Éramos Especiales (COMPLETA Y EDITADA)

Violeta IV

Violeta IV

Hoy cumplimos dos meses con Tomas. Realmente lo amo y él me ama, pero sigo sintiendo ese dolor en el pecho, esa angustia que me oprime; no quiero ocultarle nada pero tampoco tengo el valor para contarle mi mayor secreto, es por eso que me refugio en la escritura. Mi cuanta de Wattpad es lo único que alivia mis penas.

Apenas

Penas que apenan mi alma.
Penas que apenan mi corazón.
Penas que apenas logro curar.
Ay penas, las quiero olvidar.

Penas que apenan mi vida.
Penas que apenan mi mente.
Penas que apenas puedo calmar.
Ay penas, siguen latentes.

Penas que apenan mi cuerpo.
Penas que apenan mi ser.
Penas que apenas puedo vencer.
Ay penas, son mi presente.

Mayormente soy de actualizar en Wattpad entre dos o treces veces por semanas, pero últimamente estoy subiendo mis escritos todos los días e incluso más de uno. Son miles los seguidores que tengo en esta red social, cientos de comentarios me llegan a diario al igual que mensajes. La cantidad de personas que leen mis textos son superior incluso a la cantidad de habitantes del pueblo donde vivo

Aun así me pregunto de qué me sirve tener tantos seguidores si ninguno sabe quién realmente soy. Pienso y me apeno, porque en el mundo real como en el mundo virtual oculto mi verdadero yo. ¿Algún día voy a ser libre? Ni siquiera escribir alcanza para que se  alivia mi dolor, o no totalmente. No quiero mentir más, pero el miedo es más fuerte.

Chat individual

─¿Estas Eze? ─ decidí hablarle a Ezequiel.

─Si Viole, ¿Qué paso?

─Necesitaba hablar con alguien ─solo me dejó en visto. Y no volvió a responder.

Empezó la semana y nuevamente la rutina de ver todos los días a Tomas en la escuela. Era tan bueno conmigo, tan atento y romántico. Aun así ya hacia un tiempo en el que no puedo mirarlo mucho tiempo a los ojos y temo de que se dé cuenta. La pesadilla que tuve la otra vez cada vez se hace más presente. El amor no debe tener mentiras, entonces si es así no se si realmente amo a Tomas.

Después de la escuela Tomaa me había invitado a comer, cada día planteo una nueva excusa para no estar tanto tiempo con él. Sé que esto está mal, estoy lastimándolo por algo que a mí me lastima, él no tiene la culpa. Al llegar a casa fui directo a mi cuarto, no tenía ni siquiera ganas de comer. Lo único que me despejaba era hablar en el grupo, tal vez porque a ninguno de ellos tenía que mirarlos a los ojos. Ya llevamos dos meses en el grupo y por suerte me llevo bien con todos, hasta incluso con Mauro he tenido charlas entretenidas.

Chat grupal

─Sofía: Yo estudio francés hace ya bastante tiempo. Pero igual quisiera estudiar inglés ─Sofía se había ido del grupo pero después volvió. Mucho no la conozco, pero gracias a Emilia que la llena de preguntas puedo saber más de ella.

─¿Y por qué estudias algo que no te gusta? —le pregunté.

Sofía no respondió, tardó varios minutos en contestar pero por sorpresa no fue a través del grupo sino directamente a mí por privado.

Chat idividual

─Te respondo por acá porque estamos hablando las dos solas en el grupo y tal vez a algunos ni les interese, jajaja. La verdad es que no estudio ingles porque mis papás no quieren. El año que viene me voy a vivir a Francia, voy a cursar mi último año de la secundaria allá y después voy a seguir la carrera de medicina. Es por eso que mis papás me mandaron a estudiar francés.

─Entiendo ¿Y vos querés hacer eso? Irte a vivir a Francia.

─La verdad que no.

─¿Se lo dijiste a tus papás?

─No y si se los dijera no serviría de nada. Digamos que mis papás son bastante estructurales y anticuados. Ellos lo hacen por mi futuro.

─Pero no te dejan hacer lo que queres, es injusto que no te de tenjen ser vos misma. Aunque no soy la indicada para hablar, mis papás también tienen lo suyo.

─¿Qué tienen, por qué lo decís?

─Digamos...a vos tus papás te prohíben hacer lo que te gusta mientras que los míos me prohíben ser quien soy.

─Perdón pero no entendí ¿Por qué decís eso? ─estaba entre la duda de si contarle o no sobre mi sexualidad. Pero ya no quiero, no quiero mentir más.

─Voy a ser directa. Soy bisexual y donde vivo está mal visto incluso por mis papás. Nunca se los dije pero sé que lo saben. No dejan que amigas vengan a dormir a casa o yo ir a sus casas. O si salgo con chicas mayormente ponen excusas.

─Entiendo. Pero mirale el lado positivo.

─¿Cuál?

─La verdad, no sé cuál sería pero algo tenía que decirte, jajaja.

— jajajaja, está bien. Al menos me hiciste reír.

─Ves ahí esta, eso es lo positivo. Que conmigo podes ser quien realmente sos y te puedo hacer reír, jajaja.

─Entonces vos también, conmigo podes compartir todo aquello que querés hacer pero no te dejan.

─Genial. Encontramos lo positivo para ambas.

─Gracias —dije.

—De nada Viole, solo te pido que no comentes lo mio sobre que me voy a Francia. Al memos no por ahora.

—No hay problema. Tu secreto esta a salvo conmigo.

—Igual el tuyo.

Hablar con Sofía me hizo bastante bien. No quiero mentirles más a las nuevas personas que conozca, en cuanto a Tomas ya tomaré el valor para decirle la verdad. Al final del camino veo mi libertad.