Capítulo 8

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Estaciono el auto y tomo mi mochila. Camino hasta la entrada del instituto y saludo amablemente a algunas chicas que me sonríen, sigo caminando lleno de seguridad por el pasillo y al ver a Kiara, me acerco.

Faltó dos días y no me avisó nada, ni siquiera me escribió para justificar su ausencia, no estoy molesto, de hecho me sentí bastante bien sin ella, pero aun así merezco una explicación.

Se encuentra hablando con las dos chicas que nunca se despegan de ella. Sí, como en las películas, eso es lo mas ridículo de todo. Me detengo junto a ellas y cuando levanta la mirada de sus uñas, sonríe.

—nos vemos después, chicas —dice, y se abre paso para acercarse a mí— ¡Hola, guapo!

Apoya sus brazos en mi cuello sin quitar su linda sonrisa del rostro.

—Hola —saludo, sin muchos ánimos.

—Ug —frunce el ceño—. Soy yo, o tú estás extraño ¿Qué pasa?

Se acerca lentamente a mí y roza sus labios con los míos, se aleja un poco e, inmediatamente bajo la mirada a sus labios.

¡Por favor, soy hombre! No me puedo resistir, y menos a los encantos de Kiara.

¿Por qué no viniste? —pregunto, aun sin dejar de mirar sus labios.

—¡eso! —sonríe—. Te explico después de esto —nuestras miradas se conectan y luego me besa.

El timbre suena, pero eso no es impedimento para seguir con nuestro beso. Cuando el ruido de los estudiantes se hace fuerte, nos separamos.

—¿ahora me dirás? —alzo las cejas.

Hecha su cabeza hacia atrás y suelta una carcajada: —llegaron mis tíos de Australia y… —pasa su dedo índice por mis labios— no podía ser mal educada.

¿Mal educada? El instituto está primero, además, no es la primera vez que da la misma excusa.

lo mismo me dijiste la semana anterior, sólo que eran tus primos de España —suspiro.

—igual amor, son familia —dice, y se aleja de mi.

Camina entre el mar de estudiantes y la veo entrar a su salón. Suspiro y me dirijo a donde veré mi primera clase. Al entrar, el profesor está sacando sus cosas de su bolso. Tomo asiento en mi lugar y saco mi cuaderno, el cual había dejado debajo de la mesa.

El profesor comienza a escribir, así que abro mi cuaderno y me encuentro con una nota.

Tal vez sea tu admiradora.

Sonrío y la abro.

Efectivamente es de ella, esta letra es inconfundible.

Dejo el lápiz dentro del cuaderno y comienzo a leer la nota.

Agus;

Hola, creo que dejaré las formalidades de lado. Esto de escribirte notas me gusta, de verdad, pero no me agrada la idea de que pases por mi lado y ni me notes. Comprendo perfectamente que tienes novia, y que en realidad, no sabes quién soy; pero creo que mis sentimientos hacia ti son bastante obvios. Cualquiera en tu lugar se habría dado cuenta, o eso pienso yo.

En finayer estuviste bastante extraño, y la forma en que les hablaste a tus amigos también fue extraña. Aunque claramente a ellos no les importa mucho eso, es como si fuesen adivinado por qué estabas molesto y prefieran ignorarte. El punto en todo esto, es que no seguiré en este plan de siempre; mirarte, sonreírte –aunque obviamente tu no me sonríes–,  creer que terminarás con tu novia, imaginar que algún día hablaremos y seremos amigos, y quien sabe que más cosas que en este momento no recuerdo. Comienzo a cansarme de escribirte cartas sin respuesta, tranquilo, note culpo por no recibir respuesta, tengo demasiado miedo para decirte quien soy.

De todos modos, no creo que mis sentimientos hacia ti cambien en un futuro cercano. Continuaré escribiendo notas de amor para ti en mi mente, no en físico, pues no tolero verte con Kiara.

Se despide con amor.
Tu admiradora.

Cierro los ojos mientras dejo la nota sobre la mesa e inhalo profundamente, tratando de pasar la extraña sensación en mi pecho. Exhalo y vuelvo a inhalar controlando mí desbocado corazón a punto de salir de su lugar.

Abro los ojos y me encuentro con la mirada de Mia, que se encuentra en la puerta del salón. Su nariz roja por su alergia, sus ojos están hechos agua y sus labios entre abiertos. Aparta su mirada de mí y el vacío en mi pecho se siente aún mas grande.


Aquí les dejo otro capítulo más. Espero que les esté gustando, y es así, voten y comenten.

¿Qué creen que pasará?

Nos vemos en el próximo capítulo.

¡Un beso!

Ocultandome en las notasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora