El Sobrino 2: El retorno de la hijastra.

Epílogo.

Diez años despues...

Me quito los auriculares y sonrío al público frente a mí, una mezcla de tristeza y emoción me embarga. Esta es mi última presentación en un festival tan grande. Los años pasaron volando pero disfrute todos y cada uno de ellos, decidí por tomar un descanso, pasar más tiempo en casa.

-Quiero que sepan- digo hablando con el micrófono hacia las miles de personas que me miran igual de emocionados que yo- que ustedes son todo para mí, sé que están tristes por mi decisión pero es hora de dejar que nuevos talentos suban.- sonrío más ampliamente cuando la multitud aplaude y corea mi nombre.

Me subo a la cornisa al borde del escenario y hago una teatral reverencia haciendo que el público enloquezca, cuando levanto nuevamente la mirada, mis ojos están inundados en lágrimas y sonriendo lanzo besos despidiéndome de mi público.

Uno de los muchachos del equipo me ayuda a bajar y salgo del escenario acompañada por los aplausos y gritos de mi gente.

Cuando llego tras bastidores otra ronda de aplausos de sorprende y sonrío agradecida a todo el equipo que me acompaño durante todos estos años, Pat aparece entre la gente y no duda un ínstate en abrazarme.

-Estoy muy orgulloso de ti.- murmura a mi oído.

-Lo hicimos juntos, esto fue todo gracias a ti Pat.- respondo.

Mi amigo me sonríe con ojos lleno de lágrimas.

-¿Dónde están?.- pregunto ansiosa al no verlos aquí como cada vez que termino una presentación.

En ese momento las personas frente a mí se mueven a un lado como si fueran empujados y aparece la luz de mis ojos, mi ángel, mi bebé.

-¡Mami!.

Se mueve rápidamente a pesar de estar metida dentro de un disfraz de unicornio, corre hacia mí con los brazos elevados y no dudo un instante en alzarla.

Lleno su carita de besos haciendo que ella se ría.

-¿Dónde está papi?.- le pregunto al no verlo.

-Me escape de él.- me responde Harmony con una sonrisa.

-¿Qué dijimos sobre eso?.

Pone los ojos en blanco haciendo que todas las personas a nuestro alrededor se rían, Jimmy llega corriendo hacia aquí y cuando ve a nuestra hija en mis brazos respira tranquilo.

-Cada vez es más rápida y astuta, bien hecho Harmony.- se ríe Pat.

Jimmy le dedica una mala cara. Las personas se van dejándonos un poco más de privacidad, la música vuelve a sonar haciendo que Harmony sonría emocionada e intente quitarse los tapones de oído que lleva cada vez que está en un festival.

Niego agarrando sus manos.

-Vamos a alejarnos un poco del ruido.- digo alto para que Pat y Jimmy me escuchen.

Salimos de detrás de escenario, mis compañeros me saluda y me sonríen un poco tristes por mi retiro.

Entramos a la sala de descanso y dejo a Harmony en el suelo, ella no pierde tiempo y se quita los tapones. Nunca le gusta usarlos.

-No pude darte mi beso de felicitaciones.- dice Jimmy antes de agarrarme delicadamente de la mejilla y darme uno de esos besos que tanto me gustan.

A pesar de que pasaron doce años desde que no vimos por primera vez, doce años desde que nos enamoramos todavía hay días que no puedo creer que él este conmigo. Que haya abandonado su vida tranquila en el campo para venir aquí conmigo, a la locura que tuvimos todos estos años. Que haya sido mi compañero en todo y más importante que todo eso es que me haya regalado lo más preciado que tengo en mi vida, que me haya dado a Harmony. Nuestra bebé de cuatro años, nuestro tesoro más amado.