Dilemma [ VHope ]

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Seguí la voz de HoSeok, cada vez estaba más cerca podía sentirlo, extrañamente la voz de HoSeok me tranquilizaba, no sabía si era por el simple hecho de ser un ángel o si era por lo que sentía por él. ¿Cómo me había enamorado de él? Ni yo tenía la menor idea, al inicio sólo era un juego que SunHi y yo habíamos creado, sabía perfectamente fingir así que SunHi y yo siempre montábamos ese numerito de los amantes que se encuentran de nuevo, sin embargo, hubo algo en HoSeok que me hizo amarlo.

Recordé aquella escena, donde yo perseguía a HoSeok tratando de convencerlo en que le diera su cuerpo a SunHi, recordaba con claridad la expresión de tristeza de HoSeok al ver que yo sólo quería a SunHi, aquellos ojos cristalizados y enrojecidos por las lágrimas, esa fue la primera vez que odié nuestro juego, había algo en él, había algo que había movido mi muerto corazón. Aquella vez que tomé su brazo e hicimos que viera a como SunHi quería que viera no me sorprendí por haber "visto a SunHi" lo que me sorprendió fue aquella corriente eléctrica que mandó por mi cuerpo, como si ese hubiese el contacto que más ansiaba mi cuerpo. Vi mi mano, fue en ese momento cuando comencé a desarrollar sentimientos hacia él, de repente quería verlo más, de repente quería ser amado por HoSeok. Por suerte SunHi jamás lo notó, hasta que le dieron un cuerpo humano a petición de HoSeok, ahí fue cuando notó que yo ya no sentía absolutamente nada por ella.

—Ya casi llegas...— la voz de HoSeok me sacó de mis pensamientos y seguí caminando, ahora estaba dentro de un bosque, me sorprendía donde lo habían escondido, era imposible encontrarlo, por lo menos para un demonio como yo —Sólo sigue...— en ese momento la voz de HoSeok cesó en mi cabeza

—¿HoSeok?— pregunté —Respóndeme HoSeok— alcé la vista para encontrarme con un gris cielo, la batalla iniciaría más que pronto, estaba seguro de ello, tenía que encontrar a HoSeok cuanto antes

—Pero miren a quién tenemos aquí— cerré los ojos molesto al escuchar aquella voz —Kim TaeHyung, el demonio que me mandó al infierno— volteé y me encontré con SunHi, Jimin y  NamJoon

—¿Acaso no eres más feliz en el infierno SunHi?— pregunté con un tono burlón —Creo que debías de estar allí desde hace décadas— respondí

—El jefe te está buscando— interrumpió NamJoon —Quiere que seas tú el que inicie el ataque contra los ángeles— sonrió —Así que será mejor que vayamos TaeTae— suspiré

—Está bien, vamos, todos— dije mientras veía a SunHi, ella sólo sonreía de forma burlona

—Sí, vamos todos— en ese momento desaparecimos y en menos de un segundo nos encontrábamos en las puertas del cielo, realmente era una enorme puerta, ya veía porque todas las almas querían ir allí —Las puertas del cielo— sonrió SunHi mientras caminaba hacia ellas —El sueño de todos los humanos— rió levemente —Incluso fue nuestro sueño en algún momento ¿verdad TaeHyung?— me vio con una divertida sonrisa 

—Creo que sólo fue mi sueño en algún momento— respondí. Nuestra historia había sido algo parecido a lo que recordaba, habían pasado miles de años desde aquel tiempo, ciertamente ella y yo estábamos perdidamente enamorados el uno del otro, yo era un bandido y ella era de la nobleza, ella siempre supo aparentar cosas que no era, siempre aparentó ser inocente y amorosa, eso fue lo que más me atrajo de ella, sin embargo, jamás lo fue, lo supe hasta que ella murió y yo me convertí en un demonio para vengarla. Ella en cuanto se hizo un fantasma se pegó a mi, yo era feliz así, con ella a mi lado, pensando en que así sería toda la eternidad, hasta que ella dijo "¿Los ángeles podrían resistirse al amor?" ambos teníamos curiosidad y así fue como ella decidió lanzar la maldición sobre esos pobres y desdichados ángeles. Los primeros años fue lo más genial del universo, tengo que admitir, ver lo estúpidos que eran al dar su inmortalidad sólo por el amor de dos personas, realmente era divertido. 

