RECUPERÁNDOTE

LA FELICIDAD REAL

El dolor...

La desesperación que se siente al no poder respirar...

La oscuridad que te envuelve...

Nada de eso era podía compararse a la angustia que te causa el saber que tu persona amada está sufriendo.

Era capaz de dejarlo todo, con tal de no verlo sufrir.

Lo único que quería era mostrarle la luz. Lo único que quería era darle una razón para existir. Lo único que quería era demostrarle lo mucho que lo amaba...

Lo único que quería era que sea feliz.

Sólo eso quería.

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_Naruto... – escuchó una voz llamándolo en la lejanía...

Esa voz era familiar...

_Mgh... – musitó abriendo los ojos hacia la fuente de la voz.

Y lo primero que vio fue...

¡¿Qué rayos era eso?

Una cosa negra frente a él...

_¿Ya estás consciente? Reacciona de una vez porque me estoy aguantando las ganas de golpearte

La vista de Naruto se desempañó y pudo ver más claramente.

Ah, esa cosa negra era una nariz, la nariz de...

_¿Kyuu... bi? – musitó el rubio distinguiendo al zorro, acostado de brazos cruzados, frente a él. Mientras que él estaba echado en el suelo lleno de agua.

_... – Kyuubi resopló como respuesta – si te atreves a hacer 'eso' de nuevo, te voy a torturar psicológicamente por el resto de tu vida – amenazó... como si no lo hiciera ya.

_¿Qué...? ¿Qué sucedió? – atinó a preguntar Naruto, desconcertado y medio perdido de la situación.

_Nada, que fuiste estúpido como siempre – respondió el biju, sin ganas de dar detalles, además, no era como si supiera mucho de los detalles fuera de lo que Naruto ya sabía.

_Sasuke... – musitó el rubio de repente, como si lo hubieran pellizcado – ¡Sasuke! – se sentó asustado al hacer memoria de lo ocurrido – ¿Dónde está Sasuke? – preguntó con desesperación, mirando al zorro

_No me preguntes a mí – bufó Kyuubi con molestia – no me interesa lo que le pase a ese tipo

Pronto el zorro se arrepintió de haber dicho eso al ver que Naruto pasaba del desespero a la angustia total, comenzando a hiperventilar por pura constipación e impotencia.

_Él sólo tenía unas heridas superficiales, tú lo viste – decidió decir Kyuubi, tratando de calmar al cabezota que parecía a punto de colapsar, imaginando quién sabe qué cosas – no va a morirse por eso, lo máximo que pudo haberle pasado sería desmayarse o hacerse pipí del miedo

_Él... estaba solo... – musitó el rubio, completamente asustado, sin prestarle mucha atención a lo que dijo el demonio – él... pudieron haberle...