"Verdades" Capítulo 27.

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No entendía quien era ella, Carlos no tenía muchos amigos aquí, y lo único que hacía era mirarme entrecerrando los ojos. Su voz se me hacía familiar. 

-Quién eres?-Digo enojada.

-No recuerdas esa vez en la que contestaste el teléfono y era yo?-Dice y me hace recordar por que se me hacía familiar su voz.

-Si, pero eso fue hace mucho tiempo y Carlos me dijo que lo suyo ya había terminado, verdad Carlos?

-Asi es, qué haces aquí?

-Tranquilos que no he venido a arruinar nada, simplemente quería despedirme de él, porque hemos terminado muy mal, lo siento. 

-Cómo sabías que me iba a casar?

-Eso no es algo de lo que te tengas que preocupar.-Dice y me enojo aún más corriendo por el pasillo hacia la primer puerta que veo y Clara va detrás de mi. 

Salgo de la iglesia corriendo y me siento en un escalón, Clara comienza a dejar de correr y se sienta a mi lado mirándome.

-Se suponía que hoy iba a ser el mejor día de mi vida, el más esperado. Y de pronto llega ella para que todo se vaya por la borda. 

-Pero cómo supo que hoy te casabas?

-No lo se, seguramente sigue hablando con Carlos y él le dijo para que venga a interrumpir la boda porque de seguro no quiere casarse conmigo.-Dije y Clara hace una expresión de exageración. 

-No digas eso, si él no quisiera casarse contigo no estaría aquí, de seguro ella lo averiguó, no tienes que ponerte así, de verdad que el te ama.

-Si me ama entonces por qué se puso así cuando la vió?-Digo y noto que Clara no sabe que decir asi que me abraza, pero eso no soluciona nada, esta vez, no es suficiente un abrazo. 

La puerta de la iglesia se abre y veo a Carlos acercarse a mi, Clara me da un beso en la mejilla y se va dejándonos sólos. 

-Tú se lo dijiste?-Digo en voz baja.

-Por qué yo haría eso...

-Entonces cómo lo sabe? Cómo sabe que nos casaríamos?-Digo en tono alto.

-Crees que lo se?

-Eres el único de aquí que la conoce. Tu que crees.

-Creo que no confias en mi.

-No puedo hacerlo, lo hice cuando ella te llamó y me enteré que estabas conmigo y con ella al mismo tiempo. Te perdoné, pero ahora? Cuál es la excusa? Porque ha pasado tiempo ya.

-Marie deja de hablar como si estuviera engañádote!-Grita furioso.

-No lo haré, porque estoy harta de que me hagas esto. Si estabas con ella entonces por qué accediste a casarte conmigo?

-No estaba con ella! 

-Si lo estábamos Carlos, dile la verdad.-Oigo detrás nuestro a la chica decir y volteo a verla. 

-Eso es cierto?-Digo gritando.-Carlos! Tú estuviste con ella?

-Marie creo que no deberíamos casarnos hoy.-Dice Carlos y mi corazón se rompe, Clara sale de la iglesia nuevamente por los gritos y se queda observando sin entender.

-Mejor no nos casemos nunca.-Digo llorando y comienzo a correr.

*Relata Clara*

Me acerco hacia Carlos y le doy una cachetada, empujo a esa tal chica y comienzo a correr a Marie quien iba quitándose el velo y los zapatos mientras lloraba y corría. No puedo creer que él le haya hecho esto a ella, no lo merecía, Marie es la mejor persona del mundo, llena de defectos como cualquier otra, pero eso es lo que la hace especial. Y ella ha estado esperando este momento durante mucho tiempo y que llegue el día y todo termine así no es lo correcto. 

Llegando a casa subo las escaleras rápidamente y veo a Marie tirada en su cama llorando desconsoladamente, me recuesto a su lado abrazándola y tomando su mano. 

-Por qué me ha hecho esto a mi? Después de todo, ha estado viviendo en mi casa y nos falló, a todos.-Dice corriendo su maquillaje.

-Marie...no le des el gusto de verte mal, destruida, porque no debes hacerlos ganar. No a ellos, porque no lo mereces. El no te amaba de verdad, porque una persona que realmente lo hace te dice toda la verdad, aun sabiendo que dolerá, lo hace para evitar más dolor. 

-No lo se Clara, quizás las personas a veces callan para no lastimar, a quién no le duele la verdad? 

-Y tú como lo sabes. Si tu siempre me has dicho la verdad. 

-No. 

-No qué?

-No siempre lo hice. 

-Cuándo no lo hiciste?

-Ahora.

-Pero...

-Tu madre tiene cáncer Clara. No te lo hemos dicho porque teníamos miedo a como reaccionaras, yo insistí en decirtelo, miles de veces, pero nadie quiso. Y debí callarme.

-Qué? Pero por qué no me lo dijiste?

-Por tu madre no lo hice.

-Y por mi quien hace algo? Todos piensan en ella pero nadie en mi, todos lo sabian menos yo que era la principal en hacerlo!

-Lo siento Clara, no pude hacerlo aunque quería. 

-Ahora entiendo porque te ha pasado esto, en realidad si lo merecías.-Digo y salgo de la habitación llorando. 

*Relata Marie*

Se que no debía hacerlo, pero si lo dije fue porque no podía continuar guardando un secreto así. No podía hacerlo porque ella en mi lugar me lo hubiera contado todo, y yo le fallé como mejor amiga que se suponía que era. Si se enojó está en su derecho. 

Escuché cuando llegaron nuestros padres, escuché cuando Clara fue a hablar con su madre, cuando Carlos quiso entrar para explicar todo y no lo dejaron, mi madre entró a mi habitación y apagó la luz dándome un beso en la frente y susurrando que son cosas de la vida.

-Me ha roto el corazón. Me ha roto las ganas de seguir adelante.

-Piensa que ahora estás a un corazón menos de encontrar a tu verdadero amor, aunque quizás el lo sea, pero para darte cuenta lo debe probar.-Dice y me cubre con las sábanas.

-Clara...cómo está? 

-Ella no está bien, pero está tratando de descansar.

-Mamá lo siento, se que no debí hacerlo.

-Está bien, algún día se enteraría y no ibamos a poder ocultarlo mucho más.-Dice y cierra lentamente la puerta. 

Mis ojos no podían cerrarse, mi labios estaban secos y me sentía mal. Me levanté con las pocas fuerzas que aún tenía, abrí la puerta y caminé hasta la habitación de Clara encontrándola acurrucada junto a una almohada temblando, entré y cerré la puerta suavemente, me acosté a su lado rodeandola con mis brazos y poniendo su cabeza en mi hombro mientras dejaba de temblar lentamente.

-Todo mejorará. Siempre lo hizo. Lo mejoramos siempre juntas. Lo mejoraremos una vez más. Si?-Digo susurrando y ella asiente durmiéndose por completo.

Logramos mejorarlo cuando tuvo un accidente, cuando sucedió lo de Elías, cuando abortó, cuando tuvimos que separarnos por distintas academias, miles de veces. Una vez más necesitamos activar la barrera de apoyo de una a la otra, salimos miles de veces de muchos problemas en los cuáles es difícil salir, pero lo hicimos juntas siempre, y siempre será así. 

Solo quiero seguir tus pasos...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora