Mi Profesor

Capitulo 8

Estaba como una completa inútil sentada en la computadora sin hacer algo interesante. Apenas y había terminado mi tarea. Nunca había agarrado la Laptop para algo que no fuera mi tarea. Así que me metí a Facebook para ver que encontraba.

   Algo me llamo mi atención y me entro la duda de que si Ahian tenia Facebook. Puse el buscador y empecé a escribir su nombre, puede que tuviera suerte o tal vez no, en cuanto vi las opciones di al instante con él. Me metí en su biografía y estaba algo indecisa si mandarle la solicitud o no. <<Qué más da, no tiene nada de malo con intentarlo >>. Y así lo hice le mande la solicitud.

   También me di cuenta que Cedrik me había mandado una solicitud. Vaya sorpresa...

—¿Qué haces Mariam? — se acercó mi mamá.

   Hoy llegaba temprano de su trabajo, cosa que rara vez sucede.

—Estoy viendo Facebook — le dije suspirando —. Termine la tarea y me dio curiosidad meterme.

—Espero que esas cosas no te distraigan en tus estudios — bebió su taza de té.

   Mi mamá era estricta, pero no me quejo de como me estaba educando. Se sentó en el sillón y decidió ponerse a leer.

   Apague la computadora y decidí ponerme a dibujar. Me sentía tan rara por haberle mandado solicitud a Ahian.

....

—¡Mariam! —oí gritar detrás mío.

Voltee, quien me hablaba era Cedrik que venia corriendo hacia mí. Lo salude en cuanto se acercó.

—Hola — sonreí.

—¿Puedo preguntarte algo?

—Ya lo estas haciendo — dije riendo.

   Se pasó la mano por el cuello nervioso.

—Quería ver si querías ir saliendo de clases a tomar un café. ¿Puedes? — me dijo al fin.

   No sabia si realmente quería salir con él, pero creo que notó lo rara que estaba.

—Bueno es si quieres — dijo rompiendo el silencio.

—Sí, si claro — lo dije tan de repente que ni yo misma me reconocía.

   Cedrik sonrió y se puso frente a mí evitando que siguiera caminando.

—Te veré en la salida — se alejo corriendo por el pasillo.

   ¡Pero que día me espera hoy! Sigo caminando hasta llegar al salón.

   Ahora mismo explicaba el profesor Omar, historia del arte algo que realmente no es tan interesante. Algunos ahora mismo están que quieren dormirse,como yo, y otros que están rayando su libreta. Historia universal me interesa mucho más que esto.

   Saque mi libro de "Los hornos de Hitler". Ya que no me interesaba para nada está clase, eso evitaría que me durmiera. Después de unos treinta minutos el profesor paró su aburrida plática:

—Chicos pueden salir, no quiero que se queden en mi salón durmiendo — recogí mis cosas y salí disparada a la cafetería. Estaba que me dormía.

Pedí un chocolate frío y me lo bebí algo rápido, mientras buscaba a Lena. Estaba muy tensa.

   Pasé por la sala de profesores algo rápido y vi a Ahian con la profesora de filosofía, de repente sentí como mis mejillas me ardían y sentía un feo nudo en la garganta. No me fije quien estaba frente a mí y le tire todo el chocolate frío; Omar estaba algo enfadado pero al verme cambió sus gestos y me sonrió.

—Lo siento profesor, no me fije que iba enfrente de mí— tome una servilleta que tenia en mi mochila e intente limpiarle aunque era algo imposible —. En serio que tonta fui.

   Me tomó de un hombro y me hizo mirarle.

—No te preocupes, solo fue un accidente. Pero si que debo cambiarme de suéter — tenia en sus manos su maletín de trabajo, así que decidí ayudarle.

—Si quiere puedo ir a dejar sus cosas.

—Bueno ya que te ofreces... Gracias. Le encargas mis cosas a Ahian y dile que tuve que regresar al coche por unas cosas. Anda ve — me dijo y voy directo a sala de profesores.

   Me temblaban las manos, porque nunca había sentido una sensación así y menos por ver a alguien con otra persona.

   Entre a la sala, y fue el primero en verme entrar; yo baje la mirada y me acerqué hacia él. La de filosofía me sonrió y se dirigió por unos libros.

—Ahian... El profesor Omar me mandó a que le dejará sus cosas mientras volvía — deje la mochila sobre la silla que tenia frente a mí.

   Él me miró nuevamente y ya sabia que preguntaría.

—¿Qué le sucedió? —dijo curioso.

   Me mordí el labio y baje la mirada al recordar la escena.

—Pues sin querer le tire mi bebida en su suéter.

Se empezó a reír en voz baja y me sonrió.

—¡Ay Mariam!Bueno él tenía que quitarse de una vez por todas ese suéter gris.

   Y tenía razón, desde que lo conozco, siempre a usado ese suéter gris.

—Juro que fue un accidente, pero de todas formas ahí están sus cosas — le dije y estuve a punto de alejarme cuando me volvió a hablar.

—¿Con qué ya me encontraste en Facebook? — lo dijo en voz baja para que nadie nos escuchase. Subió una ceja esperando mi respuesta.

   Se me había olvidado por completo ese detalle. La sangre sentía que me hervía y no sabia como reaccionar, pensaba que no se iba a dar cuenta.

   También pensaba que se iba a portar distante después de lo que había sucedido, pero no lo hizo, me alegra mucho.

—Pues al parecer sí. Supongo y me la rechazo — dije después de unos segundos.

   Negó con la cabeza y me volvió a mirar.

—Tú sabrás si te la acepte o no.

   Asentí y me aleje con nerviosismo de ese lugar, no tenía idea de como mi día a estado dando varios giros y aún falta la cita con Cedrik. Realmente tengo la duda, de si Ahian tiene algo con la de filosofía.

...