—¿Qué escuchas? Me aburro, cuéntame algo.

Sí, después de todo, con veintidós años había acabado por volverme un infantil hiperactivo.

Pero, aunque Jungkook no mostrase ni el más mínimo cambio de tono o pareciese molesto, sabía que le gustaba así.

Y por eso lo hacía

—Se está emitiendo una entrevista en directo de Zion.T

Me tumbé a su lado y el conectó uno de aquellos adaptadores para la salida de audio.

—Hoy sale su nuevo single

—Anda ¿En serio? Podrías haberme avisado

—¿Desde cuando eres fan de Zion.T?

—Sólo me gusta su música, tranquilo, no te lo voy a robar ni nada— rio.

Me coloco los cascos y nos quedamos en silencio.

Estar con Jungkook era totalmente agradable, siempre lo había sido. Desde qué éramos trainees, siempre había sido así. Me quedé a su lado, mirando el gotelé y la lámpara del techo sin prestar demasiada atención a la entrevista, quedándome finalmente dormido.

No desperté hasta mucho más tarde, cuando llegaron los demás.

Trajeron un montón de comida China, como de costumbre, y comenzó de forma graciosa aquella típica vida de familia demasiado ruidosa y repleta de testosterona.

Namjoon habló sobre política durante un rato y de alguna forma, Hoseok derivó la conversación hasta terminar discutiendo sobre quien poseía los bíceps más prominentes y mejor formados. Yoongi perdió y reímos hasta que Jin acabó por dormirse encima de la mesa y Taehyung le puso una de aquellas diademas con orejas que solían regar nuestra casa.

Preparamos helado con barquillo que el manager había comprado semanas atrás, y ninguno habló sobre que dentro de dos días volveríamos a la rutina, ni sobre nuestras familias, ni de lo mucho que nos dolía la espalda.

Y de aquella manera lográbamos ser felices juntos.

A las doce los chicos empezaron a perderse por la casa, buscando cualquier sitio mullido donde pudieran descansar, y Junkook me llamó desde la sala.

—Hyung, son las doce— y cargando el portátil desde la habitación añadió —Zion.T

Nos sentamos como de costumbre, en el sofá, con Junkook recargado sobre mi hombro, como cuando todos estaban cansados y obviaban nuestra presencia.

Llevaba el portátil sobre las piernas, donde había preparado en páginas simultaneas melon y youtube.

—¿Preparado?— y le di el visto bueno con un sonrisa cuando me coloqué los cascos. Me encantaba el lado tierno e inocente de Jungkook, podía ser una super estrella y actuar como el fan más fiel a sus ídolos el mismo día.

El chico prosigue sin ser consciente de como lo miro y el video comienza a reproducirse.

Casi me da un vuelco al corazón al escuchar aquella canción.

Para ser sincero, había pasado más de la mitad de la entrevista mirando al techo que intentando escuchar las cosas que Zion.T decía y las preguntas que el rapero Tablo hacía. Así que es bastante coherente que ahora, cuando tengo el título de aquel nuevo single de Zion.T frente a mis ojos me sorprenda bastante.

—¿Yanghwa daegyo?

Y es inevitable el no poder esconder la sorpresa en mi voz.

Pero Jungkook no se da cuenta y sólo tapa mi boca con su mano, esperando que me calle.

El corazón me va a mil por hora y me hace recordar todas aquellas cosas que viví en aquel sitio.

Madre mía ¿Cuánto tiempo había pasado?

Me urgió un malestar repentino, como si todo pasara a cámara rápida y yo fuese el único que se había congelado en aquel lugar. Mis músculos no respondían mientras toda mi vida había pasado por delante, ¿Por qué había pasado tanto tiempo? Mi cabeza no paraba de repetir aquello.

Jungkook puso su mano sobre mi rodilla.

—¿Estás bien? Estás sudando

Aquella noche dormí con el reproductor abierto, repitiendo una y otra vez la canción, y Junkook me echó la bronca a la mañana siguiente porque le había prometido que no le iba a robar su ídolo.

Parte 1/2



Surpraiiiis, vuestras amenazas han llegado.

Gracias por no abandonarme, os quiero infinito y todo lo que eso implica. *Corasón*

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Nov 16, 2016 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Yanghwa - Park JiminWhere stories live. Discover now