Lee Chan faltó una semana al colegio. Un día durante el club, Soonyoung, su mejor amigo me había comentado que estaba enfermo por lo que faltaría hasta recuperarse. Siendo honesto no le creí, era realmente obvio que no me diría la verdadera razón de su ausencia, pues la última vez que vi a Lee Chan, él estaba mal por Yeol.
Me preocupé por él, así que el fin de semana al ver que no tenía planes de salir, decidí ir a visitarle.
Toqué unas cuantas veces el timbre, esperé por un largo rato, pero no obtuve respuesta.
Lo intenté una vez más...
En ese momento Lee Chan abrió la puerta de su apartamento, el chico estaba en pijama a pesar de que eran las 4 de la tarde, tenía los ojos hinchados y la nariz demasiado irritada.
Quizá si estaba enfermo después de todo...
"Oh... ¡Junhui hyung!" Llevó sus manos a su rostro para cubrirlo "¿Qué... Qué ocurre?" Preguntó sin retirar sus manos de su rostro. Me causó demasiada ternura.
"Mmmm, sólo venía a ver como te encontrabas. La última vez que te vi, me dejaste preocupado" Encogí mis hombros, estaba un poco nervioso.
"Ah... Mmm, bu... Bueno" Lee Chan bajó las manos de su rostro y mostró una sonrisa sincera. "Estoy bien..."
"Me alegra saber eso, realmente me preocupé porque has faltado al colegio"
"Gripe... ese mismo día, estaba muy mal, pero ya me estoy recuperando" Arrugó su nariz. Otro gesto que también me causó ternura "Gra... Gracias por preocuparse Jun hyung"
"No es nada... En todo caso, creo que ya m-"
"Pu... Puedes pasar" Interrumpió Lee Chan "Bue... Bueno si gustas" Noté como las mejillas de éste tomaban un color rojizo.
Terminé sentado en el sofá de la sala mientras veía una caricatura que Lee Chan seguro se encontraba viendo antes de que yo llegara. El desapareció por un momento. Seguía sintiéndome un poco nervioso.
Visualice el apartamento y me sorprendí por el hecho de ver que era un lugar enorme para sólo una persona, me preguntaba si Chan no se sentía solo estando en un lugar tan grande.
Chan volvió tiempo después con una bandeja de bocadillos y sodas, ahora traía puesto una mascarilla que tapaba la mitad de su rostro. Colocó en la mesita del centro y luego tomó asiento en otro sofá.
"Dis... Disculpa el desorden, no he hecho limpieza desde hace dos días" Encogió sus hombros y tomó el control del televisor. "Mmm... ¿quieres ver algo en especial?"
"Oh... no te preocupes y no." Reí nervioso.
"Mmm, bu... bueno"
Chan no volvió a hablar, se concentró en ver la caricatura. Inclusive comenzó a gritar cuando al parecer, su personaje favorito, comenzó a pelear. Se veía demasiado tierno de esa manera, el pijama que traía era de ositos, su cabello se encontraba alborotado y de vez en cuando comrezaba a estornudar por la gripe. No podía creer que este chico tan puro, pasaba sus noches en lugares llenos de personas con intensiones malas, era demasiado cruel pensarlo.
Chan estaba inclusive riendo con el programa, definitivamente cuando reía, se veía más bello de lo que ya lo era. Era como ver un ángel.
Pasaron al rededor de 30 minutos en los que Chan se mantuvo al tanto de la tv, cuando su programa terminó soltó un pequeño bufido para luego ponerse de pie.
"Hyung..." Dijo mientras pasaba su mano por sus cabellos.
"¿S... Sí?"
"Disculpe por haber causado molestias... Y disculpe por no tratarle como se debe" Pausó por un momento, se volvió a sentar en el sofá "Pero... Nunca he hablado con usted más allá de lo básico... No lo conozco muy bi... Bien"
Lee Chan tenía razón, simplemente hablábamos por un pequeño tiempo y luego era como si no lo conociera o viceversa.
"Me llamo Wen Junhui, soy de Shenzhen, Guangdong, China... Tengo 19 años, vivo en Seúl desde hace ya 5 años. Mmm, me gusta la poesía y el baile, es un gusto en conocerte" Me puse de pie e hice una reverencia.
Lee Chan acto seguido se puso de pie y comenzó a hacer repetidas veces una reverencia.
"Lee Chan... Yo... Yo... 17 años... Yo... ¡Woah! No... Sé que decir" Volvió a desordenar su cabello "El... El gusto es mío"
Después de aquello Chan pareció entrar en confianza, pues comenzó a contarme muchas cosas que pasaban por su mente. Al final terminé ayudándole a hacer el aseo, Chan había puesto un poco de música lo que terminó haciendo el ambiente un poco menos tenso.
Terminamos de arreglar todo casi a las 9 y en verdad habíamos demorado mucho, pues de vez en cuando nos distraíamos por la canción, ya que comenzábamos a cantar o bailar. Lee Chan se veía más alegre de lo que estaba cuando veía su programa, eso me ponía alegre.
Lamentablemente ya se hacía tarde, por lo que tenía que volver a casa. Me despedí de Chan con una reverencia, pero antes de salir de su apartamento, éste me abrazo por la espalda. Antes de que pudiera girarme, pude escuchar sus sollozos. Era una tortura escucharle de esa manera.
Sí... Que tonto era. Por supuesto que se sentía solo en un lugar tan grande.
Me giré para devolverle el abrazo, éste en seguida se aferró a mi torso. No dije nada, preferí acariciar su espalda y esperar a que dejara de llorar.
"Quédate, por favor..." Dijo entre sollozos.
Si pudiera describir como me encontraba por dentro, sólo diría que mi corazón se había encogido ante sus palabras.
Mañana tenía una reunión a muy temprana hora...
Pero arriesgarse un poco, no está de más en esta vida.
