15

1.8K 457 72
                                    

—Hola —dijo Guillermo, sentándose al lado de Samuel.

—¿Otra vez tú? —preguntó Samuel, llevándose el sándwich a la boca.

—¿Te molesto?

—Un poco, sí.

—Yo sólo quiero ser tu amigo.

—Yo no necesito más amigos.

Guillermo, al terminar de escuchar aquello, se abalanzó sobre Samuel y le dio un gran abrazo. Samuel abrió mucho los ojos y todo su cuerpo se tensó.

No tenía una excusa para abrazarlo, pero sabía que Samuel necesitaba ese abrazo más que nunca.

—No sé por lo que estás pasando —susurró Guillermo—, pero quiero que sepas que puedes confiar en mi. Te abrazaré hasta que el dolor pase.

Suicida | wigettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora