Adoptada por 5SOS y 1D || Wattys2017

Capítulo 54

Me levanté de golpe al no escuchar la alarma en ningún momento, después de que mi cerebro lograra funcionar de manera "correcta" mire la mesa de noche que se encontraba a un lado de mi cama, el reloj marcaba que eran las siete con cincuenta y cinco minutos, ¡Yo entro a la escuela a las ocho!
     Bajé a la cocina después de haberme vestido literal con la ropa de ayer, tomé el vaso de jugo de naranja que se encontraba en donde yo me siento regularmente y bebí el líquido con demasiada rapidez.
     — ¡Toma el jugo con cuidado, terminaras ahogándote! —reprimió Liam tomando el vaso de mis manos y colocándolo en la mesa. Comí las tostadas que se encontraban en mi plato, dejando casi la mitad y me coloqué la mochila en los hombros.
     — ¡Louis corre! ¡Si no traes aquí tu enorme trasero de puta te lo cortaré! —chillé desde afuera de la casa esperando a que el castaño se dignara a salir.
     Cuando lo vi bajar las escaleras con el celular en mano corrí hasta él y lo jale del brazo haciendo que cayera su celular, lo guie hasta el auto y lo metí en este, cuando estuve adentro arranco el auto en dirección a la escuela, casi muero por no haber cerrado la puerta a tiempo.
     Cerré la puerta una vez abajo sin escuchar a Louis entre corriendo, tomé mis libros del casillero y entre al salón justo a tiempo, ya que segundos después el timbre sonó indicando la hora de entrada y el comienzo del largo día que me espera por delante.
     —Creo que volviste a llegar tarde —dijo Reign una vez que ya me encontraba sentada en la mesa de al lado. De todas las clases en el mundo nos tenía que tocar química a la primera hora de la mañana.
     —La alarma no sonó esta mañana —susurré en su dirección soltando una leve risa, volví a incorporarme y seguí escribiendo.
     —Tu cuello está completamente morado, querida —dijo Jack con pose de diva y haciendo una mueca extraña, me sobresalte en mi lugar y llevé mi mano a la zona dicha, claro que se trataba de los chupones que había dejado Reign.
     —Mosquitos —contesté como si no fuera la gran cosa.
     — ¿Desde cuando los mosquitos dejan chupones? —preguntó Oliver alzando su ceja izquierda, mordí mi labio inferior y pensé en una mejor respuesta.
     —Es que me caí de las escaleras y me encaje algo de los chicos, es tonto, por eso no dije la verdad —murmuré de manera rápida tratando de convencerlos, lo que creo yo funciono por qué no volvieron a preguntar y siguieron escribiendo.
     Reign soltó una risa que solo nosotros escuchamos, sonreí de medio lado y seguí escribiendo y tratando de forzar a mi mente a poner atención. Pronto los timbres fueron sonando uno a uno como cada mañana, y el séptimo timbre dio paso al receso, guarde mis cosas en la mochila y salí del salón esperando encontrar a Reign y a Jack, pero no fue así, en su lugar estaba Ian esperando a un lado de los casilleros de enfrente de la puerta.
     Fingí no haberlo visto y seguí mi camino pero llegó a mi lado impidiendo mi paso. No me quedo de otra que ser llevada por el rubio hasta la cafetería.
     — ¿Y las marcas? —preguntó de manera curiosa pasando un dedo por ellas, mi piel se estremeció al instante por el tacto ajeno.
     —Fue jugando con Michael, me mordió algo fuerte jugando —mentí en parte, Ian no era tan tonto como Jack, fácilmente uno se daba cuenta que eran mordidas o chupones, pero no fácilmente se puede saber de quién.
     Tomamos una bandeja y colocamos comida arriba de esta, una vez estuvimos listos tuve que sentarme con los del equipo de fútbol en donde Thara y sus "discípulas" también estaban. Cuando Ian se sentó en la mesa me jalo a su lado, el resto del equipo comenzó a hacerle burla al rubio acerca de nuestra relación, Thara estaba comiéndose a besos con el defensa y sus "amigas" se encontraban comiendo y siendo idolatradas por el resto del equipo.
     Hubo un momento en el que Ian ya no estaba concentrado en mí así que utilice esa oportunidad para escapar y tirar las envolturas que ya no me hacían falta.
     —Oh sí, claro que sí, yo la salvé de aquel balón que venía en su dirección —dijo Reign llegando a mi lado y con una voz más grave de lo normal—. Creo que no te la pasas tan bien con tu novio.
     —Claro que no, es un idiota que no juega ni bien.
     — ¿Quieres escapar conmigo?
     Asentí de manera frenética, el pelinegro tomó mi mano y me llevó hasta las canchas, cruzamos el largo patio y nos colocamos detrás de las gradas, aunque no solo éramos nosotros, solo que arriba de nosotros había pequeños grupos hablando o estudiando.
     Reign se sentó colocando su espalda contra la pared detrás de las gradas e hizo que me sentara entre sus piernas, me recargue en su pecho y él rodeó mi cintura con sus brazos abrazándome a él.
     — ¿En la noche vamos al lago? —preguntó con un tierno puchero, reí al verlo y besé su mejilla asintiendo.
     — ¿No íbamos a grabar hoy?
     —Cambió de planes, mañana grabamos.
     Está vez teníamos la idea de vestirnos como superhéroes, así como una vez los chicos lo hicieron para el video de Don't Stop, claro la diferencia es la canción obviamente. El timbre de nuevo rompió nuestro momento nos levantamos y caminamos rápido ya que nos encontrábamos un poco retirados de nuestro edificio, al llegar entramos al salón y fuimos a nuestros asientos.
     — ¿Hasta mañana?
     Las clases terminaron más rápido de lo que creí, eso porque no tuvimos la última clase ya que la maestra de español nunca llegó, Oliver se encontraba hablando por teléfono con Calum para ponernos de acuerdo con la grabación del video, pero al parecer no podían llegar a un acuerdo.
     — ¡Vengan acá! ¡Hoy grabaremos! —gritó Michael desde al auto una vez que aparco enfrente de la escuela, el castaño apagó su celular y corrimos al auto entrando en este, ni siquiera pude cerrar la puerta cuando el teñido arrancó sin previo aviso.
     — ¡Michael! ¡Maneja con cuidado! —gritó Reign sosteniendo mi cintura y salvándome de no caer, Jack quien estaba en el asiento de atrás con esfuerzo cerró la puerta.
     Llegamos minutos más tarde al estudio, en dónde Michael nos guió hasta una pequeña sala dentro del edificio al que habíamos entrado segundos antes.
     — ¡Esperen! ¡Llegamos! —gritó Calum llegando a nuestro lado y Luke venía con él.
     — ¿Cómo llegaron tan rápido? —preguntó Michael.
     —Poderes de negro —respondió Cal guiñando un ojo.
     —Poderes de idiota —murmuró Luke a su lado pero enseguida desvió la mirada queriendo evadir la mirada de Calum. Ashton llegó poco después y subimos a una de las tantas plantas del edificio, entramos a una sala con vitrales enormes que sustituyen las paredes. La habitación estaba llena de roperos y estantes con zapatos y ropa de todo tipo.
     —Creo que hoy solo veremos vestuario —dijo Luke mirando a todas partes, los cuatro nos adentramos más a la habitación, yo por mi parte me quede en un lugar solo mirando la ropa de lejos.
     —Oh por dios, no, tu dile a Drake que no volveré a peinar de nuevo su jodido cabello, no, claro que no, ¿Sabes qué? Pásame a Bell, sí, me lo acaba de decir, eres un idiota Drake, ¿Quién te manda a hacer eso?, ¡No! ¡Te hablo después!
     Una pelirroja entró a la habitación con el celular pegado a la oreja, y no falta destacar que estaba peleando con alguien y además que era Drake Bell. La chica aparentaba veinticinco años e iba bien vestida a decir verdad.
