....

—Sí, Daddy, así me gusta, sí.

Cada estocada era más dura y profunda. Baekhyun estaba completamente tumbado sobre el colchón y el pecho de Chanyeol pegado a su espalda. Amaban esa posición porque se podían sentir más, transpiraban juntos y llegaban al orgasmo al unísono.

Chanyeol se despegó de su cuerpo, y sin salir de él palmeó su muslo para que se acomodara de manos y rodillas sobre el colchón. Baekhyun se acomodó en esa posición, sumiso, y Chanyeol comenzó a masturbarlo mientras seguía con sus embestidas. De su garganta brotaron gemidos altos, sin importarle ser escuchado porque a esa altura la excitación era sumamente abrumadora.

Cada embestida era fuerte, dura, y Baekhyun gritaba sus gemidos. —¿Te gusta, Princesa, te gusta?

Baekhyun no podía responder debido a la oleada de placer que lo consumía. Chanyeol no dejaba de tocar su punto justo, a la vez que lo masturbaba y eso era demasiado. Chanyeol salió de él sin previo aviso, y Baekhyun se estremeció al sentirse vacío una vez más. Abrió sus ojos, descolocado, sin entender por qué lo hizo, lo quería dentro suyo otra vez, otra vez, y si es posible toda la vida.

Chanyeol lo dio vuelta con fuerza, siendo bruto, y se recostó sobre su pecho, entrando nuevamente en él.

—Más, Daddy. Más fuerte.

—Lo sé, hermosa. Sé cómo te gusta, bebé.

Chanyeol lo hizo sufrir, porque las embestidas siguieron siendo duras y profundas, pero lentas. Una, y otra... y otra.

Baekhyun negaba, con los ojos cerrados... —Rápido, más- más rápido, Daddy.

Chanyeol sonrió y lamió el camino de la nuez de Adán, hasta llegar a su boca y lo besó con furia.

Me encanta cogerte, hermosa... me encantas, me gustas, y te amo. —Susurró en su oído.

Baekhyun abrió los ojos al escuchar aquello. La expresión en su rostro era de desconcierto, confusión. Chanyeol le dijo 'te amo'... ¿Cóm-Qué? Ni siquiera iba a intentar exigir una explicación de eso, al contrario, en respuesta lo besó, lo besó con ansias. Chanyeol estaba ebrio y posiblemente no recuerde esto luego.

Yo también te amo, Daddy. Te amo, me encantas. —gimió.‎

Minutos luego, Chanyeol se desplomó sobre su pecho al sentir que llenó su interior.

....

Ugh... bebé, eso fue... eso fue... wow. —Sehun resopló, tratando de volver a la calma. Aquella mamada que recibió de su ¿novio? fue espectacular, como lo eran siempre.

—Hagámoslo, Sehun. Hagámoslo ahora, aquí.

—No, no. Shh... ¿Escuchas algo?

Luhan apoyó su cabeza en la puerta del baño, en silencio, tratando de escuchar. —Uhm... no. No se escucha nada. ¿Habrán terminado?

—Quizás... ¿Vamos a casa? De todas maneras hace rato que estamos aquí encerrados.

Luhan sonrió y asintió. Unió sus labios en cortos besos y abrió lentamente la puerta del baño. Efectivamente Chanyeol y Baekhyun no estaban, así que aprovecharon el momento para salir de allí.

—Voy a bajar y avisarle a Tao que me voy contigo, amor.

—Bueno, bebé. Yo bajo después de tí. Buscaré a Baekhyun para avisarle que me voy contigo.

Sehun bajó segundos luego que Luhan, y lo perdió de vista entre tanta gente. Las fiestas de Tao eran así, él era alguien popular en su curso, muy querido por todos, y todo el mundo asistía a sus fiestas. Caminó en busca de Baekhyun, aún sin poder olvidar que escuchó sus gemidos y oh, el pequeño detalle de que se hace pasar por mujer en el sexo. ¿Por qué? ¿Por qué a él le tuvo que pasar esto? Es decir, no lo juzga, ¡para nada! cada loco con su tema, pero ahora va a ser malditamente incómodo volver a mirar a ambos a los ojos luego de escuchar como tienen sexo duro como dos salvajes, ugh, no necesitaba tanta información.

sHe 》ChanBaek.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora