Zehn / Dyésit / Diez / Ten

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Los gorilas que habían estado antes hablando y señalando a Harry celebraron. Parecían niños pequeños en Navidad. El que se parecía a Tigr se adelantó, sonriente.

— ¡Lo sabía! ¡Eres el mejor! —festejó, casi saltando hacia Harry con un fuerte acento ruso y le tendió la mano—. ¡He visto todos tus videos! ¡El último es uno de los mejores!  

Harry se volteó y le correspondió el saludo.

— ¡Vaya, gracias hermano!

Louis miraba toda esa situación con cierta gracia. El nombre de Harry Styles le parecía conocido, pero no lograba ubicarlo con exactitud. Tenía los brazos cruzados, una mano apoyada en su boca, sin despegar la vista de Harry. Claro, había sentido esa sensación extraña, una especia de cuerda que lo atraía hacia el alfa extranjero, pero no tenía por qué bajar la guardia. 

—Mi hermano es gran fan tuyo como puedes ver, Harry Styles —dijo Tigr.

Harry sonrió como toda respuesta. Le parecía increíble que si quiera tuviera 'fans', más aún lo lejos que estaba. 

A pesar de todo, su instinto de alfa le decía que debía de proteger. Se sentía incómodo en ese ambiente, y el haber encontrado a su omega tenía mucho que ver. No quería creerse que aquel chico cuya apariencia de por sí no te decía nada de su naturaleza de omega, fuera su pareja que tanto había buscado. Su cuerpo delgado y cubierto por varios tatuajes llamaban a Harry, e interiormente quería responder, pero...simplemente no era lo correcto, lo natural.

—Bien, hablemos de negocios —anunció Tigr y lo guió hacia una sala aparte.

—Me parece excelente —concordó Harry y con una última mirada a Louis,  siguió al ruso.

— ¡Louis, ven! —lo llamó este.

El omega no pudo evitar rodar los ojos. No estaba seguro si Tigr había usado su voz de alfa o no, pero sea como sea, lo obedeció y se sentó en una silla espaciosa, ubicada de tal manera que podía ver tanto a Harry como a Tigr sin problemas.

—Dime Harry, ¿qué tipo de autos necesitas?

El aludido le entregó una lista.

—Las máquinas italianas, unos 10 ferraris me vendrían de maravilla.

Tigr agarró la lista y se la dio a Louis. A pesar de ser un omega, este chico vestido en finas ropas manejaba grandes partes del negocio, sectores financieros, transacciones de dinero, etc. Podría decirse que era el omega más poderoso en toda Europa. 

Levantó las cejas y agrandó los ojos al leer el último modelo de la lista.

Schwierig  [Difícil].

— ¿Eso fue alemán? —preguntó Harry.

—Louis quiere decir que ese último modelo será 'difícil' de conseguir.

Louis.

Así que ese era su nombre. 

—Eso es un pedido personal, desde el fondo de mi corazón.

—Por un millón no vale la pena el esfuerzo —sentenció Louis, clavando sus ojos en Harry. Tenía decir la verdad en todo momento, no podía hacer que Tigr perdiera dinero. Al fin y al cabo, tendría que sobrevivir allí siempre.

—Los compradores a los que represento entienden esto mejor que cualquiera.

—Un millón seiscientos o setecientos mínimo —puntualizó el omega, cruzándose de brazos nuevamente.

—Puedo dar un millón doscientos —regateó Harry, devolviéndole la mirada desafiante.

Louis miró a Tigr, quien con un asentimiento de cabeza le indicó que aceptara ese precio, que estaba bien.

Anarchy 99 ~[En Edición]~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora