Andrea es la asistente de la madre del famoso cantautor Charlie Puth con quien no ha tenido mucho contacto hasta que su jefa los une y los sentimientos de ambos comienzan a florecer. ¿La fama los separará o podrán mantenerse unidos?
En los dos días que tenía libres durante la gira, decidí ir a casa para intentar avanzar en algo con Andrea. Tenía que recuperarla y no lo podía hacer a miles de km de distancia. Apenas llegué a California recibí una llamada del director del próximo video "Dangerously" para hablarme sobre la modelo que aparecería allí. Ella era de California también y me pidieron que me reuniera con ella esa misma noche para ponerla al día con todo el proceso de grabación, así que la llevé a cenar (esto también era una "táctica de publicidad" que me pedía el estudio). Cuando llegamos al restaurante y nos sentamos para ordenar pude sentir que alguien me miraba... y allí estaba... unas cuantas mesas más allá estaba Andrea, con un tipo que no combinaba en lo absoluto con ella. No podía creer que tuviera una cita.
Estando allí hice todo lo posible por evitar la mirada de Andrea, pero al mismo tiempo deseaba que me viera sentado allí con otra chica para ponerla celosa. Clary y yo comimos mientras hablábamos de dónde estaba el set de grabación y de cuál era más o menos la idea general del video. Casi al terminar la reunión vi que Andrea salía velozmente, y algo molesta, del restaurante dejando a su cita prácticamente botada. Algo había pasado y me preocupé, así que me despedí rápidamente de Clary y corrí tras Andrea esperando no ser visto por las fans.
Andrea se detuvo en un parque no muy lejano y estaba sentada en un columpio...llorando.
- ¿Estás bien? – le pregunté preocupado.
Ella volteó y me miró fijamente con la cara roja por haber llorado - ¿Qué haces aquí Charlie?
- Decidí venir a casa en mis días de descanso. Se supone que tú arreglas mi itinerario, pensé que sabías que venía – me senté en el columpio de al lado.
- Sí lo sabía. Me refiero a ¿qué haces aquí conmigo? ¿No se supone que estabas en una cita? – dijo sin verme.
- Tú también estabas en una cita. ¿Cómo estuvo? – de verdad no quería saber pero estaba actuando "amigable".
- ¿Acaso no me viste salir huyendo de allí? – dijo en tono amargo.
- Sí, por eso estoy aquí. Estaba preocupado.
- Pensé que no me habías visto – ahora me estaba viendo.
- Andrea – la miré – Yo siempre te veo – pude notar como se ruborizaba.
- Bueno, mi cita tenía una ligera obsesión con lo fitness
No pude evitar reírme mucho. Eso era algo que ella odiaba – Eso definitivamente es un Strike 1 contigo, ¿no? – Se rió
- Eso es exactamente lo que pensé. Debido a su obsesión me dijo que no le gusta la pizza
- ¡Ouch! Strike 2 – me reí.
- Y... odia a los perros – hizo una mueca.
- Señoras y señores esto es un ponche... Strike 3 – Hice una seña como en los juegos de beisbol - ¿Qué demonios hacías en una cita con alguien así?
- Intentaba olvidarme de ti – me dijo viendo al suelo.
La sinceridad con la que dijo esa frase fue algo revelador. Ella no quería alejarse de mí, estaba obligándose a sí misma a hacerlo por alguna razón.
- Andrea... - tomé su mano viéndola directamente a los ojos – No me olvides por favor.
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