2. ¿Quién es Chad Smith?

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Chad Smith en multimedia.

—¿Recuerdas la redacción que hiciste sobre él en primero?— dijo mi mejor amiga entre risas.

Estaba realizando una videollamada con ella para contarle lo ocurrido, ya que el día anterior no habíamos podido hablar.

—Maddie...— reí yo también.

—"Su cabello es dorado como los rayos del sol, el azul del océano no se puede comparar al de sus ojos..."— recordaba Maddison haciendo una sorprendentemente perfecta imitación de mi voz de niña pequeña.

—¡Mad, para! ¡Era una niña estúpida, deja de burlarte de mí!

Mi rubia amiga hizo un intento de ponerse seria y yo la imité, pero ambas estallamos en una enorme carcajada al instante.

—Muy bien, Alexa Woods, ¿quién es Chad Smith para ti ahora?— preguntó Sam apareciendo de la nada.

—¿Cómo has entrado a mi habitación?—sacudí la cabeza e hice una pausa— No ha cambiado mucho— contesté a su pregunta sonrojándome mientras bajaba la cabeza tratando de ocultar mi rubor.

—Oh, Alex está enamorada— aplaudió Maddie desde el otro lado de la pantalla mientras yo la fulminaba con la mirada.

Sam puso los ojos en blanco.

—Pf, vamos ni siquiera lo conozco en persona.

—Pero lo conocerás... Lo conoceréis, ¡qué envidia!— la rubia hizo puchero simulando un bebé pequeño.

—Tú estás con tu familia preparando un viaje a Hawai, no sé quién debería envidiar a quién— bromeé.

—¿Podemos ir nosotros a Hawai?— intervino Sam.

Le dediqué una falsa sonrisa:

—No.

—¿Quién es Chad Smith?— volvió a preguntar mirando a todos lados.

—¿Quién es Chad Smith?— le siguió el juego mi mejor amiga.

Si las miradas matasen estos dos haría tiempo que estaban muertos y bien muertos.

En ese momento, el sonido de la televisión de la habitación de Maddie, que llevaba todo ese tiempo encendida, nos llamó la atención a todos.

—Chad Smith, el joven cantante que se ha coronado como la mayor estrella de la música de la década actual, a pesar de su corta edad, pasará con su tour mañana por nuestra ciudad. Las entradas ya están agotadas y es que el artista causa gran sensación...

—¡La mayor estrella de la música de la década!— exclamé ante mis amigos— Él es Chad Smith.

—La mayor tontería de la década— bufó Sam.

—Y mañana empezaremos nuestro viaje por su tour— ignoré sus palabras mientras hacía mi extraño baile de la victoria.

—Oh, dios mío, Alex— sollozaba Maddie—, ya estás cumpliendo tus sueños.

Mi vecino volvió a poner los ojos en blanco, yo simplemente le enseñé mi lengua.

¿Quién es Chad Smith?— lo imité poniendo la voz más grave que conseguí hacer.

—Chad Smith es un niñato al que la fama le viene grande— respondió enseguida.

—¡Él no es así!— reaccionamos mi amiga y yo al unísono—¿Estás celoso, Samuel?— dije yo esta vez, levantando una ceja.

—No, solo digo que las apariencias engañan y él seguro que actúa como si fuera el centro del universo cuando no hay cámaras delante.

—La diva de Chad— rió Maddie, provocando que yo también ría pero Sam mantenía su seriedad con los labios fruncidos— ¡Adiós chicos, ya nos vamos! ¡Hablamos cuando llegue a Hawai!

—Bye, Maddie— le envié un beso.

Mi amigo simplemente levantó una mano como despedida.

—Bebé Sammie está celosillo— dije con voz de nené apretándole los mofletes a mi vecino y me senté en su regazo. Por aquel entonces Maddie ya había colgado.

—Lo siento— volvió a rodar los ojos sarcásticamente.

—¿Algo que me quieras contar? Soy todo oídos.

—Cuando dices eso te imagino como Dumbo— rió.

—Estúpido— dije aprentándole la nariz. Él se levantó conmigo en brazos y al salir de la habitación golpeó "sin querer" mi cabeza contra el marco de la puerta.

—¡Auch!

—¡Lo siento, no lo hice a propósito!— se quejó.

—Tu sonrisa te delata, Samuel— me quejé golpeándole su musculoso pecho. Él hizo amago de dejarme caer pero antes de que mi trasero tocara el suelo me levantó.

—Capullo— lo golpeé de nuevo.

Ya habíamos llegado a la cocina, donde nuestras madres estaban conversando sentadas a la mesa.

—¡Alexa, cuida ese lenguaje!— rechistó la mía.

Le dediqué una mirada fulminante a Sam, él solo me sonrió y me bajó de sus brazos, esta vez con delicadeza.

—Hacéis una pareja estupenda— señaló su madre con una sonrisa tierna en su boca.

Al escucharla, me atraganté con la manzana que acababa de meterme en la boca y vi que Sam se sonrojaba sin saber qué decir.

—Ya tengo novio— se me ocurrió decir aunque inmediatamente me arrepentí de haber dicho eso delante de mi madre.

Los cuatro abrimos los ojos como platos ante la situación.

—¡Y yo tengo novia!— exclamó Sam para sacar la atención de mí.

—Gracias— le susurré para que nadie más me oyera y él me guiñó un ojo—. Y justo ahora hemos quedado con ellos para despedirnos antes de que nos marchemos con el tour de Chad— tiré del brazo de Sam para salir de mi casa y escabullirnos.

—¡Adiós, chicos! ¡Lo siento!— se ruborizó mi vecina.

Cuando salimos, escuché a nuestras madres cuchichear sobre "nuestras parejas".

—Lo siento— canturreé con una inocente sonrisa en la cara.

—Ay, Alexa Woods, nunca cambiarás— suspiró.

—Oh, Samuel Bennett, eso te encanta.

Cuando volví a casa, la madre de Sam ya se había marchado y no vi a mi madre por ninguna parte pero sabía que cuando me la encontrase, me iba a interrogar.

—¡Alex!— una voz femenina me sobresaltó. Era Silvia, la madre de Samuel, que me llamaba desde su ventana.

—¿Sí?

—Siento meterme en esto pero, ¿podrías contarme sobre la novia de Sam?

—No creo ser la indicada para hablar contigo de esto, ¿por qué no se lo preguntas a él?

—Porque él no me lo contará— me sonrió con la clara intención de sonsacarme.

—Su novia es una maravillosa persona, no tienes de qué preocuparte, la conocerás en el momento indicado— mentí y cerré la ventana dando un suspiro.

Silvia se quedó mirándome pero yo la ignoré y entré en la ducha.

Mañana vería a Chad Smith.

Mañana conocería a mi ídolo.

Mañana hablaría con él.

Mañana lo abrazaría.

Mañana tendría mi primera foto con Chad Smith, la mayor estrella de la música de la década.

Y no sería la última.

El último veranoWhere stories live. Discover now