When Love Met Destruction

Capítulo 14

- ¡Astrid!-. Dijo la voz desconocida mucho más cerca de mí que antes, mientras me tomaba del brazo obligándome a prestarle atención.
Al verme obligada a mirar a aquella persona que me llamaba con tanta insistencia, gire mi cuerpo y centre mi mirada en la persona frente a mí, para encontrarme con unos profundos ojos cafés los cuales me miraban fijamente. Chris. En ese momento una pequeña chispa en mi interior provocó que se encendiese el resentimiento que aún tenía hacía él. Tiré de mi brazo para así liberarme del agarre de Chris que aunque no era muy fuerte, me parecía bastante molesto.
- ¿Que pasa?-. Le escupí con evidente molestia.
- ¿Podemos hablar?-.
- No tenemos nada de qué hablar, creo que ya quedó claro que no somos, ni seremos absolutamente nada-. Dije con una sonrisa irreverente.
- Te debo una disculpa, soy un idiota no debí haberme comportado de esa manera contigo-. Soltó con la mirada gacha.
- Excelente, perdonado-. Respondí girando sobre mis talones dándole la espalda, segundos después de que intenté dar el primer paso para alejarme de él, sentí el peso de su mano sobre mi hombro deteniéndome, impidiendo que me alejara de ahí. Me detuve y gire de nuevo quedando frente a él.
-Sé que una simple disculpa no lo va a solucionar, ni tampoco va a hacer que olvides que te humillé. Realmente me gustas y actúe por instinto, me sentía muy estúpido y molesto porque me rechazaste, también se que eso no es una justificación porque no estás obligada a corresponderme, ni mucho menos, de verdad lo siento mucho-.
Aquellas palabras lograron que el rencor en mi desapareciera de un momento a otro, ahora solo me sentía avergonzada ya que había sobre actuado y había provocado que el drama aumentara más de lo necesario.
- Realmente no sabía que te sentías así, también te debo una disculpa y yo también gusto de ti...-. No pude terminar la oración debido a que Chris ya se encontraba rodeándome con sus brazos, acercándome a él.
El abrazo duro un par de segundos, los suficientes para apreciar la loción de Chris que se encontraba impregnada en su suéter negro, la cual tenía un aroma varonil bastante agradable. Al separarnos una enorme sonrisa se había formado en mi cara, al igual que en la de Chris. Ese repentino acontecimiento repleto de emociones había resultado mejor de lo que hubiese pensado, y realmente ese final me fue bastante grato.
Me despedí de él y avance hacia mi auto con una sensación de satisfacción en mi interior pues uno de los problemas que me tenían molesta se había solucionado, hasta había olvidado que al día siguiente tendría un examen importante, mismo al que le tendría que invertir una considerable cantidad de mi atención y tiempo. Y así fue, aquella tarde me la pasé sumergida en mis apuntes, los cuales me fueron de mucha ayuda para una mejor comprensión de los temas.
Pasadas un par de horas logré terminar con el estudio, por lo que me dispuse a dormir con una ligera sensación de emoción en mi interior, puesto que no sabía lo que vendría después, no solamente con respecto al examen, sino también en relación a Chris y a Lara.