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Al llegar a casa decidí darles animos a mi pobre amigo, se lo veía muy mal.
Se sento en el sillon y se quedo ahí mirando el techo, me sente a su lado y me le quede viendo.
El me miro sin mover la cabeza.

-¿Que?

*¿Que de que? Señor aburrido.

-No estoy aburrido, solo que...

*Si es por las palabras de esa mujer no significaron nada para mi -sonrei-

El me devolvio la sonrisa.

-Me alegra escuchar eso, me sentía culpable de que esa mujer te dijiese esas cosas.

*No todo lo malo que le pase a las personas de tu alrededor es culpa tuya Raúl.

-Gracias.

*¿Por qué?

-Todavia lo preguntas -sonrio- para que sea mas simple, por todo.

Me miro con esos penetrantes ojos cafés y con una hermosa sonrisa, no pude  evitar ponerme roja como un tomate, se que no me dijo nada del otro mundo, pero sus palabras llegaron a mi corazón y mas si es el quien me las dices, cada muestra de afecto, alago, agradecimiento, es muy especial ya que viene de el...

Lo mire y le devolví la sonrisa, luego de eso nos pusimos a ver varias peliculas, y adivinen, a eso de 1 pm recordamos  que teníamos que almorzar y tambien recordamos que no habíamos desayunado absolutamente nada, fuimos al restaurante que estaba a unas cuadras de la casa de Raúl asi que decidimos ir caminando mientras hablábamos de las peliculas que habíamos visto hace un rato.
Al llegar al restaurante nos sentamos, ordenamos, despues de comer decidi que era el momento de decirle a Raúl que ya debo irme.

*Raúl, como ya sabes, pues al fin ya tengo el dinero que necesitaba para mantenerme aqui por mi cuenta.

-¿Que tratas de decirme?

*Pues, yo...

Trague saliva, antes de decir aquello, que tal vez a el no le gustara escuchar.

*Yo ya debo irme.

-¿Ya te quieres ir? Espera pago y nos vamos a casa.

Se estaba levantando y lo detuve

*No Raúl, no me refería a eso

Me miro con una cara de desconcierto.

*Tengo que irme de tu casa.

-Ma-maite, pero ¿Por qué?

*No quiero ser una carga para ti.

-No lo eres, para nada eres mi amiga, no...no te vayas.

*Debo irme Raúl, por mi culpa duermes en el piso y no en tu cama como es debido.

Se puso cabizbajo y suspiro.

-No me molestaria dormir toda mi vida en el piso si tu estas a mi lado.

Lo mire admirada mis mejillas comenzaron a arder al instante, el levanto la cabeza y me miro de la misma manera.
Parece que se habia dado cuenta que eso habia sonado como una confesión.

*Emm.. Raúl...

-Ma-maitte yo no queria que eso sonara de la manera que lo hizo, lo siento, es que simplemente no quiero que te vayas y la verdad no me molesta dormir en el piso, para nada.

Se notaba que estaba muy nervioso, la verdad es que no sabia que responder, es que siento que incomodo en tu casa, la verdad aun no se que responder, Raúl me mira esperando una respuesta al instante, al carajo dire que si, el me necesita me lo ha dicho muchas veces.

*De acuerdo, me quedare.

Me miro con alegria, le sonrei, la verdad no sabia si habia tomado la decisión correcta, pero eso ya era lo de menos, estaba junto a Raúl y eso era lo importante...

Querido RaúlWhere stories live. Discover now