Capítulo 9.

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~•~

Era sábado temprano cuando Chanyeol despertó por aquellos besos que recibía. Una vez que abrió los ojos, Baekhyun se acercó y sin preámbulos, lo dijo.

—A la mierda todo, te extraño.

Esa es la única advertencia que Chanyeol consiguió antes de que Baekhyun se sentara a horcajadas sobre él y uniera sus labios. Chanyeol mantuvo sus brazos firmemente a los lados y no hizo absolutamente nada para disuadir a Baekhyun de agarrar su rostro con ambas manos y con impaciencia chupar su labio inferior.

—Hasta que lo admites, hermosa. ¿Me extrañas? ¿Extrañas mis besos?

Baekhyun no contestó, simplemente se quedó sentado allí, respirando ruidosamente por la nariz y la boca, mientras se besaban, se besaban y besaban.

—Nada de besos.

Baekhyun se alejó, frunció el ceño. —¿Eh?

Chanyeol rió. —Que dijimos aquella vez que nada de besos y míramos ahora.

Baekhyun rodó los ojos y volvió a unir sus labios desesperadamente, mientras hacía movimientos circulares sobre Chanyeol.

El castaño rompió el beso del momento para seguir hablando. —Tú no querías besarme, y mírate ahora... hermosa. —susurró mientras apretaba su culo, logrando que Baekhyun sintiera su miembro sumamente duro debajo de él—. Admítelo, te encanta besarme, te encantan mis besos.

No pasaron muchos segundos luego de eso, que Chanyeol lo empujó contra el colchón, colocándose sobre él. Sus manos volaron hasta la cintura de Baekhyun, y él se sonrojó. No podían evitar que sus caderas se balanceé lentamente hacia abajo contra el cuerpo de Baekhyun, frotando ambos miembros. Chanyeol presionó su lengua contra la de él y gimió. Ambos lo hicieron.

Baekhyun retrocedió, jadeando un poco y estudiando el rostro de Chanyeol. —Hm.

Dime lo que quieres. —desafió Chanyeol—.

Baekhyun se acarició su barbilla, pensativo. —Hmm... tal vez... sólo tal vez podrías hacer que no me arrepienta de haberme despertado tan temprano.

Chanyeol parpadeó. —¿Y qué debo hacer?

Baekhyun se encogió de hombros y se acercó de nuevo por más besos.

Se sentía demasiado bien. Esto que hacían, se sentía tan jodidamente perfecto... como si no hubiera nada mejor.

Chanyeol sabía que Baekhyun era difícil de complacer, no se conformaba con simples duras embestidas, ni rudos besos. Siempre buscaba más, y Chanyeol era quien trataba de complacerlo en todo.

Unieron sus labios nuevamente de manera descoordinada. Chanyeol gimió mientras se sacudió contra Baekhyun y volvió a romper el beso, jadeando. —Sólo tienes que decirme. Sólo-

¿Hm? ¿Decirte qué? —Baekhyun apretó sus piernas alrededor de sus caderas, friccionando ambos miembros con dureza.

Chanyeol sintió que su miembro estaba por estallar, y él sólo necesitaba escuchar de la boca de su Baekkie que era lo que quería.. Chanyeol ama escucharlo gemir, ama escucharlo suplicando por una buena cogida.

Vio los ojos de Baekhyun bajar la mirada hacia su miembro y como sus cejas se arquearon mientras mordía su labio inferior, para terminarlo tuvo la audacia de sonreír.

Chanyeol se sonrojó. —Sólo voy a... voy a hacerte lo que me pidas, hermosa. Dile, dile a Daddy lo que quieres y como lo quieres. —susurró en sus labios—.

~

La próxima vez que ocurrió, fue en casa de Baekhyun. Él estaba en la cama, y Chanyeol se había introducido de imprevisto a besarlo y comenzar con su rutina habitual de sexo un viernes por la madrugada.

sHe 》ChanBaek.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora