Estaba anonada, sorprendida y nerviosa. No sabía que responderle. Pero si sabía todo lo que había pasado con él. Con él… tuve mi primera noche de amor. Con él tuve los mejores cuatro años de mi vida, prácticamente, fueron perfectos.
- Si no quieres, lo entenderé – dijo él y lo miré con ojos cristalizados
¿Cómo podría decirle que no a quien le entregué mi cuerpo en una noche inolvidable? ¿Cómo podría decirle que no a quien me ayudó a olvidar a mi primer y único fracaso en el amor? ¿Cómo le diría que no a la persona que me consoló cada vez que me acordaba de Zayn? ¿Cómo le diría que no a la persona que me hiso convertirme en mujer? ¿Cómo podría negarme a la persona que me protegió tanto, arriesgando su propia vida? Simplemente no… no podría negarle los cuatro años que pasamos juntos.
- Si – contesté desde lo más profundo de mi alma.
- ¿De veras? – preguntó sorprendido
Una lágrima cayó, bordeando mi mejilla.
- Si – repetí con un hilo de voz y ojos llorosos
Él sonrió y se paró para abrazarme.
- ¡Sorpresa! – exclamaron cuando les abrí la puerta.
Había pasado un mes desde que acepté ser la esposa de Austin. Había pasado ya un mes desde que no volví a hablar con Zayn o con alguno de los chicos.
- Mamá, papá – sonreí
- No podemos creer que te vayas a casar, hija – habló mi papá
- Ni yo – respondí sonriente.
- Espero que te sientas feliz con esta decisión – dijo mi mamá, algo seria
- Si ma, lo sé – contesté
- Bien, hay mucha ropa que comprar, la boda es en un mes – dijo mamá
Me tironeó del brazo hasta salir del departamento.
Caminamos unas cuantas horas buscando un vestido para mi mamá. Cuestión que era difícil de encontrar por el hecho de que es un poco complicada con la ropa.
Estaba manejando mi auto, con mi madre en el copiloto.
- Ma, creo que deberías ser menos exigente con la ropa, eran lindos vestidos.
La radio empezó a sonar y mi mamá me hiso una seña de que me callara.
“Hola, somos One Direction y este es nuestro nuevo single, Little things, que cantaremos en vivo” dijo la radio, con las voces de los chicos y mi mamá abrió los ojos como platos
- ¿¡One direction!? – exclamó - ¿¡______, ellos no son los chicos!?
- Shh, ma – dije y subí un poco más el volumen
Little things comenzó a sonar. Que hermosa canción. Era la típica canción de amor que te dedican tus amantes… pero esta tenía más sentimiento, más emoción. Pude detectar cada voz.
- ¡Ese es Zayn! ¡Ese es Zayn! – dijo mamá mientras se cantaba una estrofa – que hermosa voz tiene
- Si… lo sé – dije casi en susurro.
Esa canción me llegaba al corazón. Era lenta y hermosa en verdad.
- Exijo que me lleves al canal de radio – dijo mi mamá
- Claro que no – dije
- Quiero ver a Zayn – dijo amenazante - me llevarás con él, ______
La miré con ojos entrecerrados. Esta mujer sería capaz de no hablarme por días si no le doy lo que quiere. Y así fue. Tuve que llevarla a donde quería.
Llegamos y se bajó rápidamente.
- Conozco a One direction, déjeme pasar – le dijo al guardia de seguridad.
- No mienta, señora – dijo el hombre
- Yo estuve con ellos en un baile – dije – ¿no vio la entrevista?
- Lo lamento, pero no puedo dejarlas pasar
Desvié mi mirada y lo vi a Liam, saliendo.
- Mira, mamá, es Liam – le dije
- ¿Dónde? – preguntó entusiasmada
- Allí – señale el lugar – ¡Liam! – exclamé un par de veces y él volteó
El morocho se acercó a nosotras.
- ¡Pattie! – exclamo mientras se acercaba a mi madre y la abrazó, esquivándome por completo.
Le hice una seña de victoria al guardia, que me miró con ojos entrecerrados.
- Oh, Liam, que lindo y grande estás, no puedo creerlo – dijo mi madre, llorando
- ¿Nos deja pasar señor? – le preguntó Liam al guardia.
- Pasen – dijo y se hiso a un lado. Todos pasamos.
- No has cambiado nada, Pattie – dijo Liam, con una gran sonrisa.
- Tú has cambiado muchísimo – dijo mi mamá, mientras seguíamos caminando.
- Espera a ver al resto de los chicos – dijo y abrió una puerta, todos se encontraban cantando.
Mi mamá miró a todos consecutivamente, no podía creerlo. Los chicos entrecerraron los ojos, hasta que Lou se dio cuenta de que era mi mamá.
- ¡Pattie! – exclamó y la abrazó
- ¡Louis! – exclamo mi mamá, correspondiéndole el abrazo – ¡Cuánto has crecido! ¡Estás hermoso! – dijo mi mama
- Te sienta muy bien el rubio – dijo Lou con una enorme sonrisa separándose de ella.
El resto de los chicos se acercaron.
Desvié mi mirada a Zayn… ya no tenía su hermoso cabello. Había hecho algunos cambios en el.