     —Disculpen la molestia, mi nombre es Sam, y les ayudare con su vestuario y en todo lo relacionado a ello.
     —Debimos ir con Lou —rodó los ojos Calum con una sonrisa burlona.
     —Pues si quieres vete, mejor sola que contigo —soltó la chica "molesta".
     —Ya, sabes que es una broma.
     —No puedo creer que sigas molesto por el traje verde lima, que aunque digas que no te quedaba mejor que a los otros tres.
     Calum la miró con el ceño fruncido y sacó su lengua como si fuera un niño pequeño, mientras nos probamos las cosas, Jack estaba merodeando por todas partes, cuando Oliver se fue a probar el suyo Jack terminó colgando de un ropero, traté de ayudarlo pero fue imposible.
     —Creo que podrías ayudarme —le dije a Reign mientras jalaba el brazo de Jack. El pelinegro se acercó a nosotros y rodeó mi cintura con sus brazos, pensé que iba a jalarme para bajar al rubio pero solo me abrazó y dejó caer su mentón en mi hombro.
     —Creo que he terminado.... ¡Pero que le hicieron al niño! —gritó Oliver saliendo de los probadores, corrió hasta nosotros y con dificultad bajamos a Jack, quien a los pocos segundos se echó a correr hasta caer dormido en el sofá.
     — ¿Pero qué fue lo que pasó?
     Después de dos horas los cuatro habíamos terminado de probarnos cada vestuario, yo me quede con un pantalón de mezclilla de color verde militar, llevaba una blusa negra y una camisa con estilo de camuflaje. El de Reign era un pantalón de mezclilla de color negro y una camisa igual a la mía, el de Oliver era igual con la diferencia de que llevaba una camisa de color rojo con negro, y Jack llevaba una camisa sin mangas de color verde.
     Y como era de esperarse todos llevábamos botas negras estilo militar. Cuando terminamos regresamos a casa, aún no teníamos la fecha fija de cuando grabaremos el video, pero al menos ya teníamos la idea en mente; al llegar a casa los chicos se fueron a la suya y yo regresé a la mía.
     —Creo que me debes una gran explicación, pequeña —dijo Harry con cara pícara, lo mire de manera extraña y solté una pequeña risa nerviosa.
     — ¿De qué estás hablando?
     — ¿Cómo ocurrió lo de las marcas? Ya sé que fue Reign.
     — ¿Cómo estás tan seguro de que fue él?
     —Por qué no tienes otro novio, además nunca dejarías que Ian te tocara ni un cabello.
     Estuve hablando con Harry por varios minutos, los cuales pronto se hicieron en una hora, además que me prometió no decirle nada a Louis, pero estoy más que segura que él ya se dio cuenta de las marcas en mi cuello. Regresé a mi habitación para poderme recostar un largo rato pero Ian llamó.
     Ian: Paso por ti a las ocho, no quiero un no por respuesta.
     No quiero ir con Ian, no estoy dispuesta a seguir estando con él, así que pase lo que pase esta noche terminaré con él, terminare con la farsa que el solo creo como la loca idea de que estamos juntos como una pareja que parece feliz cuando realmente no lo es. No le tomaba tanta importancia a la cita, tal vez así se dé cuenta que no me interesa en lo absoluto. Cuando me di cuenta ya eran las ocho de la noche y ni un segundo más ni menos la bocina de un auto se hizo presente, para asegurarme mejor eché un vistazo por la ventana de mi cuarto, enfrente de la puerta principal se encontraba un auto negro, en definitiva era él.
     Baje casi corriendo las escaleras para llegar a la sala en donde se encontraba Louis peleando con alguien detrás de la puerta.
     —Ya le dije que ella no irá a ningún lado —gritó Louis cruzándose de brazos.
     —Señor, en verdad una disculpa pero a mí solo me pidieron venir por ella.
     —Si no se va y le dice a ese jodido rubio que con mi pequeña niña no se meta los guantes le quedaran de...
     — ¡Llegue! Saldré un rato con Ian —interrumpí—. Si no regreso en dos horas a casa, llamen a la policía —brome para después salir de casa.
     El señor de mediana edad abrió la puerta trasera del auto para dejarme entrar, y así lo hice, cuando me di cuenta de que algo faltaba me giré para decirle al señor pero este ya se encontraba rodeando el auto para entrar al asiento del piloto.
     — ¿Dónde está Ian? —pregunté mirando por el retrovisor.
     —El señor Swift no pudo presentarse en este momento, así que me pidió que pasara por usted, y dijo que podía tomar lo que quisiera, dentro de la caja hay ropa, por si quiere cambiarse —dijo esto para subir el cristal polarizado.
     Además de que no se digna a venir quiere que me cambie de ropa por un tonto vestido de color rosa, ¿Quién se cree que soy? ¿Thara Swift?, no conoce nada de mis gustos y se hace llamar mi novio.
     Me cambie por la ropa ridícula que me había comprado el rubio y un tanto decepcionada tome unas golosina y una copa con jugo de uva, pero cuando bebí de lo último escupí todo en seguida al darme cuenta que era realmente vino. Minutos después sentí como el auto fue bajando velocidad hasta quedar completamente inmóvil, mi puerta fue abierta segundos después y el señor se hizo a un lado para dejarme bajar.
     Enfrente de mí había una mansión probablemente mucho más grande que la de los chicos, era mejor que la casa de los chicos, la casa de los Swift no solo tenía un jardín tipo laberinto en la parte frontal, tenía vista al mar.
     —Gracias por traerla Peter.
     —Es un placer señor Swift —se despidió el señor.
     Ian se encontraba en la puerta de la casa vestido de traje negro y zapatos que se veía que no tenían más de una puesta. Ian bajo las escaleras para llegar a mi lado y tomarme de la cintura.
     —Bienvenida.
     —No entiendo como no te logras perder en la entrada —brome señalando los grandes arbustos.
     —Son años de vivir aquí, por cierto, lo siento por el vestido rosa, sé que eso no es tu estilo y mucho menos los tacones así, pero fue idea de Thara y siento que soy terrible persona por eso.
     —Tranquilo, lo entiendo.
     —De igual forma, combinan con tus ojos verdes.
     —No es divertido.
     —No, pero te hizo sonrojar, ¿No es así?
     Lo empuje levemente haciendo que perdiera el equilibrio pero enseguida lo recupero soltando leves risas, puedo jurar que en algún momento escuche la misma frase pero por parte de Reign, tomó mi mano y me guió hasta la puerta de la casa para así dejarme pasar primero, lo que me sorprendió aún más porque la mansión es más grande por dentro que por afuera.
     — ¿Ian? ¿Hijo? ¿Quién era? —preguntó una señora de cabello rubio que venía bajando las escaleras mientras acomodaba el arete de su oreja derecha.
     Llevaba un vestido negro con blanco su cabello estaba suelto pero bien planchado, y su maquillaje no estaba tan extravagante como el que suele usar Thara.
     —Mamá, quiero presentarte a Raven, mi novia —sonrió Ian haciendo un ademán con su mano izquierda.
     —Es un placer cariño —saludó la señora otorgando un beso algo rudo en mis dos mejillas. Poco después Ian me presentó a su padre, a Taylor y a Thara, aunque las últimas dos me miraban con cara de frustración y de mala manera.
     La familia me llevó hasta la sala principal en donde nos llenaron a ambos de preguntas sobre nuestra relación, desde que había llegado aquí en mi cabeza solo recordaba a Reign y nuestra noche en el lago así que mientras los padres de Ian hablaban de una señora que ni ellos conocían bien me disculpé para ir al baño.
     Raven: No creo poder llegar a tiempo, Ian me trajo a su casa, estoy algo atrapada.
     Reign: Descuida, papá me llevó a la inauguración de una tienda de ropa de Sheryl.
     Raven: Ojala esto acabe pronto.