Mi Hermanastro (elrubius)

Capitulo 22

El doctor y las enfermeras hacían su trabajo mientras todos esperábamos con ansias. Cuando apagaron la máquina definitivamente, un escalofrío paso por mi espalda y toda la habitación estaba en silencio.

Pasaron pocos segundos cuando una respiración se logró escuchar.

¡Era él...Estaba respirando!.

Todos suspiramos con alivio y a mi se me salieron unas lágrimas de felicidad. Estaba vivo y eso era lo único que me importaba ahora.

Nos sacaron de la habitación para que pudieran revisar que todo estaba todo bien. Esperamos veinte minutos y el doctor nos dijo que todo estaba perfecto y que solo debíamos esperar a que abriera los ojos.

Sabía que Ruben estaba vivo. Sabía que el ibaa luchar por todos.

Al día siguiente, nos dejaron verlo. Diane fue la primera que entró con mi padre, luego entró Mangel y Alexby y por último, entré yo. Me coloque en el mismo sitio de todos los días y agarre su cálida mano varonil que era bastante grande para mi mano.

Suspire y empecé a hablar- Gracias -Sonreí- Esperaré un tiempo más para volver a ver esos hermosos ojos verdes que tienes -Cerré los ojos por un momento.

-Pues...no esperes más -Dijo con voz ronca y abrí mis ojos de golpe, para ver como abría sus ojos y como se acostumbraban de nuevo a la luz. Lágrimas caían sin cesar y mordi mi labio por el asombro.

Me miró- Hola -Dijo de nuevo con voz ronca e intento sonreír, aunque lo que consiguió fue una mueca.

-Hola -Susurré- Te amo. Te amo. Te amo. -Me arrecoste a su pecho y lloré y lloré y lloré.

-Deja de llorar -Acaricio mi cabello enredado- También te amo. Estuve escuchándose todo el tiempo y te amo. Jamás te dejaría aquí sola -Levante mi cabeza para mirarle y levanto su mano para acariciarme la mejilla- Trae al doctor. Quiero salir de aquí lo antes posible.

Asenti y antes de levantarme, le di un beso. Un beso de bienvenida. Luego de eso, corri y grité para que algún doctor viniera.

Cuando se acerco nuestro doctor, me dijo que esperaba que no fuera una movida de dedos falsa porque ya no iba a ser gracioso. Rodé los ojos y le dije que Ruben había despertado. Me quitó del medio y entro a la habitación.

Cuando comprobó que había despertado, me echó de la habitación como por quinta vez y fui a avisarles a todos. La sala de espera quedaba algo lejos de la habitación de Ruben así que, fui a decirles con mi mejor sonrisa.

-Ruben ha despertado -Dije y todos se levantaron de sus asientos.

-No jodas tía... -Dijo Mangel.

-No lo hago.

-Gracias a Dios -Dijo mi padre y les dije que esperáramos un poco porque el doctor lo estas revisando.

~•~

Una semana después, le dieron la salida a Ruben, luego de muchos exámenes. Lo acompañé a su apartamento, que por cierto no conocía, y me quedé con el por una semana más para cuidarlo.

Cuando estuvo mejor, decidí regresar al instituto. Ruben me suplicó que me quedara una semana más con el pero no podía. Había perdido mucha materia y exámenes, no podía quedarme.

Regresé a la casa de mi padre y a mi vida normal. A lo que había entendido cuando fuimos a la comisaria para poner una denuncia sobre Irina, no la habían atrapado en el aeropuerto. Eso significaba que la loca estaba suelta por ahí.

Le sugerí a Ruben que volviera a nuestro hogar por cuestiones de seguridad pero el se negó rotundamente por dos razones. 1) No quería ponernos en peligro y 2) No soportaría pasar tanto tiempo conmigo sin darme un beso o comportarse cariñoso.