ME GUSTAS

CAPÍTULO 119: "FELICIDAD INFINITA"

Desperté, con un un dolor de cabeza infernal; y lo único que recuerdo, es a mi gritando "no es real", en medio de la carretera, luego de eso no recuerdo que fue lo que paso.

Se me viene a la mente que estoy olvidando algo.

Me toco la cabeza, esta bendada, y me duele.

De repente me veo sola, en una  habitación desconocida, recordando lo que paso.

-¡Beck! ¡No lo dejen morir!-Empiezo a gritar, una y otra vez.

De repente entra Camile; sin expresión alguna en su rostro.

-¡Camile! ¡No dejes que muera! ¡ayudame a salir de aquí!-Digo levantándome rápidamente de la cama.

-Emily, no hagas eso, relajate.-Me dice tomando mis hombros.

-Camile, Beck se murió, y no me pude despedir de el.-Digo con lágrimas en los ojos.

Ella niega una y otra vez con la cabeza.

-Ellos lo mataron.-Digo, una y otra vez mirando hacia el suelo.

-Emily escuchame con atención.-Dice levantándome el mentón.-Beck no esta muerto.

-No me mientas, yo lo vi, el ya no tenia los tubos por donde respira, y tenia los ojos cerrados, ellos lo mataron.-Digo.

Lo único que hago es llorar, y respirar, aun no lo creo, el esta muerto.

-El ya no tenia sus tubos, porque ya no los necesita, el puede respirar por si solo.-Me dice.

-¿Como? ¿no esta muerto?-Pregunto, no lo puedo creer.

-No, solo esta dormido, lo están revisando, el doctor dice que abrirá los ojos en unas dos o tres horas.-Comenta.

-¿Y donde esta? Necesito verlo.-Digo.

La emoción no me cabe, estoy ansiosa, después de tanto esperar, después de tanto llorar, al fin el despertó.

Al fin escucharé su hermosa y ronca voz, al fin volveré a sentir sus cálidas manos, al fin volveré a ver su sonrisa y volverá el sabor de sus labios.

-No puedes verlo; solo la Señora Mackenzie puede entrar.-Comenta.

-Pero yo soy su esposa, y necesito verlo.-Digo mirándola a los ojos.

No es posible que después de tanto esperar no me dejen verlo.

-Y ella es su madre, y es la única que puede verlo.-Dice.

Nos quedamos en silencio, me toma cuidadosamente las manos, y me dirige a la cama, donde nos sentamos.

-¿Cuando lo podré ver?-Pregunto.

-El doctor dice que lo podremos ver la próxima semana.-Responde.

-¿Que? no puedo esperar una semana  para verlo,  necesito verlo ahora.-Digo.

Mis manos están temblando, estoy ansiosa por verlo, quiero ir ya, quiero salir de aquí.

-Lamentablemente hay que esperar.-Dice.

-¿Que hago aquí?-Pregunto.

-Llegaste al hospital, al piso donde se hallaba Beck, estábamos todos ahí; pero llegaste como loca, con una herida en tu cabeza y gritando.

-¿Y como es que ustedes llegaron antes que yo?-Pregunto.

-Llegamos antes porque tu tuviste un accidente en el auto,  y perdiste la conciencia unos minutos, eso nos dío tiempo de llegar, por eso te sangraba la cabeza.-Responde.

-¿Y como llegue hasta aquí?-Pregunto.

-En realidad alguien te trajo, un buen señor, y tu solo llegaste como histérica.-Me dice.

-No, pero, yo arranque el auto, yo vine por mi propia cuenta, lo recuerdo, ahí estaba Jenn.-Digo sin poder creerlo.

-Estabas delirando, nada fue real; sólo el accidente.-Comenta.

Es increíble todo lo que hago, aveces me asusta, con cosas así puedo hacerle daño a mis hijos.

-¿Y mis hijos?-Pregunto.

-Ellos están bien, pero se asustaron mucho al verte; en especial Santiago.-Dice y empieza a abrazarme.

-Ya quiero ver a Beck.-Digo sonriendo.

-Todos lo queremos ver.-Dice.

El día transcurrió normal, pude ver a mi madre, ella en verdad estaba preocupada, yo por otro lado, podía jurar, que saltaba de alegría.

Beck despertó, y ahora, todo será diferente, todo será mejor.

¡Hola!
Finalmente despertó Beck.... el capítulo mas esperado de todo el libro... espero que les haya gustado mucho, mucho.
Pendientes del próximo capítulo.

Atte: Triss.