𝐴𝑣𝑒𝑛𝑡𝑢𝑟𝑎 𝑠𝑒𝑐𝑟𝑒𝑡𝑎 | 𝑆𝑀

7

Farah intentó salir de la cama. Sólo se había levantado para ir al baño y acababa de decidir que estaba harta. El doctor le daría de alta al día siguiente al saber que tenía alguien para cuidarla.

Tras ducharse se puso un pantalón suelto y una camisa de tela suelta. Después se secó su cabello lo mejor que pudo con una toalla y se lo dejó suelto para que terminaran de secarse.

Se acababa de instalar en el sillón junto a la cama cuando la puerta se abrió y Shawn entró con dos grandes bolsas de comida para llevar.

Ella se inclinó nerviosamente hacia delante mientras era inspeccionada por los ojos café miel.

— No deberías haberte duchado antes de que yo viniera — mientras colocaba las bolsas en una pequeña mesa.

— ¿Desde cuándo te preocupas
por mi? —

— Farah, Pudiste haberte caído. Deberías haberme esperado o, al menos, haber llamado a la enfermera —

— ¿Y cómo sabes que no llamé a ninguna de las enfermeras? —

— ¿Lo hiciste? — él la miró burlonamente.

— Ese no es tu asunto —

— Si estás embarazada de mi hija, entonces sí es asunto mío —

— Escucha, Shawn, que esté embarazada de tu hija no te da ningún derecho sobre mí. Lo déjamos muy en claro  —

Incluso mientras pronunciaba las palabras era consciente de lo estúpidas que sonaban. Se mordió el labio y desvió la mirada mientras su mano se posaba amorosamente en la barriga.

— Como sea — Shawn empezó a sacar la comida de las bolsas, actuando como si ella no hubiese dicho nada. El olor llegó hasta la joven cuyo estómago empezó a protestar.

— Te traje varias cosas para comer, la comida de aquí es una mierda.

— Gracias, Muero de hambre —

Él llenó dos platos y le sirvió uno antes de sentarse en el borde de la cama con el otro.

— Me recostare en la cama para que puedas sentarte en el sillón —

— Pareces estar cómoda ahí —  él sacudió la cabeza — Yo estoy bien —

Comieron en silencio aunque ella era consciente de que la observaba. Sin embargo, se obligó a ignorarlo y se concentró en la deliciosa comida.

— Gracias, por la comida — suspiró cuando ya no pudo comer ni un bocado más.

— No hay de que, debes volver a la
cama — él le retiró el plato y lo dejó sobre la mesita.

— No quiero — ella sacudió la cabeza —
Estoy bien aquí, no estaré en la cama todo el santo día, sólo no debo permanecer de pie mucho rato —

— Tú médico me dijo que mañana te dara de alta y necesitas reposo para tú próxima operación, estaba pensando en rentar una casa para ti y tendrás a tu propia enfermera que cuide de tí —

—  Mucho mejor así no tendre que soportarte—

— Pero no será por mucho tiempo en cuanto nos casemos vivirás conmigo —

(...)

Shawn y Farah se encontraban cenando,  Ya habian pasado varios días desde que Farah había salido del hospital.

— ¿Y no piensas hablarme? —

— Porque debería hacerlo —

— Vamos Farah, lo siento, no debí hablarte hací en el hospital, me deje llevar, estoy acostumbrado a que la gente me engañe y lamento pensar que tú lo harías. Si te soy sincero no me arrepiento de la noche que pasamos juntos.

— No lo parece —

— No fue nada personal, mantengo una estricta política sobre no tener ninguna relación amorosa con algúna de mis trabajadoras —

— ¿A que se debe eso? —

— La ayudante personal de mi hermano Cameron se enamoró de él, pero también vendió secretos de la empresa y chantajeó a la que en aquel tiempo era su novia y ahora es mi cuñada —

— Porque no me lo dijiste lo hubiera entendido, Pero sigues siendo un ldiota y te odio —

— ¿De verdad? — Shawn río — Ya terminé y debo iniciar con los preparativos para nuestra boda —

— ¿Puedes prestarme una computadora?, mi celular sólo es para llamadas y mensajes —

— Tengo un regalo para tí ,
No pienses que te estoy comprando
O algo así, cuándo vi tú celular pensé "Demonios quién tiene un celular así" —

— Tenia otras prioridades, no gastaría mi dinero en un estúpido celular —

— Por ésa razón te compré éste —
Shawn saco un celular de una bolsa alparecer era de los más nuevos

—  Te debió costar una fortuna —

— Eso es lo de menos —

— No puedo aceptarlo —

— Tómalo y sube a tú habitación o quieres ayudarme con los preparativos —

— Esta bien dámelo, Gracias —

— De nada cariño —

(...)

Después de horas de aprender a usar el celular, Farah escribió un mensaje a su amigo Kirk sólo para decirle que estaba bien y digamos comprometida.
Después de eso Farah dejó el celular en la mesa de noche, había sido un día largo.

Shawn subió las escaleras hasta el dormitorio de Farah. Llevaba varías horas en su habitación, tiempo más que suficiente para terminar sus asuntos personales y dormir.
Tocó la puerta, pero no hubo respuesta. Preocupado, la abrió y entró en el dormitorio. Farah estaba tumbada con el rostro enterrado en las almohadas. Profundamente dormida. Parecía agotada.

Se acercó a la cama para taparla, pero algo vibró, era el celular de Farah
Tenía un nuevo mensaje

Kirk
Farah, No hagas algo que no quieres. Casarte con él no es la solución encontraremos otra forma,
Estaré allí en cuanto pueda tomar un
vuelo.

Shawn se puso tenso.
¿Quién era ese tipo?, ¿Y porque Farah lo contactó? Ella había accedido a casarse con él, y eso iba a hacer. Shawn permitiría que las decisiones las tomara otro hombre.

Sin dudar, eliminó el mensaje.

Durante largo rato contempló el rostro de la joven. Incluso dormida, parecía preocupada.
¿Qué demonios había sucedido en su vida? No confiaba en él y Tampoco él en ella.

Shawn se prometió a si mísmo que no la lastimaría, pero, Si le había mentido sobre el bebé,

la aplastaría sin pensárselo dos veces.