Pero el día que vi a Elizabeth sufrir tanto, ese ángel que tanto luchó por mantenerse viva para no pasar la maldición de nuevo fue cuando me di cuenta de que, tal vez, lo que hacíamos SunHi y yo pasaba los límites, ese fue el momento en el que un poco de humanidad regresó a mi, y ese mismo fue el momento en el que vi lo retorcida que era el alma de SunHi, ella ansiaba ver a gente morir, ella causaba desastres por sí sola, el día que decidí revisar el pasado fue cuando noté que ella, incluso cuando éramos humanos, era retorcida, no podía entender como no la mandaban al infierno inmediatamente.

—¿En serio?— río y se acercó a mi —Yo también soñé con el cielo, el cielo junto a ti— sonrió levemente mientras me abrazaba por el cuello —Hasta que me separaron de ti— esa era la verdad, en cuanto a ella le prohibieron verme fue cuando comenzó a volverse loca, incluso me contaron que había matado a un par de personas, pero no lo había hecho ella misma, ella había influenciado a otros para asesinar a esas personas, obviamente no se ensuciaría las manos.

—Sigo sin entender como no te mandaron al infierno en cuanto moriste— respondí mientras la veía

—Se fingir muy bien cariño— sonrió mientras acercaba su rostro al mío —Tan bien como tú fingías sentir algo por aquellos ángeles— río —Te perdono cariño— dijo de un momento a otro —Sé que me mandaste al infierno, sin embargo, te amo demasiado y creo que me hiciste un favor— en ese momento me separé de ella 

—Yo no te amo SunHi, dejé de hacerlo hace un tiempo ya— 

—No puedo creer que ese estúpido ángel te haya cambiado— dijo enojada mientras me veía 

—¡Chicos! ¡Iniciemos la guerra ya!— gritó el jefe, todos volteamos a verlo, ahora detrás de mi había miles de demonios, todos ansiosos, sedientos de sangre, vengativos, lo peor de lo peor —¡Al ataque!— en ese momento todos los demonios comenzaron a correr hacia aquella enorme puerta, antes de que llegaran varios ángeles lanzaron flechas derribando a bastantes nuestros, una vez que te "mataban" te regresaban al infierno y de allí no salías hasta que encontraras un cuerpo que poseer de nuevo y poder subir. Al cabo de unos minutos lograron derribar a aquellos ángeles y abrieron las puertas, había miles de ángeles detrás de ella

—¡Defiendan!— gritó uno de ellos, en ese momento empezó la guerra principal, ángeles y demonios luchando unos contra otros, pude ver como salían miles de luces indicando la muerte de miles de ángeles junto con miles de cenizas y fuego, indicando la muerte de miles de demonios. De repente vi a Archer, el jefe de los ángeles, estaba acabando con todos los demonios que se le acercaban, corrí hasta donde estaba él para ayudarle, pero en ese momento nuestro jefe o "mi padre" corrió hacia él, comenzaron a pelear, realmente era una pelea dura, ambos estaban ya bastante heridos. Antes de que pudiera ir a apoyar, vi como SunHi comenzaba a alejarse de toda la pelea, sabía perfectamente sus intenciones, así que decidí seguirla.

Bajamos hasta el bosque donde había estado hacía unos momentos, para mi mala suerte no fui el único que decidió bajar con ella, también venían algunos otros demonios, tenía que llegar antes que todos ellos.

—HoSeok, respóndeme— murmuré desesperado mientras seguía a SunHi

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Ya está cerca el capítulo final afdsafas ;--;

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