Capítulo 5:

465 24 1
                                    

- Arriba linda – me despertó mi papá
Me paré, froté mis ojos y me dirigí al baño, donde me alisté y baje a desayunar.
- ¿Estas lista? – dijo mi mamá luego de terminar de subir todo al taxi
- Vamos – dije, contemplé mi casa por ultima vez y me subi al auto.
El viaje a California fue largo y cansador, pero al fin llegué


*4 AÑOS DESPUES*
- Hola cielo – saludo Austin, mi morocho y lindo novio
- Hola amor – dije y lo besé 
- A que no adivinas – dijo divertido
- Vamos Aus, dime – dije riendo
- Se me ocurrió ir de viaje a Londres, acampar – dijo con una enorme y blanca sonrisa.
- ¿Tu crees? – Pregunte no tan conforme
- Oye, hace 4 años estamos juntos, ¿no quieres viajar conmigo? – Pregunto “ofendiéndose” en broma
- Esta bien – reí y lo besé
- Genial – exclamó él – mañana salimos
- ¿Qué? ¿Tan rápido? – Pregunté
- Pues, lo arreglé hace mucho, sabía que no te resistirías – dijo haciendo una cara de seductor que a mi me hiso reir
- ¿Hace cuanto tiempo tienes esto preparado? – Pregunté curiosa
- Hace mucho, linda – dijo besándome – mañana a las 6 pasa el taxi para llevarnos.
La idea de volver a Londres me fascinaba, extraño mucho esa ciudad
- Esta bien – dije – me iré a dar una ducha
- Genial, yo preparo la cena – dijo y me fui al baño y el a la cocina.
Tardé alrededor de 20 minutos, y 10 para ponerme el pijama, pasarme crema y cepillarme el pelo. Cuando salí fui directo a la cocina y abracé a Austin, quien se encontraba terminando de preparar los fideos con tuco o mejor dicho, spaghetti.
Lo abracé por la cintura y apoye mi cabeza en su espalda, mientras el reía y continuaba preparando la cena.
Me podría haber quedado tranquilamente dormida en su espalda, el es muy comodo, todas las noches duermo en su pecho y duermo muy bien.
- Ya está la cena, cariño – dijo dándose vuelta y yo quedé en contacto con su comodo y marcado pecho, él rió - ¿tienes sueño? – preguntó riendo
- Un poquito – dije riendo
- Vamos, cenemos y luego dormimos – dijo y fui hasta la mesa, donde me senté y el trajo la cena.
La velada fue hermosa, hablamos sobre el tema del viaje y también revivimos el momento en el que nos conocimos.
*Flash back*
Cuando llegue a mi nueva escuela, allí solo faltaban semanas para que terminara el ciclo escolar, y al estar en ultimo grado, se hace un “baile” de graduación. Yo decidí que no iría ya que no conozco a nadie.

En el almuerzo me serví un sándwich y una manzana, con un vaso de jugo. Estaba sentada sola. Ese era el día en el que se haría el baile de graduación, y todos estaban eufóricos por ello, lo que a mí me generaba gracia.
Un chico de ojos marrones pero medios verdosos, morochos, altos y al parecer fuertes por sus brazos se acercó a mí.
- Hey – dijo sonriente, con una blanca sonrisa – Soy Austin, ¿tú eres….?
- _____ Clapton – dije sonriendo
- Es un placer, _____ - dijo tomando mi mano y besándola delicadamente
- ¿Acaso eres un príncipe? – Pregunte riendo
- Quizá, pero moderno – dijo también riendo
- Eres de ultimo año, ¿verdad? – Pregunte curiosa
- Ajam – asintió – tu eres la nueva que entró en mi clase
- Ajam – asentí y el rió
- Y… ¿ya te invitaron al baile? – Pregunto curioso
- No, no iré – sentencié
- Oh, vamos, ¿Por qué no? – dijo haciendo puchero, yo reí
- Pues, porque no conozco a nadie – respondí
- ¿Qué hay si te invito? ¿Vendrías conmigo? – sonrió el morocho llamado Austin
- Quizá – reí
- Ese “quizá” se convertirá en un “si” – dijo riendo – ya verás
En ese momento toco la campana y me dijo que nos encontráramos fuera de la escuela luego de que toque el timbre de salida, yo acepté, ese chico era muy lindo y perfecto que digamos.
La clase de Historia paso lenta pero al fin salimos y ahí lo vi, apoyado contra un auto negro, bonito por cierto.
- ¡Hey! – me gritó Austin
Me hiso señas para que me acercara y así fue.
- ¿Vendrás conmigo o no? – dijo sonriendo
- Está bien – dije devolviéndole la sonrisa – será una buena manera de relacionarme con alguien aquí.
- Genial – dijo con una enorme sonrisa - ¿Por qué no me das tu número? 
- Esta bien – dije riendo
Intercambiamos celulares, cada cual anoto el suyo y me llevó a casa, en el viaje le pregunté detalles sobre el baile, que necesitaba para ver que podría usar y de paso, lo fui guiando para que llegue sin problemas a mi casa.
Austin me dejó en casa y lo despedí con un beso en la mejilla, el se quedo duro, y yo reí ante su reacción pero entré a casa.

"La Felicidad" (Zayn Malik)Where stories live. Discover now