Capítulo 29

1K 130 45
                                    

El corazón se le salía del pecho. Había corrido por tantos lugares que ya ni recordaba el camino de regreso, pero sí sabía a dónde iba. Por eso fue que sólo se detuvo cuando llegó a la habitación que estaba buscando. Abrió sin avisar su presencia, y fue detenido de inmediato por dos sujetos que se hicieron presentes para taparle el camino.

– Te has perdido bastante de tu lugar, niño –dijo uno de ellos haciéndolo retroceder al empujarle levemente.

Minhyuk tragó saliva. Por supuesto que ellos podían matarlo, pero no iba a terminar su camino ahí en la entrada de la puerta sin siquiera verle el rostro al maldito que le debía un pedazo de su vida.

– Necesito verlo –dijo mirando al hombre, tratando de darse valor a sí mismo.

– ¿A quién buscas?

– A tu madre –respondió Minhyuk sin poder contenerse– Lo busco a él, obviamente.

– Cuidado por como hablas –le advirtió uno de los sujetos.

Finalmente se hicieron a un lado luego de escuchar un silbido agudo. Minhyuk pasó por entremedio de los sujetos y caminó más allá del escritorio con aspecto normal que había a la entrada. Siguió caminando hasta que llegó a la puerta que el gran librero tapaba a simple vista. Empujó la madera que estaba entreabierta y se encontró con el imbécil que necesitaba.

Sonrió imperceptiblemente adentrándose a la boca del lobo. Cerró la puerta tras de sí, poniéndole seguro y arrastró los pies hasta el hombre que estaba detrás de un gran escritorio.

– Vine a cobrar lo que me robaste, maldito –gruñó el rubio con una expresión sombría.

El hombre simplemente lo observó, bajó sus manos al cajón de su derecha, preparado para sacar un arma de ser necesario.

– ¿Quién eres, niñato? –preguntó porque parecía no recordar quién era aquel niño con apariencia delicada.

Minhyuk apretó las manos en puños y se apoyó sobre el escritorio. En un arrebato de adrenalina, se estiró rápidamente y agarró al hombre del cuello de la camisa para acercarlo a su rostro.

– Soy el chico al que le robaste años de vida en un mes –murmuró– Y vengo en busca del dinero que me debes por ello –.

Por supuesto que Minhyuk jamás necesitó dinero en su vida. Nunca le hizo falta nada. Nunca se atrevió a decir nada contra ese sujeto que se encontraba frente suyo en este momento, pero... ahora era diferente. Ese hombre que lo había metido en lo peor que pudo experimentar a su corta edad, le debía varios años de vida que le quitó llenándolo de químicos, químicos que hicieron en su cuerpo daños que quizá no se veían, pero que eran irreparables. Y necesitaba el dinero. Así que era tiempo de cobrarlo. Pero no lo necesitaba para él, lo necesitaba para pagar la deuda de Jooheon.

– ¿Dinero que te debo? –el hombre arrugó el ceño, reconociendo poco a poco al joven frente a él. Se libró fácilmente del débil agarre que el rubio tenía en su camisa– Yo no te debo nada, mocoso.

– Tuve que estar en rehabilitación por culpa de todo lo que metiste en mí. Eso no salió gratis.

– Fue hace años. Deja de vivir en el pasado. Además, nunca dijiste nada en ese tiempo. Y ahora no voy a darte ningún dinero, no tengo por qué. Deberías agradecer que te voy a dejar salir vivo de aquí.

– Vas a pagarme, maldito –dijo Minhyuk viéndose furioso. Poco a poco la sangre se le calentaba con ira.

– Solo fueron un par de drogas, no es para tanto. Estás tan saludable como un niño.

No esperes por la decisión correcta [ShowHyuk/ShowMin]Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz