Capitulo IV

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Domingo por la mañana.

Harry se removió en su cama, podía sentir la luz traspasarse por las cortinas, no quería abrir los ojos, seguramente quedaría cegado, el rizado se acurruco más en la cama con toda la intención de dormir algunas horas más.

El rizado sintió como alguien lo beso en la frente, Harry rio bajito y abrió los ojos un poco, pero no era la persona que quería ver, la sonrisa de Harry despareció al encontrarse con Zayn mirándolo fijamente.

—Buenos días bebe—susurro Zayn tocándole el rostro de manera lenta.

—Buenos días—el rizado se acercó un poco más al moreno acurrucándose junto a él—¿Cómo dormiste? —Harry no podía seguir mirando a Zayn a los ojos, era algo incómodo o quizá se sentía como la peor escoria del mundo.

—Dormí bien porque estás conmigo—comento el moreno acariciándole el brazo.

—¿Qué harás el día de hoy? —pregunto Harry.

—Tengo que atender algunos asuntos. Las cosas en la automotriz van mejor que nunca. Tengo que ir a la agencia a revisar algunas cosas y después regresare a casa, no me tardare mucho—sonrió el moreno—Podemos pasar la tarde juntos ¿Te parece bien?

—Me parece perfecto—Harry rodeo a Zayn de la cintura y soltó un gran suspiro—Podemos ver una película o solamente abrazarnos. ¿No te parece?

—Claro que si Harry—Zayn tomo de la babilla a Harry le dedico una gran sonrisa—Te amo Harry. Te amo muchísimo.

Harry trago saliva y dejo un beso en la mejilla de Zayn para después ocultar su cara en el cuello del moreno aspirando su delicioso aroma matutino. El rizado tenía un gran nudo en la garganta, en verdad se sentía mal por estar en esa situación, aunque quisiera escapar de su pasado este lo había alcanzado y no solamente eso, se dio cuenta que olvidar a Louis seria muchísimo más difícil de lo que llego a pensar. Escapo por algunos años de ese pasado, pero ahora lo tenía que enfrentar y era muchísimo más difícil.

Después de estar algún rato acurrucados Zayn se levantó, se dio un baño y partió rumbo hacia el trabajo, el moreno se la pasaba trabajando y eso hacía que Harry se sintiera verdaderamente orgulloso, había dejado esa vida que tenía con su padre y ahora era un hombre de bien.

Harry se quedó en la cama un poco más. Tenía tantas cosas que pensar y debía poner sus sentimientos en orden y despertar a la realidad. Tanto él como Louis estaban casados y tenían una vida. Una vida en la cual ya no había espacio para "ellos".

El móvil de Harry sonó terminando con sus momentos de meditación, el rizado se estiro y tomo su teléfono. Era Lindsey. El de ojos verdes de acomodo en la cama y aclaro su garganta antes de contestar.

—¿Si? —respondió el rizado.

Toma. Responde tú. ¡Mierda Lindsey! Emm. ¿Hola? ¿Harry?

El rizado se quedó en silencio. Era la voz de Louis.

Soy Louis, lo siento, Lindsey está comprando algunas cosas me ha dicho que te maque. Dijo que era urgente, lo siento si te despertamos.

—No. Ya estaba despierto. ¿Qué deseas? ¿En dónde está Lindsey? ¿Por qué me hablaste tú? ¿Qué sucede? ¿Te encuentras bien?

—Si—rio bajito—Estoy bien Harry. Gracias por lo de ayer. Y bueno. Mejor que ella te explique. Hasta luego.

—Si.

Silencio incómodo.

—¡Hola Harry! ¿Cómo estas guapo? ¡Tengo una noticia impresionante! Y un poco triste, pero creo que es algo bueno. Aunque no del todo.

You are only mine. Forever- Larry StylinsonWhere stories live. Discover now