frustración esta vez. Lo dejo sobre la cama e inconciente tomo su celular, le había dicho a Liam que había borrado todo recuerdo de ella, pero mintió en aquella ocasión, como en muchas anteriores. Busco en la galería y ahí estaban, la mayoría de sus momentos juntos, la palabra "extrañar" le quedaba muy corta a todo lo que el sentía.

Con una leve pizca de esperanza marco por quizás, una de las últimas veces que lo haría, el número de su felicidad.

Uno... dos... tres tonos...

Nada.

Cuatro... cinco...

-¿Hola? -Contesto la voz de un chico.

Silencio.

-Hooooooooola, ¿hay alguien ahí? -Insistió.

-Lo siento, me equivoqué. -Fue lo único que pudo decir.

Corto la llamada y junto a ella, la última chispa de fe.

****

-¿Era mi celular? -Pregunte entrando en la sala.

-Ah sip, contesté. Lo siento si te molesto, aún que era equivocado así que da igual. -Sonrío.

Remember. n.h / a.i [FANFIC]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora