We Don't Talk Anymore. [Kookmin]

Capítulo 5.

Con mi mejor amigo estamos en mi cama mirando aquél anime que tanto le recomendaron. Sin embargo, mi mente no se concentra en ningún momento en la historia. Todo lo contrario. Estoy enfocado en la laptop, desde la cual lo estábamos viendo, sin ver realmente.

Mi vista, de vez en cuando se dirige hacia la ventana, la cual tiene las cortina corridas, de modo que nada del exterior se pueda ver.

-Olvídalo...- Me dice Taehyung pausando el video.

-No estoy pensando en él.- Miento intentando sonar inocente. Sin embargo, duda de mis palabras y por ello me toma a prueba.

-¿Por qué la protagonista se va?- Me pregunta para corroborar si es verdad.

Intento pensar en la respuesta pero no logro recordar nada.

-Porque... la... ¿abandonaron?- Pregunto con toda la indecisión del mundo.

-Suertudo.- Exclama al lograr adivinar de que va la trama. Sonrío satisfecho y le saco la lengua burlón para luego estirar mi mano volviendo a poner a correr el video.

No obstante, el timbre de casa suena volviéndonos a sacar de la historia.

No le prestamos atención al llamado sino que seguimos con lo nuestro, seguro Hoseok se hará cargo de quien sea que esté llamando a la puerta.

Tomo algo de refresco notando la nueva presencia de Hoseok, quien entra en mi habitación sin pedir permiso.

-El vecinito, Jungkook, está abajo y quiere hablar contigo.- Me dice riendo divertido. Escupo todo lo que antes había en mi boca buscando mi única salvación para poder salir de allí.

Pero Taehyung estaba igual de sorprendido que yo, quizás más. Jungkook no había pisado mi casa desde hace años, muchos menos desde que conocí a Taehyung, por eso se nos hacía raro su presencia.

-Esto no lo vi venir.- Me confiesa asegurándome con ello que no tenía ninguna excusa para evitar lo inevitable.

-¿Le dijiste que estaba?- Le pregunto a Hoseok.

-Es obvio. No ves que vine a buscarte.- Me dice rodando los ojos por mi estúpida pregunta.- ¿Por qué huyes? No hiciste nada malo. Él sí.

¿Qué no hice nada malo? Intenté entrar a una habitación en la cual Jungkook con su novia estaban teniendo sexo para evitarlo, para luego hacerle una escena y pelear por las mismas cosas de siempre. Claro que había hecho algo malo.

No, no lo quería ver. No necesitaba humillarme más de lo que ya lo había hecho. Mucho menos sabiendo que querrá hablar conmigo a solas. Terminaré haciendo lo que intento evitar hace años, tener disputas con el pelinegro.

Pero tampoco le veía la manera de poder evitarlo. Así que simplemente me resigné dejando las cosas a un lado para sentarme a la orilla y colocarme la férula que me permite caminar mejor.

-¿Jimin?- Me llama Taehyung con un tono arrepentido al no poder hacer nada para ayudar.- Puedo quedarme contigo si lo prefieres, sé que no querrá pero no es su casa, podemos hacer lo que quieras.

-No, está bien.- Contesto seguro.- No me dejaré llevar ésta vez. No discutiré. Escucharé lo que tenga que decir y ya. No hablaré. No diré nada que pueda implicar una pelea.

Pero siempre decía lo mismo y siempre terminábamos discutiendo. Solamente rogaba que no sea esta vez como una de esas tantas veces.

Bajamos todos a la sala de estar para encontrarme con el pelinegro sentado en el sofá. Está pensativo mirando a la nada hasta que hacemos acto de presencia y éste se levanta recibiéndonos.