Un amor complicado - #1 (1/3)

Un sueño contigo.

Samantha

Al recostarme sentí como si hubiese caído a la nada, simplemente caía y a mi lado había una soga muy larga; intento alcanzarla pero simplemente no puedo... me doy por vencida, pero escucho uno sollozos, son los de Claudia y comienza a decir unas palabras, escucho una puerta cerrarse y siento como si cállese al suelo, abro los ojos y me incorporo.
Al ver a Claudia desplomada en el suelo, me acerco a ella y sonrió con tristeza; me agacho de cuclillas y le doy un beso en la mejilla. -No llores... sonríe por favor.- le susurro con una pequeña sonrisa y la miro con tristeza sin esperar a que me escuche.
La seguí dentro del pequeño cuarto en donde allí estaba mi cuerpo físico; ''-No ah sido nada mas que un susto, ella esta bien-''  Pero ahora que lo pienso ¿a donde fui? por un momento sentí que flotaba, estaba en tranquilidad, pero aún así intentaba alcanzar una soga. 
¿Qué demonios fue eso? pensé para mi. 
Ellá me comienza a regañar, aún así sonrió. Pero lo que mas me llamo la atención fue ''-... yo iré a donde tu vallas.-'' ¿Qué querrá decir con eso? me lo pregunto por un tiempo pero aún así no le doy mucha importancia, me siento en el suelo al lado de su silla mientras toma mi mano, le voy a contar una historia cuando duerma. Se la contare en el oído.
                     2 Horas después

 Por fin se ah quedado dormida, eh pensado en un pequeño cuento para ella. Me siento al lado de mi mano, siendo tomada por la mano de Claudia aún, y recuesto mi barbilla en el hombro de Claudia y mi boca esta al lado de su oído.
-Hola Claudia, lamento entrar en tus sueños pero quiero contarte una historia. Probablemente no me escuches pero probablemente sí, así que me arriesgo.- Hago una pequeña pausa y suspiro, -Imagínate a ti y a mi tomando un viaje en un avión con un largo vestido de novia cada una con una sonrisa en el rostro mientras todas los rostros de las personas nos miran con desaprovación y le tapan los ojos a sus hijos, a mi me gusta esa historia ¿A ti te gusta?- Al decirle eso ella abre los ojos y mira a todos lados y después me mira a mi, quisiera estar en mi cuerpo y abrazarla lo mas fuerte posible. Pero.... simplemente no puedo. ¿Sam?- Susurra y una lágrima cae por su mejilla. -¿Paris?- Susurro en su oído y ella se tapa la boca con una de sus manos y se le escapa un sollozo y yo solo la miro con ternura. -¿¡Sam!?- Lo dice casi gritando, pero una enfermera entra al cuarto. -¿Pasa algo?- Pregunta algo preocupada, pero Claudia niega con la cabeza.- No, lo siento... solo tuve un sueño. Lo siento mucho...- La enfermera solo sonríe y solo asiente. Cierra la puerta dejando en silencio el pequeño cuarto. -Intentare volver...- Le digo en el oído pero ella solo niega con la cabeza. Tengo miedo pero vuelvo a acostarme lentamente al lado de mi cuerpo.
La soga esta allí pero la dejo ir, y caigo a la oscuridad. Y el último rayo de luz toca mis dedos.


Claudia

Esta vez volvió a pasar, el sonido de la maquina sonó en mi oído 4 enfermeras la anteriormente doctora entraron corriendo. 
Solo lloraba, usaron el desfibrilador, una vez. Dos veces. 4 veces mas. Pero simplemente ellá no reaccionaba. -No...- Susurre mirándola detrás de todas las enfermeras, y sin importar que comencé a gritar. -¿¡Porqué Samantha!? ¡Me has prometido viajar! ¡Fugarnos con un hermoso vestido a París! ¡No me puedes hacer esto maldición!- Grite y entraron dos enfermeros por la puerta y me sacaron de allí. -¡Sueltenme!- Exclame intentando volver al lado de Sam pero nada dio resultado, ahora que lo pienso eh sido muy egoísta. Demasiado, ese sueño pudo haber sido parte de mi imaginación. Un sueño en donde Sam y yo estábamos recostadas en la cama llenas de sabanas encima, mientras ellá con una voz ronca me contaba una historia en donde ella y yo nos fugábamos con un hermoso vestido de novia mientras la gente nos miraba con desaprobación y le tapaba los ojos a sus hijos. Sonreí con aún lágrimas en los ojos, mi sonrisa desaparece mientras los dos enfermeros me llevan a un lugar desconocido. mis sollozos gritan y se escuchan por todo el pasillo, personas me miran de todas direcciones, un anciano con un suero conectado a su mano izquierda me mira y asiente con su cabeza, y al ver un cuarto con la puerta entre abierta veo a 2 doctores luchando para revivirlo, un sollozo suena junto con un grito. -¡Necesito volver! ¡Sueltenme! ¡Por favor!- Les suplico e intento irme, demonios. Recurro a defenderme como mi padre una vez me enseño, si estaba en peligro contra dos hombres. 
Golpeé a uno en la entrepierna y el me soltó un brazo y me di la vuelta y golpeé al otro en su entrepierna. Salí corriendo y ya no vi al anciano y al cruzar por su puerta una manta cribaría su rostro, una mujer solloza y yo no me detengo, lágrimas salen de mis ojos y sigo corriendo en busca de la habitación en donde se encontraba Sam. Al llegar intente abrir la puerta de golpe, pero estaba cerrada, y solo logre causar un golpe en mi mano, -Agh- abrí la puerta y allí estaba la madre de Sam siendo abrazada por su esposo consolándola, mientras una de las enfermera cubría su rostro. -¿¡Qué estas haciendo idiota!?- Le grite y ellá miro hacia mi dirección enseguida.- ¿Qué...?- Me miro con tristeza y se detuvo, me acerque a ellá y le arrebate la sabana de sus manos. Y la empuje. Ella dio unos cuantos pasos atrás y me miraba perpleja. -No me mires con lastima. Suficiente tengo con las miradas de lastima que me dieron en el funeral de mis padres.- Le digo sin mirarla a los ojos. 
Cubro a Sam como si estuviese dormida, y sonrío. -¿Recuerdas? ''Yo iré a donde tu vallas''.- Me di la vuelta y mire a la enfermera con odio, y después me acerqué a los padres de Sam, me arrodille ante ellos. -Lo siento.... ¿Me pueden dar su perdón?- Mire hacía arriba y a el padre de Sam le salio una lágrima de su ojo derecho y se agacho a mi lado y me abrazo, al igual que su madre. -Te perdonamos... hija...- Dijo entre sollozos y yo me levante rápidamente, salí corriendo entre sollozos por los largos pasillos, de tantas lágrimas veo borroso, subo por las escaleras hasta el techo del edificio. Salgo y miro abajo. Me rasco las puntas de los dedos y miro abajo mientras me toco mi cuello, con un poco de sangre entre mis dedos. 
Lágrimas caen al vació donde hay trafico.
Me doy una vuelta y miro hacía al frente y solo susurro una frase.
-Samatha, yo creí en ti- Y en ese momento di un paso atrás dejándome caer hacía el vació, y entre en medio del vuelo susurre. -Te amo.- Y después de eso, no sentí nada.


¿Continuara?...




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El fin se acerca, eh llorado mientras escribo esto.
Recuerden mis lectores, que esto es una ''Historia-Borrador'' 
Con amor Fuegomistic.