Capítulo 18. Estrategias para Calormen

2.8K 269 77
                                    

—¡Lo que propones es una matanza!—exclamó Peter, cuyos gritos acompañó con un golpeteo de la mesa que tenía a un costado.

—¡Les estoy proponiendo la solución a su problema!, ¡¿y así es como la niegan?!—contraatacó Caspian.

—¡Problema en el cual tú nos metiste!—le encaró Peter.

—¿Entonces hay algo mejor que propongan?—Caspian se dejó caer en el trono, la cabeza le pesaba como si tuviera rocas adentro.

—¿Crees que un simple asesinato termine con esto?—le recalcó Peter su idea errónea.

El evento de la boda que uniría a Calormen con Narnia sería en dentro de una semana, irían solo ellos y un guardia que nombraría Caspian para cuidar a Lucy cuando ella tuviese que presentarse individualmente a las reuniones.

El plan de Caspian consistía en acabar con la vida del heredero a la corona y la del rey de Calormen, en silencio y huir del lugar por la madrugada del día del baile de compromiso.

Sería demasiado arriesgado. Los Pevensie no estaban convencidos de que fuera la mejor idea, estarían en territorio enemigo. Cualquier error les costaría no sólo la vida sino también la libertad de las tierras Narnianas.

Por más resistencia que sus corazones imponían, sus mentes no lograban formular otra estrategia. Por lo que al final acordaron realizar el plan.

Lucy no estaba segura de que aquel plan resultara, pero simplemente se limitó a asentir y a retirarse cuando fue el momento.

—Eso es todo—algunos se voltearon hacia la puerta para comenzar a salir, pero se detuvieron en cuanto Caspian reiteró su habla—. Por cierto. Quiero que los entrenen—señaló a los hijos de Astan con un gesto de cabeza. Edmund y Susan asintieron—. Pueden retirarse.

Uno por uno fueron saliendo como almas en condena rumbo a sus alcobas. Al final la puerta se cerró y el único que permaneció de pie mirando al rey en su trono fue Peter, quien lo juzgaba con la mirada, cruzándose de brazos.

—Caspian. Estás arriesgando demasiado—soltó el sumo monarca.

Caspian se llevó las manos a la cabeza. Estaba harto de cargar con las responsabilidades de aquella corona que parecía caer hasta su cuello, cambiando su metal a hilo, convirtiéndose de un adorno de superioridad en su cabeza a un collar de soga en su cuello.

—¿De qué hablas?—fingió no entender.

—Si pierdes esta estrategia, perderás más que una deuda con Calormen. Perderás la poca lealtad que te tienen aún algunos de tus súbditos.

—¡¿Tú cómo sabes eso?!—se quejó Caspian, levantándose del trono de un arrebato.

—No es necesario ser tonto para no reconocer lo que dicen de ti.

Caspian se colocó frente a frente con Peter. Enseñaba los dientes cuál fiera. Enseñaba en su estado físico la fuerza que le era imposible mostrar en su estado psicológico.

—¿Y qué si pierdo esta estrategia?.

—¿Crees que me preocupa lo que sea de ti?—Peter soltó una carcajada—. ¡Me preocupo lo que nos pase a nosotros!. ¡Porque entre los escombros de tus errores nos arrastrarás a nosotros!.

𝑵𝑨𝑹𝑵𝑰𝑨: 𝑳𝒂 𝑬𝒔𝒑𝒂𝒅𝒂 𝑫𝒆 𝑪𝒓𝒊𝒔𝒕𝒂𝒍✰︎ೃ °➫𝑪𝒐𝒎𝒑𝒍𝒆𝒕𝒂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora